⛧ミ Capítulo 41

2.1K 169 9
                                    

No se lo recordaba por ser malo con ella. Tampoco se lo recordaba solo porque se le vino en gana hacerlo. Ni mucho menos se lo recordó solo para que los demás se enteraran de lo sucedido.

Lo hizo porque no quería volver a verla postrada en una camilla de hospital, con suero conectado a su muñeca y una estadía de dos semanas porque todavía no estaba completamente repuesta para salir de allí.

Ninguno de los chicos, excepto Heeseung, sabían de lo sucedido.

❝FLASHBACK❞

Heeseung entro a la sala de ensayos donde ___ estaba, dejo su mochila caer contra el suelo y noto la forma desorientada en la que estaba bailando la chica quien parecía no estar concentrándose en lo que hacía. Sus pasos eran demasiado bruscos y su mirada se perdía en algunos puntos de la coreografía.

Heeseung: ¿___ qué te sucede ahora?

Recibió una negación con la cabeza como respuesta, siguió bailando frente al espejo mientras el pelinegro la miraba, comenzaba a preocuparse. No era normal de ella, pero no quiso seguir insistiendo así que tomo asiento enfrente suyo para seguir mirando su celular, dejaría que ella terminara su tiempo de práctica.

Solo pasaron cortos tres minutos cuando la escucho caer, la miro preocupado y se acercó a ella para levantarla, había caído de culo al piso y su respiración parecía estar agitada.

Heeseung: Estas muy pálida.

___: Estoy bien...

Heeseung: Claramente no lo estas. ¿Has estado comiendo bien? ¿O por lo menos dormir?

Ella no le respondió, Heeseung sabía que algo no andaba bien y peor fue todavía la situación cuando ___ termino por desmayarse en sus brazos.

Esa tarde la paso en el hospital, Heeseung se quedó con ella aun cuando su tía llego. Su tutora se quedó hablando con el médico que atendió a su sobrina mientras el mayor la cuidaba tratando de que comiera algo después del diagnóstico que le dieron.

Anorexia nerviosa, eso era lo que tenía, sumando el hecho de que su autoestima estaba ausente de su diccionario fue el acabose que hizo su cuerpo derrumbarse.

Heeseung no sabía exactamente todo, notaba que ___ no comía como antes y que duraba mucho tiempo haciendo trotes durante las mañanas, además, uno que otro día la atrapo con una cinta métrica midiéndose la cintura, a veces sonriendo satisfecha y otras veces enojándose consigo misma.

Tal vez ahora pensaba que, si hubiese actuado a tiempo y no hubiese dejado pasar todo esto, ahora ella no estaría así.

___: Perdón.

Heeseung: ¿Ahora lo pides?

Bajo su rostro tratando de concentrarse en la comida que tenía.

Heeseung: No lo dije para que pongas así, lo dije porque en realidad no me tienes que pedir perdón a mi sino a ti misma.

___: Tu sabes como soy.

Heeseung: Y porque se cómo eres es que te digo esto ___, por favor linda sabes que no necesitas hacer todo esto para ser perfecta.

___: Te prometo que a partir de ahora todo será distinto.

Heeseung: Creo en ti, no dudo de tu palabra y para eso estaré a tu lado.

Se enderezo para abrazarlo y éste correspondió sin dudar.

❝FIN DEL FLASHBACK❞

Aquella promesa la cumplió, pero ahora sentía que la estaba rompiendo, había algo que ya no podía obligarla a seguir abrazándola para cumplirla. ¿Por qué tan de repente todo se torna en contra suya? ¿Había hecho algo mal? Ya no quería seguir teniendo esas miradas encima suyo, se había aceptado tal y como era, pero parecía que lo temido volvió a su lugar.

___: Ya dime algo.

Pidió a Heeseung quien estaba frente a ella, con los brazos cruzados y una mirada sin expresión.

El chico suspiro y se encuclillo, entrelazo sus manos con las de la fémina y sonrió después.

Heeseung: Así como estuve contigo la primera vez, así me mantendré.

Un abrazo los unió, ___ susurro un débil gracias.

Heeseung: Pero ellos deben saber, bueno, solo si quieres.

Asintió tratando de sonreír.

Durante la cena ___ les conto a los demás acerca de los problemas que había tenido tiempo antes de ingresar a I-LAND. Todos le escucharon atentos, sin perderse ningún detalle, sin interrumpirla, la escucharían tal como era para poder brindarle su apoyo y amor cuando terminase de contar todo lo que debía ser contado.

Si ahora estaban con ella, con esto le estarían casi encima.

Odiaba la idea de recaer nuevamente, pero daría pelea, no dejaría que su autoestima disminuya ni mucho menos que esas ganas inmensas de bajar de peso en exceso le consuman. No quería ir a parar a un hospital, su estadía fue horrible con el pasar de los días, siempre conectada al suero, muchos piquetes en sus muñecas, comidas secas y sin sabor... eran malos momentos que no quería volver a vivir.

Jungwon: Sabes que estaremos contigo, cualquier cosa puedes pedirnos ayuda.

Sunoo: No podemos decir que te entendemos, pero sabes que cuando sientas esa sensación simplemente llámanos y sabremos como alejarte de esa parte.

Jake: Solo mantente como lo has hecho hasta ahora, no permitas una recaída por segunda vez.

___: Tengo miedo, pero sé que están conmigo y sabré como parar.

Heeseung: Es una promesa.

Sunghoon: Nosotros jamás te dejaremos, yo jamás te dejaré.

Se puso de pie para abrazarla fuertemente, trasmitiéndole la calma que necesitaba y la confianza en sí misma que estaba esfumándose. Ni siquiera dudo en corresponderle ese abrazo y rodeo su cintura recostando su cabeza en su hombro.

Los demás no sabían si hacer un abrazo grupal o dejar que esos dos siguieran con su abrazo, pero Ni-ki no resistió mas y se unió a ellos, haciendo así un abrazo grupal al final.

Cayendo todos en sus camas, las luces fueron apagadas y la casa quedo en completo silencio, excepto por el bailar de las hojas de los árboles debido al ligero viento que había afuera. Ese ruido más los pensamientos de la chica le impidieron tener un sueño rápido.

Se quedó un rato sentada en su cama, miro el reloj varias veces, pero solo los minutos pasaban pesados. Fijo su vista en Jungwon y Sunoo quienes dormían plácidamente, escucho los ronquidos de Jay en la otra habitación y soltó una pequeña risita porque sabía que Sunghoon se levantaría de mal humor porque no le dejo dormir el mayor.

Solo dormito por tres horas, abrió de nuevo sus ojos y vio que faltaban trece minutos para que el reloj marcara las cinco de la mañana, ___ se destapo, fue hasta su ropero y tomo un abrigo felpado, se colocó unas botas elegidas al azar y, con sumo cuidado, salió de su habitación. Primer obstáculo pasado, ahora solo faltaba salir de la casa.

Sin hacer el mínimo movimiento, la puerta se cerró, ___ se puso el gorro de su abrigo y camino a paso acelerado hasta el parque más cercano de la manzana. Se quedó allí detrás de unos arbustos florales que te cubrían solo si permanecías sentado. Escondió su rostro en el hueco de sus piernas, pero no duro mucho cuando escucho unos pasos acercarse a ella.

Xxx: Sabía que te encontraría aquí.

ꜱɪᴇᴛᴇ ʏ ᴜɴᴀ ᴍᴀꜱ | ᴇɴʜʏᴘᴇɴDonde viven las historias. Descúbrelo ahora