𝟗. 𝑬𝒗𝒆𝒓𝒚𝒕𝒉𝒊𝒏𝒈 𝒈𝒐𝒆𝒔 𝒘𝒓𝒐𝒏𝒈. 𝑷𝒂𝒓𝒕 𝟏.

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𝑪𝒂𝒑𝒊𝒕𝒖𝒍𝒐 𝟗; 𝑻𝒐𝒅𝒐 𝒔𝒂𝒍𝒆 𝒎𝒂𝒍. 𝑷𝒂𝒓𝒕𝒆 𝟏.

EL CINE DE VERANO ERA EL NUMERO SEIS EN LA LISTA DE COSAS QUE MÁS DISFRUTABA GOLDY

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EL CINE DE VERANO ERA EL NUMERO SEIS EN LA LISTA DE COSAS QUE MÁS DISFRUTABA GOLDY. Por debajo de los bollitos de canela, leer un buen libro, pasar una tarde tomando el sol en el césped del jardín, bañarse en agua fría cuando hacia un calor terrible en Outer Banks y reír con sus amigos. Le apasionaba el cine. Y no había una mejor forma de disfrutar una buena película que bebiendo refrescos y comiendo todo tipo de chucherías hasta hartarse, sentada en la hierba con el viento sobre sobre su rostro y con los ojos clavados en el gran proyector.

Se sentó con una gran sonrisa en una de las sillas que habían traído, sintiendo como segundos después el rubio colocaba la suya cerca de su cuerpo.

—No te importa que me siente junto a tí, ¿No?—le dijo el, con las manos temblorosas.

—Puedes sentarte donde quieras, JJ—le sonrió con suavidad, un poco incómoda.

Las cosas entre ellos habían estado extrañas los últimos dos días. Ella lo evitaba, estableciendo ciertos límites para no experimentar más confusiones erróneas. No le abrazaba, no le daba besos en la mejilla, cuando el quería entrelazar sus dedos, ella se separaba con una excusa barata. Tampoco volvieron a dormir juntos en la château. De hecho, Goldy estaba pasando las noches en su casa, cerrando el pestillo de la ventana para que el rubio–quién lo había intentado varias veces–no lograse entrar. JJ escondía lo mucho que le afectaba la actitud de la chica con sus típicas sonrisas y bromas, pero en el fondo comenzaba a volverse loco. Quería sentirla, besarla y tocarla como siempre hacía. Quería dormir abrazado a su cadera y contar sus lindas pecas a pesar de saber la cantidad de memoria.

Estaba desesperado por su atención.

—No quiero incomodarte—dijo, con la vista fija en sus zapatos desgastados. La escuchó suspirar y al no obtener ninguna respuesta continuó hablando con un gran nudo en la garganta—. Goldy, no sé que es lo que nos está pasando, pero no me gusta.

—¿De qué hablas?—dijo ella, con una risita nerviosa—. No nos pasa nada, JJ.

—¿Bromeas?

—¿Por qué debería bromear?—se atrevió a mirarle, el chico tenía las cejas juntas formando un par de arrugas en su frente—. Estos días he estado más ocupada, solo eso.

—¿Estás ocupada y por eso cierras el pestillo de tu ventana para que no entre?—cuestionó—. ¿Por eso no me hablas?, ¿Por eso no me dejas abrazarte o darte un beso?—su voz se rompió un poco con la última frase—. Porque llevas haciendo eso por dos días y me estoy volviendo loco, Goldy. ¿Qué he hecho mal?, ¿Puedes, por favor, decirme que he hecho para disculparme y volver a ser normales?

—No has hecho nada malo.

No le gustaba la forma tan evasiva con la que le estaba contestando, ella no era así. Se inclinó hacia delante buscando su mirada, queriendo conectar sus ojos azules a los de su mejor amiga.

ACHILLES HEEL➵ Outer BanksDonde viven las historias. Descúbrelo ahora