El nigromante [TRADUCCIÓN]

Capitulo 40

Harry le dio a Lucius una mirada considerada mientras Lucius sonreía como si acabara de ser nombrado Gobernador de Magica. Harry no quería descartar por completo la idea de tener a Lucius en el gobierno, porque Lucius era un político experimentado que sabía manejarse en un ministerio. También fue leal a Tom, hasta cierto punto. Pero Harry no podía ver a Lucius como el jefe de las fuerzas del orden porque Harry estaba bastante seguro de que Lucius lo convertiría en su grupo privado de matones paramilitares en poco tiempo.

No, Harry tenía en mente una posición diferente para alguien tan ambicioso como Lucius.

"Lo siento," dijo Harry con una sonrisa completamente falsa. "Pero ya he contratado a alguien como Jefe de Cumplimiento de la Ley".

La sonrisa de Lucius casi desapareció de su rostro y le dio a Harry una curva interrogativa en sus cejas. "¿A quién, si puedo preguntar, has contratado para este trabajo?"

"Patroclus Macmillan", dijo Harry, incapaz de mantener el humor fuera de su voz. "Pasó muchos años en el campo como Auror, y después de eso se convirtió en Jefe de Auror y Jefe de Cumplimiento de la Ley Mágica del Ministerio Británico. Patroclo es excepcionalmente adecuado para el puesto, se lo aseguro.

"Está muerto", respondió Lucius con el tipo de firmeza que Harry simplemente no entendía.

"No veo el problema." Harry se encogió de hombros y se cruzó de brazos mientras rozaba con el pulgar el amuleto que llevaba alrededor del cuello. Patroclus apareció de inmediato, saludando a Harry con la cabeza y luego burlándose cuando notó que Lucius Malfoy estaba a menos de un metro de distancia.

"Patroclo", dijo Harry mientras señalaba entre Lucius y su bisabuelo. "Le estaba diciendo a Lucius aquí presente que eres el nuevo Jefe de Cumplimiento de la Ley Mágica aquí en Magica".

Sin perder el ritmo, Patroclo siguió el juego, incluso si Harry aún no había discutido nada de esto con él. "Naturalmente", dijo Patroclo con voz sensata. "No hay nadie más adecuado en esta isla que yo para poner en forma a una nueva generación de Aurores y magos".

"Exactamente", coincidió Harry con una sonrisa dirigida solo a su bisabuelo. "Ahora no te decepciones demasiado, Lucius, porque tengo otra posición en mente para ti".

Lucius de hecho parecía un poco molesto y arrugó la nariz mientras se quitaba la suciedad invisible de la manga. "¿Qué quieres que haga en su lugar?"

"Me gustaría que fueras el Jefe de Impuestos", dijo Harry tan sinceramente como pudo. Lucius era asquerosamente rico y, por lo que Harry sabía, el hombre no se dejaba convencer fácilmente por una bolsa de oro. Lo que significa que se podía confiar en él para manejarlo en nombre de Magica. Sin mencionar que Lucius fue lo suficientemente inteligente como para establecer un sistema de recaudación de impuestos, y lo suficientemente diplomático como para trabajar con los duendes de Gringotts con fines bancarios. Sí, cuanto más lo pensaba Harry, más se daba cuenta de que Lucius era una gran elección para ese puesto.

Lucius parpadeó un par de veces mientras obviamente consideraba sus opciones y luego una sonrisa astuta apareció en su rostro. "Muy bien, acepto." Lucius le tendió una mano enguantada y Harry la estrechó con firmeza.

"Te avisaré cuando nuestra primera reunión sea para arreglar todo", dijo Harry mientras acompañaba a Lucius a la puerta. "Mientras tanto, puede contratar a algunos miembros del personal que esperará necesitar en el futuro".

"Haré exactamente eso. Buenos días." Y con un floreo de su capa, Lucius salió por la puerta.

"Lo harás, ¿verdad?" preguntó Harry a su bisabuelo en el momento en que cerró la puerta.