22

4.1K 541 126
                                    

Me abrazo a mi misma al sentir una descarga fría recorrer mi cuerpo, pero soy envuelta por un cuerpo cálido y protector, él no dice ninguna palabra más solo se queda ahí respetando mi silencio y reconfortandome con su abrazo.

Sentía mis manos temblorosas aún y mis labios, fue una pesadilla extraña, donde no logré ver claramente el rostro de aquel chico era distorsionado, pero sabía que estaba llorando.

—Lo siento...—Murmuro aún en un tono perdido y colocando un mechón pelirrojo detrás de mi ojera.—, por despertarte.—Aclaro mi garganta antes de mirar lo de reojo, él suaviza su ceño frunció y niega un poco.

Estoy aquí para ti, Ida.Él acaricia mi brazo con suavidad antes de depositar un breve beso en mi hombro.

Sus ojos se fijan en los míos cuando se aleja levemente, ladea un poco su cabeza y delinea mi rostro entre la poca iluminación de la recámara, todo esto es tan repentino, pero tan cómodo.

—¿Cómo sueles llamarme?—Frunzo un poco mi ceño al escuchar su ronca y lenta voz pronunciar aquella pregunta.—Trece.—Dice con ese perverso y seductor tono causando que mi expresión se quede en blanco poco a poco y él eleva su comisura.

—Lo escuchaste.—Balbuceo aturdida, y él ríe entre dientes de forma lenta.

Aleja uno de sus brazos de mi cuerpo para tomar mi barbilla entre sus dedos, su pulgar roza mi labio inferior y yo fijo mi mirada en aquel siniestro, pero atractivo rostro de Clapton.

—Es mi número favorito...—Murmura en un tono nostálgico con sus ojos fijos en mis labios.—, un número muy especial para mi.—Eleva su mirada lentamente hasta fijarla en mis ojos.

¿Por qué?

Pero solo podía pensar aquella pregunta, no me atrevía a pronunciarla, no al ver esa tristeza, enojo y afección en su mirada café, sentía que estaba dirigiéndose a mi, o quizás son ideas mías.

—Puedes decirme como quieras.—Habla con suavidad cuando se percarta de donde se encuentra realmente aleja su mano de mi rostro y la deja en mi rodilla.

Veo uno de sus mechones oscuros rozar su frente y acerco una de mi mano para intentar acomodarlo, Trece se queda quieto siguiendo mis movimientos y veo como cierra sus ojos cuando acaricio su coronilla intentando dejar ese mechón ahí.

Clapton relaja su expresión sigo haciendo movimientos lentos entre su suave cabello negro hasta que de un momento a otro, ambos regresamos a recostarnos, Trece con su mejilla presionada en mi pecho y sus brazos rodeando mi cuerpo manteniéndome presionada a él, mientras mis manos acarician su cabello.

No llores, por favor.

Recordar aquello hacia que sintiera una opresión en mi pecho y nuevamente me sintiera culpable, realmente me niego a recordar, sé que algunas de mis pesadillas no eran del todo solo creación de mi cabeza, pero tampoco quiero conectarlas y describir quién fui yo en el pasado.

Quizás dañe o destruí a personas buenas como a ese chico.

La presencia de Trece lograba casi lo mismo que Tyron, es extraño.

♠️♦️♠️♦️

Toma mi rostro girándolo a su dirección depositando un suave beso en mis labios, él me muestra una torcida sonrisa cuando se aleja y yo giro mi rostro al sentir como arde, pero aumenta al encontrar al pequeño niño de rizos castaños pelirrojos.

—Tyron...—Murmuro sorprendida, él fija su desinteresada mirada en el hombre de mi lado.—, ya casi es hora de tu clase de piano.—Sigo aún titubeando, Ellie me dijo que algo que le gustaba a Tyron es ensayar piano y decidí inscribirlo.

CRUELDonde viven las historias. Descúbrelo ahora