THE KING & THE BOSS 【YOONSEOK】

E P Í L O G O

Pasó un año después de su regreso a su actualidad.

Hope descubrió que Namjoon era su mejor amigo, su confidente y no mantenían ninguna relación más allá de la amistad. Fue paciente y no le hizo preguntas del porqué parecía que perdió la memoria y le enseñó todo acerca de ser un gran maestro en los negocios.

Se acostumbró a acudir a reuniones, cerrar contratos, viajar y ganar mucho dinero, pero aún le faltaba algo. Algo a lo que temía.

Amor.

Ni siquiera era capaz de acostarse con algún extraño del bar cuando Namjoon se lo ofreció, era como si hubiese un bloqueo que no le permitía disfrutar esa parte de su vida, y cómo hacerlo después de vivir un tormento que implicó la vida de dos hombres de un mismo linaje con el destino manchado de sangre. No podía imaginarse siquiera enamorarse de alguien porque automáticamente su mente le lanzaba una advertencia que lo en volvería en una batalla sangrienta en el pasado.

Así que, anduvo por la vida tratando de ajustarse a su nueva rutina, manejando su Lamborghini siendo apreciado por extraños mientras esperaba con el semáforo en rojo. Volvió su vista a un lado y encontró la respuesta a sus dudas.

Bajando sus lentes oscuros, apreció mejor el majestuoso edificio que se levantaba sobre la calle, una biblioteca.

Aparcó una calle adelante y decidió ponerle fin a sus dudas.

Hope se registró en la entrada y caminó a la sección de historia mientras peinaba su ahora cabello platinado.

Orientado por la bibliotecaria, dio con los libros que buscaba y encontró uno titulado "La historia detrás de Corea del Sur", hojeó buscando algo hasta que un leyó un nombre que le hizo detener su búsqueda.

El emperador Jeon Jungkook.

Ansioso, comenzó a leer los párrafos.

"... Fue así como en la Dinastía Joseon, (1492), después de la gran invasión del imperio Hyun dónde la emperatriz Jiwoo fue derrotada a manos de Jeon Jungkook, quién tomó el título de emperador.

Cuatro años después (1496) comenzó la etapa llamada "Unión de los cuatro reinos", liderado por Jeon Jungkook al mismo tiempo en que contrajo nupcias con Park Jimin, siendo así uno de los primeros matrimonios del mismo sexo, vistos en Corea del Sur.

Tras su derrota y sorpresiva supervivencia, la emperatriz Jiwoo decidió unir sus tierras con el imperio Jeon, así compartiendo sus aguas con las tierras fértiles como forma de tregua al concebir pronto un bebé en su vientre.

Hoy en día, el matrimonio de Jeon Jungkook y Park Jimin es utilizado como argumento de aceptación y respeto por ciudadanos de que luchan por los derechos igualitarios a comunidades LGBT.

[Se anexa una imagen de Jeon Jungkook y Park Jimin en la dinastía Joseon]... "

Hope cerró el libro sorprendido por lo que acabana de leer. Se sintió aliviado porque Jungkook tuvo un final feliz junto a Jimin.

Al ver que no hubo ningún nombre mencionando a Yoongi o Suga, supuso que se borraron para siempre de la historia y de su mente.

Dejó el libro en el carrito a su lado y se giró para salir de la biblioteca cuando tropezó con un cuerpo, mismo que derribó debido a la brusquedad de sus pasos.

— ¡Mi café! — Escuchó.

— ¡Joder! — Bramó extendiendo la mano al hombre que yacía en el suelo. — Ha sido mi culpa no me fijé...

Las palabras se le atoraron en la garganta cuando vio el rostro de Yoongi, no, de Suga ¿O era Yoongi? Mierda, estaba tan aterrado que no supo qué decir mas que observar al hombre frente a él, quién se levantó por cuenta propia sacudiendo su camisa beige ahora con una mancha húmeda de café y pantalones de vestir negros. Su cabello castaño era ondulado, casi rizado, con un mullet acariciando sus hombros delgados, su piel pálida con manchas rosas ahí, donde sus huesos se unían, labios abultados en un ataque de berrinche y la voz tan profunda que erizó los bellos de su cuerpo. Sin embargo, una cosa que lo diferenció por completo de los demás, era su estatura, al menos unos cinco centímetros más pequeño, eso le pareció tierno.

— Yo... Disculpa— Hope se agachó para levantar las hojas regadas en el suelo, algunas manchadas de café. De reojo, vio que eran dibujos de gardenias.

El hombre frente a él, tomó las hojas y las sacudió.

— Ya que, tendré que hacerlo de nuevo.

Cuando levantó la vista, sus ojos se en contraron y Hope supo que nunca escaparía de su destino porque sintió coml su corazón estallaba en atracción por éste hombre del que no sabía su nombre, pero estaba seguro qie compartía linaje con Yoongi y Suga.

— Ah, yo... — El contrario también se vio afectado por el atractivo hombre rubio que le miraba como si fuese lo más preciado de su vida. — Sí, me tengo que ir.

Se dio la vuelta, pero Hope lo detuvo tomando de su mano, al mismo tiempo en que ambos se estremecieron.

— Déjame invitarte un café, hice que derramaras el tuyo.

— Mmm, supongo. Estaría bien.

Hope sintió alivio.

— ¿Puedo saber tu nombre?

— August— Hope frunció el ceño. — Ya sé, mi madre es americana y mi padre coreano. Ambos lanzaron una moneda al aire para elegir mi nombre ¿Puedes creerlo?

Hope sonrió viendo como a August se le pintaban las mejillas de rojo mientras esquivaba su mirada hacia todos lados menos a sus ojos.

— Bueno, ¿Iremos por ése café o...?

— Sí, sí. Vamos.

Hope entonces recordó las palabras de su último canto y decidió que sí tenía una vida nueva, al menos sería honesto consigo mismo y le daría una oportunidad a August, porque ése era su destino y porque le parecía un pequeño gatito del cuál cuidar.

— Entonces... ¿A qué te dedicas?— Preguntó Hope abriéndole la puerta de su auto.

— Soy pintor, me encanta pintar flores.

Ambos se adentraron en una charla amena que era el inicio de una larga vida placentera en la que ambos fueron premiados con amor, paz y libertad que no disfrutaron en sus otras vidas.

"La desdicha en tu vida tendrá una recompensa y te será dado por el octavo mes, acompañado de gardenias y olor a café"

F I N