Más que mi jefe

Capítulo 29

Frustración y furia contra mi misma, se que no esta bien, pero me había agradado la forma que Steven me toco, en la forma que me beso o me acaricio, pero ese es el problema, no debería gustarme, no debería gustarme el.

Evitarlo al siguiente día no fue un problema, desperté mas temprano de lo usual y tome un taxi hacia la casa de mi madre, antes, le deje una nota a Adam donde le explicaba que me había ido y que me recogiera en la noche.

Cuando llegue mi madre estaba durmiendo y mis golpes en la puerta la despertaron. Preparamos un desayuno y nos sentamos a platicar, disfrutando del ultimo día juntas.

-Fue una cena a la luz de la luna y rodeados de velas-dijo mi madre contándome sobre su cena con Arthur.

-¿Quedaron para otra vez?-pregunte.

Ella negó con su cabeza.

-Me lo ha propuesto pero no estoy preparada-

-Mama nunca temas a lo que puede pasar, el se ve muy buena persona y lo esta intentando, dale una oportunidad, no puedes pasar el resto de tu vida sola-

-Te tengo a ti-

-Pero no es suficiente-dije en un suspiro.

-Hablemos de ti. ¿Como va tu relación con Steven?-

Quería contarle la verdad, que Steven y yo no éramos nada. Quería contarle que fui golpeada y abusada por mas de un año, quería decirle que daría lo que sea por salir de este infierno que me rodea. Quería contarle de las mentiras de Steven, quería contarle que cuando estoy con Steven siento algo que pensé que no existía. Una gran atracción, por mas que el no lo sienta. Simplemente quería tirarme a sus brazos y llorar, llorar acompañada de alguien y no llorar en silencio y solitaria. Pero simplemente no podía.

-Todo va perfecto- dije mientras en mi boca se formaba una falsa sonrisa.

A las diez de la noche pude ver por los grande ventanales de la sala de estar unas luces viniendo hacia aquí, las lagrimas vinieron al instante a mis ojos sabiendo que esta era la despedida, mire a mi madre y pude ver que ella sentía lo mismo.

Me abalance hacia sus brazos y ella me rodeó con ellos, cerré los ojos con todas mis fuerzas y desee abrirlos y tener siete años, que todo vuelva a ser como antes.

-Te echare mucho de menos-dije entre sollozos.

-Yo mas hija, yo mucho mas- dijo mi madre con tristeza.

-Te amo mamá-

Bese su mejilla y seque mis lagrimas.

-Ven a visitarme cuando quieras-

Ella sonrió y pude ver como una lagrima se deslizaba por su mejilla.

-Lo haré, cuídate mucho, te amo, nunca lo olvides-

La abrace nuevamente y me aleje, camine hacia la puerta y me gire para verla por ultima vez, pude articular un "Adiós" y me di vuelta antes de correr de nuevo hacia ella y llorar.

Camine por el sendero hacia la camioneta negra y con lagrimas en los ojos entre, pude ver por el espejo retrovisor como Adam me saludo con una inclinación de cabeza y yo solo pude apenas tratar de sonreír antes de esconder mi rostro entre mis manos, llorando.

Todo esta malditamente jodido, Steven no va a decirme que pasa o que esconde, eso lo se, Cameron, Dios sabe donde se encuentra ahora mismo, ¿yo? destruida, humillada, sin ganas de vivir.

Sin tan solo pudiera sacar todo esos recuerdos de mi cabeza, la manera en la que sus manos me golpeaban, en la forma que abusaba de mi sin piedad pero esas imágenes se repiten una y otra vez por mi cabeza, un torbellino de recuerdos pasan por mi cabeza y trato de apartarlos pero sin piedad el recuerdo del primer golpe llena mi mente

Flashback

Mi primer trabajo y me fue muy bien, mi jefe fue muy amable y mis compañeros también, al pasar por una panadería me detuve a comprar un pastel, quería festejar mi éxito junto a Cameron, al pensar en su nombre una inconsciente sonrisa se me formo en el rostro.

-Un pastel de chocolate- le dije a la empleada.

Ella lo preparo en una caja y luego lo deposito en una bolsa

-Cuarenta dólares-

Le pague y me despedí, el viento hizo que mi vestido volara a su compás y sonreí feliz.

Camine libre de preocupaciones, varios hombres se paraban a observarme, pero ellos no me interesaban, de todos modos yo seguía caminando con mi cabeza en alto y ofreciendo sonrisas a algunas personas.

Me detuve a darle dinero a una mujer que se encontraba en el suelo pidiendo limosna, le desee buena suerte y seguí con mi camino.

Al llegar a mi departamento deposite el pastel sobre la mesa junto a mi bolso y las llaves, abrí el gran ventanal dejando que la luz del sol pase y un viento agradable recorra todo mi apartamento.

Sentí un ruido en la habitación y luego unos pasos, Cameron apareció delante de mi, con una expresión no común en el.

-Hola amor, hoy me fue muy bi..-

No pude continuar, ya que sentí un gran golpe en mi cara que me hizo caer de rodillas, sus gritos eran ruidos lejanos, lo único que pude pensar fue que mi peor temor se había hecho realidad, tenía un novio golpeador, desde ese día mi infierno empezaría.

Fin del Flashback

La voz de Adam me hizo volver a la realidad, su apenas "Llegamos Alice" me hizo salir de aquel horrible recuerdo, limpie mis lagrimas y salí de la camioneta y entre en hotel, fue en vano tratar de no llorar, las lagrimas caían como una fuerte lluvia.

La Suite estaba vacía pero no me importo, corrí los pocos pasos hacia mi habitación y entre sin ni siquiera ver nada me deslice sobre la puerta hasta que choque con el piso, enterré mi cabeza entre mis rodillas y seguí llorando, en silencio, pero acompañada, Steven estaba a mi lado rodeándome con sus brazos...