"¿Cómo ha ido al trabajo?", preguntó Joshua mientras terminaba su vaso de agua.
Junto a él estaba sentado Harry, y en frente James y Anna. Después de salir de la casita de madera ambos entraron de nuevo a la casa encontrándose con la cena casi servida.
"Ha ido bien. Un poco estresante pero así es ese mundo", contestó la pelinegra.
James había estado toda la cena totalmente perdido. Era incapaz de olvida el olor de la piel de Anna, la manera en que sus piernas se habían abierto para él, su sabor... Su cabeza estaba en otra parte y no podía -ni quería- evitarlo. De vez en cuando, cuando los dos hombres frente a él no se daban cuenta, su mano izquierda bajaba para apoyarse en la rodilla derecha de ella.
Anna había recuperado su compostura obligadamente. Su padre y su hermano estaban frente a ella, así que no podía parecer que ahí fuera había pasado lo que había pasado. Aquellos dos la conocían lo suficiente como para notar si actuaba raro, así que no tenía margen de error.
Cada vez que los dedos de él acariciaban su pierna donde su falda acababa sentía su piel erizarse. Necesitaba acabar lo que habían empezado, pero lo único que podía hacer era apartar su mano para no ponerse demasiado nerviosa.
"¿James?", llamó la atención el padre de Anna.
"¿Perdón?"
"Decía que si los dos trabajáis en el mismo puesto", repitió el hombre.
"Eh- a veces", respondió Anna. Su tono en el punto medio entre la afirmación y la interrogación
La boca de James se alzó ligeramente en una pequeña sonrisa burlona la notar lo rápido que se ponía nerviosa. "Trabajo para otro jefe, pero a veces hacemos proyectos juntos", respondió con tranquilidad.
Joshua asintió mirando de reojo el marcador del partido de fútbol que había en la televisión de fondo. Poner algo durante la cena era una tradición en la familia Smith.
"Anna dijo que su jefe era un buen tipo", dijo su padre. "Me alivió saber eso".
"Sí", respondió James mirando de reojo la cara de la chica. Anna tenía esa expresión en su cara de 'sabes que estoy al borde de un ataque así que no me digas nada' oculta tras una sonrisa. "Lo conozco, parece un poco serio pero seguro que es buena persona".
Harry estaba mirando la situación con su ceja alzada. Prefirió no decir nada mientras ojeaba algunos mensajes en su móvil.
"Me preocupó un poco cuando me contó todo lo del cambio de trabajo, jefes y demás. No están las cosas como para perder un puesto estable", respondió su padre con un semblante serio.
"Estoy bien papá", respondió ella sabiendo como era su padre. "No tienes que preocuparte".
"Lo sé, lo sé", dijo su padre haciendo gestos con sus manos. "No quiero que nadie se aproveche de ti, solo quiero saber que mis dos hijos van a estar bien lejos de mí. Supongo que eso es lo que hacen los padres", respondió mirando hacia James.
Barnes se limitó a escuchar al hombre. A esa hora de la noche parecía estar cansado aunque no estaba seguro de si quizás ese era su aspecto habitual. Escucharlo decir 'no quiero que se aprovechen de ti ' fue como si cientos de pequeñas agujas se clavasen en su espalda.
¿Era eso lo que veía la gente cuando los miraban a ellos dos? Pensar que desde fuera su 'relación' se percibía como la de un hombre que se aprovechaba de una mujer más joven con la cual tenía una relación de poder al ser su jefe le horrorizaba.
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𝐟𝐨𝐫 𝐲𝐨𝐮𝐫 𝐥𝐨𝐯𝐞 » 𝐣𝐚𝐦𝐞𝐬 𝐛𝐚𝐫𝐧𝐞𝐬
Fiksi Penggemar𝙚𝙣 𝙡𝙖 𝙦𝙪𝙚 𝙪𝙣 𝙥𝙧𝙤𝙙𝙪𝙘𝙩𝙤𝙧 𝙙𝙚 𝙘𝙞𝙣𝙚 𝙨𝙚 𝙚𝙣𝙖𝙢𝙤𝙧𝙖 𝙥𝙚𝙧𝙙𝙞𝙙𝙖𝙢𝙚𝙣𝙩𝙚 𝙙𝙚 𝙨𝙪 𝙣𝙪𝙚𝙫𝙖 𝙨𝙚𝙘𝙧𝙚𝙩𝙖𝙧𝙞𝙖. "no quiero tu simpatía, pero es que no sabes lo que me haces.... oh, anna". "no creo que esto sea apropiad...