UN ENCUENTRO

C A P Í T U L O - D O S

CAPÍTULO DOS:

—Toda la noche no pude dormir.—murmuro enfadada— Creí que saber de Milan me haría sentir tranquila o hasta emocionada, pero me jode que él ahora sea el de las frases randoms, yo soy la de las frases randoms. ¿Cierto?—miro a mis dos amigas, que me miran como si estuviera loca— Parece tranquilo pero es todo un pillín. Y seguro también un donjuán. 

—¿Qué te dijo?

—Primero me dijo que comiera maquillaje para que sea bonita por dentro y lu...—mis amigas se ríen sin evitarlo y dejo mi mandarina a un lado mirándolas acusatoriamente—, y luego puso algo de "Si lees esto, sabes leer"

—Tengo que admitir que están buenísimas— Tatiana habla— Por lo que vi en tu Instagram, pones algo como "Morir es como dormir pero sin levantarte a hacer pis" —carcajea— ¿Tu madre no te dice algo?

—Antes lo hacía. Ahora le llega.—me encojo de hombros— Sabe que no lo dejaré de hacer.—bufo— Quiero ir a casa, ya me aburrí de la escuela y apenas estamos en segundo día.

—Si, pero creo que se volverán interesantes...—Hallie me señala el frente y volteo sin esperar nada

Veo a Milan acercarse. Miro detrás de él y observo como sus amigos se ríen y empujan entre sí como si les pareciera divertido que se acerque hasta donde estoy.

Seguro soy una apuesta.

¿Ya empezamos con la ansiedad?

Cuánto le habrán pagado. Soy fea como para llamar su atención

¿Ya empezamos con la depresión?

Perro.

Llega delante mío y sube dos escalones para quedar a mi altura de cara a cara ya que estoy en el último escalón de las gradas. 

—No me respondiste en Instagram—dice con una sonrisita

—¿Quién carajos te retó?—hablo sin poder evitarlo. Él, me mira, sorprendido para luego sonreír burlonamente—No tengo por qué hacerlo— respondí rápidamente en voz alta, haciendo que su amigos abucheen

Milan niega con la cabeza bajando la mirada y riendo un poco

—Tienes razón, Lary

—No me digas Lary. 

—¿Infantil con catorce años, Lary?—dice con sarcasmo

—No sé limpiarme el culo bien. Así que sí, soy infantil porque hace poco que salí de primaria, y dejé de jugar con mis muñecas peladas—escupí con hastío

Él observa a mis acompañantes y se queda mirando a Tatiana mucho rato. inclina la cabeza un poco en forma de saludo y volteo a ver que hace al respecto. Solo suspira y aprieta los labios desviando la mirada de mala gana.

—¿Te llamas....?— le dice a Hallie

—Puta— responde con una sonrisa

—¿Si sabes que está prohibido hablar groserías en el centro educativo?

—Qué educado eres, pende...—intento hablar

—Silencio—arruga la nariz— Eres muy agresiva para tener catorce

—¿Y tú qué? ¿Muy delicado? —me burlo levantándome de mi asiento

—No, no lo soy en ciertas cosas— volteo a verlo antes de irme. Me sonrojo y quizás al decirlo en doble sentido acabó con mi amor platónico, que veía antes como un chico que me respetaría.

—Eres un puerco, idi...

—Silencio. De verdad que eres grosera. Y no lo dije de esa manera. Anda toma clorox para lavar tu cerebro—me soba la cabeza de su altura.