Te protegeré nii-san [Kimetsu no yaiba]

7. La terapia de un diario.

—¡PERO QUE CARAJOS PASÓ AQUÍ TU DEBERÍAS ESTAR EN LA CAMA! ¡Y TU... TU NO DEBERIAS ESTAR AQUÍ!. —Gritó Sanemi asustando a ambos pelinegros, Muichiro abrazó a el pelinegro de yukata morada, y este temblaba de forma chistosa, ambos estaban mirando al albino quien se preguntaba ¿Cómo carajos se encontraron? Bueno... mejor sería retroceder en el pasado.

Unos minutos antes...

Muichiro se encontraba muy concentrado en la tal respiración de la NIEBLA que no le prestaba atención a lo demás, había entrado alguien a la habitación.

—Aniki... te traje ohagi...—se le quedó mirando al "intruso" Muichiro también lo miró, ambos chocaron miradas y de la nada, no se sabía por que , ese chico gritó, y Muichiro le siguió la corriente. —PERDÓN, digo perdón, perdón no quise, no yo no doy gritos así, yo no...—habló el de yukata morada. ¿Sonrojado?

—Esta bien ¿Quién eres tu?—le preguntó Muichiro, aunque ya sospechaba por la similitud con Shinasugawa-san.

—A... bueno... eh..., yo... pues... jeje —dijo rascándose la cabeza.—Genya Shinasugawa, ¿Y usted señorita?— le preguntó. Mas Muichiro no respondía.

¿Señorita? ¿era por el cabello? ¡SI SE LO CORTÓ! aunque estaba volviendo a crecer, se lo cortaría de nuevo más tarde, entonces se dio cuenta de que ese muchacho, Genya Shinasugawa, al parecer su debilidad eran las chicas, hace tiempo que no se divertía, ahora lo haría, le engañaría vilmente, eso sería divertido "que maligno eres Muichiro" se dijo así mismo.

—Eh... Soy Muichiro Tokito—dijo a ver si sospechaba, más no sospechó al parecer nada,  aunque el nombre era la de un hombre.

—Ahh... hola Tokito-sama, ¿Qué hace aquí? —le preguntó. Parecía que no sospechaba.

—Puees, Shinasugawa-san me trajo aquí al parecer ¿sabe donde esta?.— Le preguntó, mas al parecer eso alarmó a Genya quien le sujetó de los hombros y le susurró al oído.

—¿Eres su novia? ¿te secuestró? te trajo aquí sin mas, a mi no me dijo nada—dijo Genya, Muichiro rió, ya mucha payasada por ese día, empezó a reír—¿Dije algo chistoso?—preguntó Genya nervioso y avergonzado.

—NO NO ajajajaja —se empezó a reír a carcajadas. —Yo no soy "novia de su hermano" ni siquiera soy una...—no terminó de hablar pues alguien abrió la puerta de golpe otra vez, era Sanemi, y lo peor de todo, era que los encontró en la posición en la que Genya le estaba sujetando de los hombros, Sanemi lo malpensó.

Ahora si volvemos al presente:

—¡AHORA RESULTA QUE SOIS ...! ¡NO JODAN LO QUE FALTABA! —Exclamó indignado Sanemi, golpeándose la cabeza en la pared, Muichiro dio un paso adelante, mas Genya lo detuvo.