Capítulo XIII

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POV ARIADNA

Llegué a la puerta de mi habitación y cuando iba a entrar oí un portazo.

-¡Joder Eric, abre la puta puerta!- Era Pedri el que aporreaba la habitación del catalán.

¿Sobre qué gilipollez se estarán peleando ahora?

Entré en mi habitación con la intención de desmaquillarme, pero ni cinco minutos de relax tuve, porque ya estaban llamando a mi puerta.

-Eva coño, el día que no te dejes la tarjeta será un milagro...-Abrí encontrándome con Pau.-Eh, hola Torres.

-¿Puedo estar un rato contigo aquí?, Comparto habitación con Eric y parece demasiado cabreado como para socializar con alguien.

Asentí y le dejé pasar.

-Yo no tengo play, así que tendrás que conformarte con mi simple presencia.- Le comenté.

-Tranquila, me conformo.-Puso sus manos en su nuca y se tumbó en mi cama.

-Ponte cómodo eh, no vaya a ser que te lesiones.-Rodé los ojos y volví al baño a desmaquillarme.

Una vez acabé, volví a la habitación y me senté en la cama de Eva.

-Oye, quería darte las gracias por lo del otro día, me fue genial y...-Le interrumpí.

-Pau, no pienso hablar de la paja que te hice.-Reí y me hizo un gesto para que me sentara a su lado.

-Está bien, no hablemos de trabajo.- Su cara cada vez estaba más cerca de la mía.

Y sí, nos besamos, pero nos besamos como si nos fuera la vida en ello. Su lengua y la mía estaban desesperadas por encontrarse. Me senté como pude en su regazo y seguimos a lo nuestro.

Nos separamos por falta de aire y ahí caí en que lo que estaba haciendo no estaba bien. Pau intentó otra vez unir nuestros labios y yo le paré.

-Pau, no debo.-Me coloqué bien la ropa y me volví a sentar a su lado.

-¿Cómo que no debes?-Estaba muy confundido.

-Este ya no es mi trabajo.- Agaché la cabeza.-Se acabó Pau, se acabó el sexo.

-Pero ¿Por qué?

-Hemos renunciado esta misma mañana.-Pau cada vez me miraba más confundido.- Luís Enrique ha dejado que nos quedemos, pero con una condición, nada de vínculos "amorosos" con los jugadores.- Hice las comillas con mis dedos.

Pau negó con la cabeza y se rascó la nuca nervioso.

-Entonces no sé qué hago aquí, Ari.-Bufó y se levantó para irse.

Una vez se cerró la puerta me tumbé en la cama. Esto iba a ser muy duro.

POV EVA

Hoy era el día, la selección española estaba lista para su primer partido en esta Eurocopa.

El míster nos reunió a todos por la mañana para hacernos conocer la alineación de hoy.

-Buenos días a todos, hoy damos comienzo a esta nueva aventura contra Suecia, con la que estoy seguro que vamos a arrasar.-Sonrió el entrenador.- Si os parece bien, vamos a conocer al once de hoy.- Señaló su pantalla.- Unai, Marcos, Laporte, Pau y Jordi Alba en la defensa, Koke, Rodri y Pedri en el mediocampo y Ferrán, Álvaro y Dani Olmo delante.

Miré a Ferrán y a Pedri, los cuales estaban super contentos y les sonreí, de verdad merecían esta titularidad. Por otra parte, no pude evitar fijarme en García, quien estaba cabizbajo en su asiento, lejos del canario y el valenciano.

Una vez todos se estaban yendo de la sala, tuve la necesidad de esperar a Eric, por muy malo que haya sido conmigo, nadie merece estar triste y solo.

-Eric, ¿Estás bien?- Toqué su hombro.

-Eva, no hace falta que vengas aquí por pena, estoy bien.-Caminó hasta el ascensor y yo le seguí.

-Tampoco hace falta que me mientas, y también lo haces.-Apreté el botón de la tercera planta, donde ambos estamos alojados.- Solo quiero ayudarte.

-No puedes ayudarme.

- Si es por la titularidad, Eric, eres un gran jugador, estoy segura que el próximo partido...

-¡Qué le jodan a la titularidad!-Me quedé impactada ante ese comentario y él aprovechó para salir del ascensor.

-¡Espera!-Corrí detrás de él y cuando iba a cerrar la puerta de su habitación, conseguí colarme.- ¿Es por lo de ayer con Pedri?

Conseguí que se girara y me mirara a los ojos.

-Ayer discutí con él y con Ferrán.-Dijo al fin.

-¿Por qué?- dije sentándome en la cama.

-¡Por ti joder, discutí con ellos por ti!

-¿Puedes dejar de gritarme y explicarme porque coño estás así?- Ahora la que se estaba alterando era yo.

-No lo entenderías.

-Intento hacerlo, pero no me ayudas.

-Joder, estoy harto de ver cómo se acercan a ti, de ver como todos ellos pueden comerte con la mirada, y de ellos dos me duele más, porque saben perfectamente que odio toda esta situación.-Soltó.

-Eric, es mi trabajo, para eso estoy aquí.-Me levanté y me acerqué a él.-Pero si este es tu problema, tranquilo, he renunciado a este trabajo, mañana mismo me voy y ya no hará falta que nos veamos las caras.-Se quitó las gafas y sorbió su nariz.

-Soy un egoísta que solo piensa en sí mismo.-Agachó su cabeza.- No quiero que te vayas Eva, solo quiero que te des cuenta.

-¿Qué me dé cuenta de qué?

LUJURIA/ Marcos Llorente y Eric GarcíaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora