¿Cuánto crees que esté dispuesta a luchar una persona por algo que realmente desea?
¿Cuánto crees que logre aguantar alguien que está siendo lastimado de varias formas, solo por conservar lo que es suyo por legado?
Una princesa que asciende al trono...
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"LA PENA EN MUCHO MAS DOLOROSA QUE UN GOLPE"
-Necesito una explicación -sentenció de forma agresiva, entrando por completo en la habitación.
-Mamá, creo que debes sentarte.
-No voy a sentarme. Dime por qué razón has hablado tan mal de tu padre, deshonrando su memoria tan cruelmente.
-Cálmate, ¿de acuerdo? -dije acercándome a ella con cautela, sin embargo, retrocedió tan rápido como pudo, huyendo de mí.
- ¡Exijo una explicación! No me pidas que me calme cuando has difamado a tu padre de esa manera.
-Mamá, yo no lo he difamado, todo lo que escuchaste es cierto, lamento mucho que hayas tenido que saberlo de esta forma, pero lo que oíste es la verdad.
- ¡Mientes! Tu padre hubiera sido incapaz de cometer esas atrocidades, simplemente mientes y no entiendo el porqué de faltarle es respeto de esa forma, ¡eres su hija!
-Voy a dejarlas para que hablen -avisó saliendo de la habitación de inmediato, lo cual me hizo sentir sola, pensé que el me apoyaría en esta situación tan complicada, pero claro, no le compete.
-No miento, jamás diría cosas horribles de papá, pero lamentablemente es la verdad.
Sus manos fueron a su boca tratando de opacar un sollozo que amenazó con salir, sus ojos rojos se llenaron de lágrimas, retrocedió varios pasos hasta que su espalda quedo pegada a la pared y pronto su cuerpo se desplomó.
-Mami, lo siento tanto -me senté junto a ella y la rodee con mis brazos, tratando de calmar su llanto -yo aún no puedo aceptarlo, sin embargo, esa es la verdad, papá fue un monstruo y yo lo sabía, y no lo comprendí hasta hace algunos días.
Su mirada triste se encontró con la mía y entre lágrimas rebeldes que se rehusaban a quedarse dentro, le conté todo lo que había descubierto y que había evidencias que lo confirmaban, como la mujer que me comentó parte de la historia, mis recuerdos y su diario donde el mismo acepta la culpa, también le conté que por alguna razón Arthur conocía toda la historia y que eso no significaba nada bueno.
Mi corazón dolió tanto al ver a mi madre destruida de esa forma, jamás la vi tan frágil, tan propensa a quebrarse, jamás la vi en ese estado, y sinceramente no podía comprender lo que sentía en ese momento porque como esposa, su dolor era muy distinto al mío, la imagen de mi padre cambió ante mis ojos, pero ella descubrió que el amor de su vida, la persona a quien ella entregó su corazón hace muchísimo tiempo no fue más que un farsante que fingió sentir amor por ella y que la engañó por mucho tiempo, que jugó con sus sentimientos y con la familia perfecta que ella creyó construir junto a él, que su historia mágica de amor no fue más que un cuento de terror que acabo en tragedia; ambas estábamos destrozadas, pero nuestro dolor era simplemente distinto.
