- Your Feelings - (GetoxGojo)

6.- Feliz cumpleaños

El crudo invierno avisaba con su blanca nieve cubriendo la mañana, lo poco que quedaba del 2005, y con él, la conclusión de nuestro primer año como estudiantes de Jujutsu.

Suguru se aferraba a mi cuerpo sin la intención de ser delicado. Seguía en lo más profundo de sus sueños mientras me encerraba entre sus brazos haciendo que mi rostro toque su pecho caliente y tonificado.

En el intento de escaparme de su agarre, sentí las manos de mi compañero que ya no fingía dormir recorriendo gran parte de mi espalda hasta llegar a mi cabellera y rostro.

Acarició leve mi mejilla izquierda mientras acomodaba mis cabellos por detrás de mi oreja.

-Feliz cumpleaños, Satoru- Dijo antes de colocar un beso en el centro de mi frente, que no hizo más que sonrojarme.

-G..Gracias- pronuncié con los cachetes inflados y labios caídos.

-Vístete rápido, tengo una sorpresa para ti- Habló con tono juguetón a la vez que se acomodaba en el filo de la cama para no perderse la vista de mi cuerpo desnudo mientras me cambiaba.

Sabiendo que hoy me dejaron el día libre, opté por usar ropa casual dejando de lado mi uniforme azul.
Quería mostrarle otra apariencia mía al chico concentrado por mis movimientos.

O al menos eso quise.

Ya que al ser el cumpleaños de alguien tan "grandioso" como yo.
Toda la escuela quería demostrar lo considerados y agradecidos que estaban por haber nacido en su época y así servirles como su protección.

Así que, antes de ponerme alguna prenda, escuché a lo lejos que tocaban a la puerta que estaba al frente, y como ahora vivo secretamente en la habitación de Suguru, el pelinegro recibió el paquete que me entregaron por parte del director como, "traje formal que debía usar para este día de ensueño y felicidad".

Suspiré decepcionado tras finalizar la nota que venía con la vestimenta tradicional. Tenía fe, pero al ir rasgando más el papel y notando lo que era, más desilusionado me sentía del hecho de que hoy sería un maravilloso día.

-Geto... Antes que nada... ¿No te molestaría asistir primero a una reunión?- pregunté incómodo porque la sorpresa del pelinegro aún tendría que esperar.

-Oh, no hay problema- sonrió cerrando sus párpados antes de él también alistarse.

. .

Aún me era emocionante poder cambiarme libremente en su habitación.

. .

Dentro de una sala, donde muchas personas te miran directamente a los ojos con el rostro arrugado para descifrar el porqué de tus muchos "privilegios", o la envidia que emiten como ondas de calor intensas que envuelven el ambiente ya tenso, tan llenos de odio disfrazándose con caras y palabras que en el fondo son todo lo contrario. Agregando a que te obligan estar ahí, no era más que una tortura bien elaborada.

Sin embargo, mis puños cerrados y temblorosos que eran cubiertos por las largas mangas de mi vestuario tradicional fue lo único que pude demostrar con mi desacuerdo a que se dé a cabo este "festejo".
Y al ya ser más medio día, resoplaba como loco esperando a que se acabe la tortura de acercarme a tanta gente que desconozco y ya repelo.

Me daban sus felicitaciones con presentes que iban apilándose en una esquina de la estrecha sala en donde todos podían observarlos con desgano.

Y siguiendo con mis quejas:

Por ser obligado a estar junto a varios profesores, no pude acercarme a Geto con otra intención que no sea hablarle por susurros intentado no acariciarlo o tomarlo de la mano.