Te protegeré nii-san [Kimetsu no yaiba]

12. Unos 15 días de descanso.

UNAS HORAS ATRAZ

Un cuervo aterrizó en la palma de la mano de un señor.

—Así que 8 personas pasaron la selección final, y entre ellas está Muichiro Tokito...

—Creo que ya podemos enviar a su hermano mayor con él —dijo Amane sama.

Oyakata sama asintió tranquilo.

—Si... ahora si podrán cuidarse entre ellos mismos, por favor avisar a la señorita Kocho Shinobu de despertar al demonio, hermano mayor, Yuichiro Tokito.

El cuervo asintió y salió volando hacia la finca mariposa.

—8 cazadores nuevos, ¿Me pregunto que tipo de cazadores serás ellos? Espero que todos consigan sus metas.

Amane sama sonrió dulcemente.

VOLVIENDO AL PRESENTE

Muichiro se encontraba aún abrazando a su hermano mayor, quien tenía una cara de serenidad, los cazadores procedieron a irse, los gemelos Tokito también entraron a la casa, Muichiro estaba muy cansado y quería dormir, Yuichiro se quedó al lado de Shinasugawa.

Sanemi estaba cocinando algo, sin quemar nada, estaba feliz, aunque no se le notaba, Yuichiro le jaló el uniforme.

—¿Qué quieres demonio?—le preguntó Sanemi.

Yuichiro señaló una foto oculta que al parecer lo descubrió él, en aquella foto estaban él y Genya cuando eran todavía unos infantes. Sanemi sonrió.

—Se llama Genya, es mi jodido hermanito, supongo que tu también eras un jodido hermano mayor ¿no? —Yuichiro no respondió nada, parecía haber olvidado su pasado, pero igual negó.—No me mientas, se que lo fuiste mocoso —comentó Sanemi, Yuichiro infló las mejillas por la ofensa, Sanemi Shinasugawa rió de nuevo, le caía bien ese demonio.

Debian esperar unos 15 días para que la espada sea entregada asi que en ese tiempo Muichiro Tokito podía descansar un poco para estar listo cuando se convierta oficialmente en un cazador de demonios.

Ese día fue tranquilo.

DIA 2

—Niño, están tocando la puerta— le llamó Sanemi, Muichiro fué a abrirla y se encontró con...

—Genya... ¿Qué haces a...?— Genya lo terminó abrazando tan fuerte que se quedaba sin aire— ¡Genya suéltame!— le pidió Muichiro.

—¡perdón! pero estoy muy feliz y aliviado de que hayas vuelto con vida ¡CUENTA Y EXAGERA! ¡Debes de contarme como fue todo eso trapito!—le exigió Genya mientras que Sanemi reía por la ultima palabra dicha—¿Nemi estas riendo? —preguntó.