Capítulo 38

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La película duro mas de dos horas pero ni siquiera me pude concentrar, solo era consiente de las caricias que Steven hacia en mis hombros o el hecho de estar en su torso desnudo, amo la sensación de estar con el o incluso de poder abrazarlo cuando se me de la gana.

-¿Tienes sueño?- su voz me saco de mis ensueños. 

-Un poco-admití-¿Y tu?-

-Fue un largo día-

-¿Dónde estuviste hoy?-

-Solo tuve unos asuntos pendientes-

-Aja- dije sin importancia ignorando el hecho de que quería saber con todas mis fuerzas cuales eran sus asuntos, o si tienen que ver con Cameron o Jennifer, pensar en la mujer de la foto me hace estremecer, quiero saber quien fue ella o que significo para el, por qué terminaron su matrimonio o donde se encuentra ella ahora mismo, y en caso de haber terminado la relación ¿porque el seguía conservando una foto de ellos?

-¿Pasa algo?-

Fui consiente de que mi cuerpo estaba tensado y lo relaje al instante al mismo tiempo que me alejaba de su torso y me acostaba en la cómoda cama, me gire quedando cara a cara con Steven aunque a una determinada distancia.

-Nada en absoluto-

-Alice, dime-

-De acuerdo, ¿por qué nadie puede entrar en tu habitación?-

Mentí aunque no del todo, también tenia esa duda desde hace mucho tiempo o mejor dicho, desde que Magie me advirtió sobre la estricta regla de Steven, sobre no entrar bajo ninguna circunstancia en su habitación.

-Es mi lugar y varias cosas pasaron allí, cosas que quiero recordar, es algo privado e intimo, Magie puede entrar no mas de dos veces por semana para limpiar y luego entraste tu-

-¿Y por qué yo pude entrar?-

-Estabas en mal estado y como todo fue mi culpa, pensé que necesitabas lo mejor-

-Steven no fue tu culp..-

-Si Alice, lo fue y lo sabes, yo di la orden de que dispararan en las llantas del auto- me interrumpió hablando.

-Pero tu solo tratabas de ayudarme-

-En cambio solo logre lastimarte-

-Me salvaste Steven, siempre lo haces, incluso cuando no me lo imaginaba, no se como lo haces, tu solo apareces en el momento indicado y haces el papel de mi héroe, nunca podré agradecerte, ni siquiera se como, no se como estaría ahora mismo si tu no me hubieras sacado de ese pasado oscuro y créeme, si no hubieran disparado en las llantas no hubieran podido detener a Cameron, el tenia un arma, hubiera ganado y me hubiera secuestrado, se que también me hubiera golpeado y abusado hasta que mi alma abandonara mi cuerpo, yo hubiera muerto pero tu salvaste mi vida nuevamente, no eres culpable de nada-

-Quédate conmigo, esa será tu manera de agradecerme-

Cerré los ojos y suspire.

-Lo haré, mientras tu quieras que este contigo yo estaré-

El se acerco a mi hasta que nuestras frentes chocaron y nuestras respiraciones se mezclaron, sus manos se posaron en mi cintura y nuestras piernas se entrelazaron, aunque dejamos a un lado mi pierna herida, quedamos como un solo cuerpo, adaptándonos a la perfección.

Un fuerte golpe me hizo abrir los ojos, quise moverme pero fui consiente de que el cuerpo de Steven estaba atrapándome, los golpes continuaron, Steven aflojo su agarre sobre mi y ambos nos incorporamos en la cama, solo para ver de donde provenía el ruido.

Más que mi jefeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora