EL DESO DE AMAR

CAPÍTULO 5

Había amanecido con el clima nublado, probablemente en unas horas caía la lluvia. Después de estar dos semanas ausente es hora de regresar a clases, Jack llevaba como más de 30 veces pidiendo perdón por haberle ocasionado de cierto modo la papera, se siente demasiado culpable a pesar de no haber hecho nada.

Ella se dirige a su salón, y se da con la sorpresa de que Jack está sentado con el chico de ojos bonitos. Karina está detrás de él y la llama para sentarse a su lado, Abril en su mente: como veo Livy no vendrá hoy; pero, ¿por qué llaman piñata al niño de ojos azules?, de que tanto me he perdido en todos estos días, y Jack no me conto que ahora son amigos ellos Dos.

—Hey Piñata!, hola Jack, ¿Cómo están? —dice Jhon pasando por su lado.

—Hola, que tal Jhon. — dice el niño de ojos bonitos. Su voz, están linda.

—Piñata, ¿jugamos un partido de fútbol hoy? — Jack

—Sí, claro — responde el niño de mirada bonita.

Mientras tanto, Abril estaba pensando que estaría haciendo su padre y su madre ahora mismo, había pasado mucho tiempo desde que no sabía nada de su madre, talvez y era como decía Erika, que a sus padres no les importaba nada de ella, pensar en eso la ponía triste y no estaba bien, trataba de pensar en otras cosas pero luego de un rato sus pensamientos regresaban eran como un búmeran. De pronto, se aproxima el niño de ojos azules corriendo hacia su dirección. Empiezo a ponerse nerviosa por alguna razón y empiezo a sudar.

—Hola Abril, Jack me dijo que saques de su mochila su pomo de agua y me lo des para yo llevárselo él está muy cansado para venir, pero dice que tú sabes dónde está.

—¡Sabe mi nombreeeeeeeee!— dice mentalmente.

—Sí claro, espera — dijo en voz alta, ella se dirige a la mochila de Jack y busco su pomo de agua, se da cuenta que hay unas pastillas al lado de su pomo y se preguntó sí debe tomárselas, así que le mandaré un recado a Jack.

—Toma, es esta — indica dándole el pomo.

—Gracias — dice y se da la vuelta para irse corriendo al campo.

—¡Espera! — le grito—. Oye piñata, pregúntale a Jack si debe tomar pastillas, en su mochila hay algunas.

—Si yo le digo— le dedica una sonrisa él se da la vuelta, pero se detiene mira al suelo y luego voltea en dirección de Abril aun con la cabeza abajo —. Pero en realidad, no me llamo piñata, aquí entre dos ese apodo no me gusta mucho, pero me lo dicen casi todos en el salón y quiero caerles bien.

—Entiendo, entonces también te llamare piñata como todos.

—No! — dice con voz demandante y alza la mirada —. Tú no deberías, bueno solo si quieres... no me molestare contigo Abril — dice con voz baja y me mira, estira su mano y agrega —. Mi nombre es Gabriel Cipriano Vidal.

Ella le estrecha su mano y se le escapa una sonrisa. Al sentir el contacto mutuo de la mano. Él sonrió en ese instante, y fue ahí que lo supo, que le iba a necesitar mucho cuando le soltase...

—Hace poco me habían dicho que eso de estrechar la mano era muy formal para nuestra edad—dijo en tono nerviosa—. Y yo soy Abril Ross Heredia mucho gusto Gabriel.

—Entonces, creo que tenemos algo en común, eso de las formalidades nos va muy bien— se ríe en voz alta —. Quería presentarme el primer día, pero te vi ocupado conversando con Livy — hace una pausa esperando una respuesta, pero no logro decir nada —. Bueno me voy, Jack está esperando su pomo de agua.

Al fin ella sabía su nombre y era lo único que estaba bien ese instante, estaba segura que ese día no pensaría en nada más que Gabriel...

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NOTA DE LA AUTORA:

¡¡¡¡¡POR FIN!!!!!

Conocimos a nuestro pequeño Gabriel, aquel que le robo el corazón a nuestra querida Abril.

¿Gabriel sentira algo por Abril?

Son tan pequeños y tienen sentimientos encontrados este par.

Amos son como tan formales, me enamore de estos niños.