𝑪𝑨𝑷𝑰́𝑻𝑼𝑳𝑶 30

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Pues... Apenas pise la casa estaba Sadie de brazos cruzados.

—¿Quién es Sabrina?

—¿Qué?

—¡Y no me mientas por qué su cara y tú cara están en la televisión!. ¿Que tiene contigo

Mierda, mi padre le va hacer daño.

Es lo más seguro.

¡Carajo!

—Fue la chica que me ayudó en las dos apuñaladas que me dieron.

—¿Tienes algo con ella?, y dime la verdad.

—No, solo me ayudó y no, no tengo algo con ella.

—¿Entonces por qué te trato así?

—No te daré ni a ti ni a nadie más información.

—Genial, lo que faltaba. Estoy muy segura que me estás engañando.

—¡Que no te estoy engañando!, ¡no entiendo por qué desconfías tanto de mi!, ¡no te eh engaño ni nunca lo haré por qué te respeto y a pesar de ser una maldita estúpida que piensas que tocó a otras mujeres es mentira, nunca eh tocado otra mujer ni eh besado a otra mujer por qué te tengo a ti!. ¡Y no necesito a nadie más que a ti!, ¿¡tan difícil es de entender!?.

—Sí, es difícil.

La puerta se abrió se golpe dejando ver a mi padre furioso y mi madre.

Padre de Sadie.

Millie y Noah.

—¿¡Quién es Sabrina!?—Dijo mi padre.

—No diré nada de ella. Solo es una buena persona que nunca eh pasado de abrazos por si piensan que soy "infiel".

—¿¡Sabes cuánto tiempo inverti para que tú cara no aparezca en todos los noticieros y todo el mundo no te conozca!?

—Nunca te pedí que lo hagas.

—A ver, miren, es mejor estar tranquilos.—Dijo Millie.

—No, ya vas a ver lo que se viene Antonella, sabes muy bien...

Oh, no, no y no.

Con Sabrina no pedazo de imbécil.

—Con esto no te puedo apoyar hija.—Dijo mi madre yéndose detrás de mi padre.

—Tranquila hija, no dejaré que te cases con una infiel. —Dijo el padre de Sadie.

—¡Que no soy infiel!

—Puedes bajar tu voz, estás hablando con mi Padre.—S.

—El ha comenzado.

—Pensé que serías más respetuosa con tu pareja.

—Y lo soy, ¡yo lo soy maldición!.

Camine hasta una habitación de huéspedes siendo perseguida por Noah que no paraba de decir. "abre la puerta por favor, yo te creo, por favor abre la puerta, mi niña"

No puedo permitir que le hagan daño a Sabrina ni a sus hermanos y se la debo.

Hace unas semanas, vendí la casa que me regalaron mis padres para poder comprarme otra y que nadie sepa de su existencia, bueno, es un buen refugio para Sobrina aunque solo tenga muebles y tecnología, lo material no ayuda tanto.

𝑇𝑜𝑑𝑜 𝑑𝑒𝑝𝑒𝑛𝑑𝑒 𝑑𝑒𝑙 𝑑𝑒𝑠𝑡𝑖𝑛𝑜-𝑺𝑨𝑫𝑰𝑬 𝑺. 𝒀 𝑻𝑵 [TERMINADO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora