(Seungmin)
Apenas podía creer lo que estaban viendo mis ojos. Gabrielle estaba sentada junto a Brooklyn charlando tranquilamente en el sofá. Aún llevaba el antifaz... Lo cierto es que tenía curiosidad por ver sus ojos, pero si era cierto lo que me contó Jeongin, no quería que Gabrielle estuviera incómoda.
- ¿Estás bien? - me preguntó Hyunjin
- si... - contesté sin apartar los ojos de ambas mujeres - tu mujer... ¿Qué harás si Lucifer vuelve?
- mi mujer... - Hyunjin sonrió - supongo que si, es mi mujer... y descuida, ella es por algo mi mujer... - volvió a repetir la palabra "mi mujer" sonriendo divertido.
- no podemos perder más el tiempo Hyunjin - miré a Bangchan y a Brooklyn, Mar por lo menos no se había acercado - ellos no pueden estar más cerca de nosotros, no antes de que encontremos un sacrificio y se acabe el ritual.
Hyunjin me miró entristecido, recuerdo perfectamente la confesión que me hizo el día de todos los santos, cuando había perdido a Moonriell y ahora que de una manera la había recuperado, imaginé que tenía que estar asustado por la situación.
La puerta se abrió y los chicos hicieron su aparición. Lee Know y Felix sujetaban por los brazos a Changbin quien estaba un poco más malherido que ellos. V tampoco estaba muy bien, intentaba cerciorarse de que nadie les había seguido y cerró la barrera que protegía al Requiem.
- hermano! Lee Know... - Han se acercó a ellos mirando de cerca los daños que habían recibido
- Felix... - Bangchan también se acercó impaciente a mirar si a pesar de todo, su amado estaba bien.
Todos nos sentamos alrededor de la mesa del salón. Estábamos agotados... el sol saldría en cualquier momento y nuestras heridas pronto se curarían, pero algo parecía vacío entre nosotros.
- JK, Jimin... Vigilad el réquiem por si algún celeste quiera atacarnos. No creo que Dios les deje tocarnos en la tierra, pero igualmente, vigilad la zona... ah, si el celeste es... mi hijo, traedlo aquí.
- sí señor - contestaron ambos.
Cogí de las manos a Gabrielle. Estaba muy pálida y seguía helada, pero ella no parecía sentirse mal.
- Gabrielle... - acaricié su rostro con cuidado para que no se asustara - voy... a quitarte el antifaz...
Ella comenzó a llorar...
- está bien, si no quieres, no lo tocaré
Ella agarró mi mano y la colocó sobre su antifaz asintiendo con la cabeza. Estaba muy apenado por ella, pero también quería ver que habían hecho. Con cuidado fui desatando los lazos que agarraban el antifaz...
Apenas podía contener la rabia cuando vi el resultado. Sus preciosos ojos turquesas habían desaparecido, solo había dos hoyos cicatrizados.
- Puedo... probar si quieres... intentar recuperar sus ojos con mi sangre... - me dijo Jeongin
- Es verdad... - respondió V - hacían experimentos con él por su sangre. Puede regenerar tejidos que a primeras son imposibles.
¿Era eso posible? ¿De verdad podría Gabrielle recuperar la vista?
- El proceso no creo que sea rápido... pero no es tarde para probar - siguió diciendo Jeongin
Miré a Gabrielle quien escuchaba atentamente las palabras de Jeongin. La esperanza era lo último que se perdía ¿no?
- La decisión es tuya Gabrielle - la dije con cariño
Ella se palpó la garganta... también llevaba vendas en esa zona. Con cuidado la ayudé a retirarlas. Prácticamente la habían mutilado... miré a Jeongin e intenté imaginar lo que había pasado. Ese crío era fuerte...
- ¿Quieres que probemos antes con la garganta?
Ella asintió. Imagino que quería recobrar el habla antes y ahorrarnos el estar interpretando lo que decía.
La puerta se abrió de nuevo y esta vez eran JK, Jimin... y Gael.
Nos miró con ojos llorosos. Se arrodilló frente a Gabrielle. Era la primera vez que la veía con los ojos destapados. No era una visión agradable, pero seguía igualmente hermosa, al menos a mis ojos.
Mi hijo había heredado los ojos de su madre y verle me producía ternura. Por inercia desarregle su cabello como hacía con su madre cuando éramos niños. Gael me miró sorprendido pero me sonrió y quise llorar. Los tenía a ambos frente a mi. Éramos por fin una familia, que perdurará para siempre.(Changbin)
Mar no paraba de llamar a mi móvil. Jamás había tenido la necesidad de tener uno hasta que empecé con ella... y ahora necesitaba verla ¿pero era el mejor momento? ¿se asustaría de verme así? jamás me había visto transformado... ¿Me veía bien? ¿Se preocuparía por mi? La llamé...
- Perdona, hemos tenido un pequeño contratiempo y estoy en la casita del réquiem... ¿Estás en casa? ¿Puedes... venir a por mi? - miré a mi alrededor, estaban todos distraídos - Te echo de menos - musité avergonzado, pero lo cierto es que es lo que sentía.
Han me había escuchado y me miraba con una sonrisa de oreja a oreja.
- te echo de menos... - comenzó a imitarme así que le lancé una almohada para callarle.
No pasó mucho tiempo hasta que ella llegó. Había mentido en el trabajo para poder venir.
- pero ¿Qué ha pasado mi rey?
"Su rey". ¿Habíais escuchado? Yo era su rey... señalé a Seungmin y su familia.
- Hubo unos contratiempos inesperados y tuve que luchar por ellos...
- ¿Por ellos?
- No te lo había contado, pero Seungmin tenía una familia antes de caer... y son ellos. Los tenían ocultos para que nadie supiera, ni ellos mismos de dónde venían. Ella... se ha llevado la peor parte por lo que puedes comprobar.
El aspecto de Gabrielle era bastante deplorable. Aún recordaba su aspecto original, era la perfecta representación de un ángel... Seungmin la había destapado los ojos y la garganta. Me apenó ver todo lo que la habían hecho y el rostro de Seungmin al verla así...
Su hijo sin duda era la mezcla perfecta de ambos. Miré a Mar y me pregunté cómo sería una mezcla de ambos.
- me pregunto por qué me estás mirando de ese modo... - me dijo Mar
Sonreí divertido ante la idea de crear una familia.
- tengo ganas de llegar a casa - la respondí, me acerqué a su oído para que solo lo escuchara ella - y hacerte... mía...
Mar se sonrojó al instante. Mis heridas se estaban curando con la luz del sol, sonreí y cogí su mano.
- ¿Vamos o... quieres que nos quedemos aún?
- no... vamos...
Sabía que al ser ella humana, su tiempo era limitado, pero la eternidad ahora que la había conocido era mucho más amena. Aún siendo lo que era en esos momentos, un demonio, deseé que hubiese un milagro que la hiciera ser mía para siempre.
Nos levantamos del sofá, mi hermano ya estaba ensimismado con Lee Know... y los demás...en fin, me despedí de Gustav, el único que parecía atento a todos nosotros y nos fuimos.
(Felix)
El cuerpo me dolía mucho después de tanta lucha, pero ver el rostro de Bangchan hacía que desapareciera cualquier dolor. Nada más verlo lo abracé. Era la primera vez que nos metíamos en una lucha como esa con los hijos de Dios.
- Me retrasé...
- No pasa nada, lo importante es que al final estás aquí... Sabía que volverías.
Lo besé, me daba igual que nos vieran los demás. Era mi todo en estos momentos y quería mostrarlo con orgullo, además, todos estaban con sus respectivos... nadie parecía estar atento a lo que hacían o no los demás.
- quiero estar contigo para siempre...- dije mirándolo a los ojos(Lee Know)
Han se abrazó a mi nada más llegar... no estoy acostumbrado a las muestras de cariño, pero viniendo de él me parecía bastante adorable así que correspondí el abrazo.
Estaba bastante cansado. Aún conservaba mi forma de demonio... así que me sentía protegido entre sus brazos. Es decir, en mi forma de ahora al ser nu poco más alto que él, pues la sensación era distinta, pero en forma de chica, era más pequeño.
- ¿Pensabas que no volvería? ¿Tan débil me ves?
- No! - respondió abriendo los ojos de par en par - Para mi eres el más poderoso de todos!
Sonreí y para su sorpresa lo besé. Ahora no tenía dudas de que quería estar con él, para siempre.(Hyunjin)
Changbin se adelantó a todos y se marchó con Mar, los demás también nos fuimos despidiendo...
Brooklyn estaba un poco nerviosa porque su madre no paraba de llamarla... mi pequeña flor del infierno aún estaba bajo el control de sus padres. Besé su frente con cariño y la indiqué que nos fuésemos...
- Hagamos una locura...
- Sorpréndeme... - me respondió dubitativa
- Vamos... ahora lo verás.
Nos despedimos de todos y callejeamos por Fuencarral deteniendonos frente a un local de tatuajes.
- me habías dicho que querías hacerte un tatuaje, pero tenía que ser algo muy significativo para ti.
Ella se alejó un poco y me miró intrigada.
- No tienes porque hacerlo si no quieres. Solo era una idea...
- ¿Cual es tu idea? ¿Tu te... harías lo mismo?
- media "higanbana"
- ¿mi flor favorita?
Asentí con la cabeza.
- Hemos pasado muchas cosas juntos. Si por un casual el destino nos vuelve a separar, tiraré de nuestro hilo hasta poder encontrarte... - besé sus labios con cariño - mientras tanto quiero un recuerdo eterno, de mi flor del infierno. Así tenerte grabada en mi piel para siempre.
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Libre de pecados 1: Gardenia Paradise
FanfictionUna cafetería que aparece de la nada. Un grupo de personas enlazadas en un mismo destino. Un sacrificio. Una eternidad. Un amor. Una deslealtad. Nacimos pecadores y morimos como tales.