Libre de pecados 1: Gardenia Paradise

"In the end"

(BangChan)
Habían pasado 6 meses desde que entré por primera vez en la cafetería Requiem. Había aprendido mucho del viejo Gustav y de los siete pecados capitales. Creo que no os lo conté, pero mi madre no llegó a vivir mucho conmigo en la caseta, Seungmin pensó que era mejor tenerla al margen e ingresarla en un hospital con los mejores cuidados. Yo la visitaba cada semana... una o dos veces, según podía.
Desde el día ese que os conté, cuando Felix había quedado con Hyunjin... las cosas cambiaron un poco. Volvió a dormir a la caseta y aveces a provocarme un poco, pero hasta un límite. No volvió a besarme... ni siquiera a rozarme. Me sentía un poco perdido. No quería reconocer que él me atraía mucho más que físicamente. Lo echaba de menos.

Me levanté de la cama y fui a la cocina. Me quedé un rato mirando el vacío, recordando aquél primer beso que me dio ahí... Sonreí nostalgico "Quizás no tuve que detenerle en aquel momento" pensé. Pero luego recordaba quien era en realidad y un escalofrío recorrió mi cuerpo.
- Gustav! - era Jeongin quien le llamaba
Le abrí la puerta con precaución, aún no se me había olvidado el incidente de su forma demoniaca y lo cierto es que me producía bastante respeto.
- No está, se marchó a comprar abono de plantas - le respondí
- oh... de acuerdo, gracias hermano!
Lo vi marcharse con el chico con el que iba casi siempre. Sino fuese por aquel día, Jeongin era demasiado adorable. El perfecto hermano pequeño al que quieres cuidar toda la vida.
En las escaleras se encontraba Hyunjin que observaba a su pequeño protegido marcharse, luego me miró a mi, hizo un gesto de saludo y se metió en la cafetería.
Escuché a las chicas que estaban trabajando en ese momento que se volvían locas al verle. "¿y quien no?". Iba a cerrar la puerta cuando vi llegar a Lee Know quien entró a la caseta sin decir si quiera hola...
- ¿Está mi hermano?
- ¿Tu hermano? ah...!¿Felix? No sé... su habitación es la de ahí - respondí.
Nunca le había visto tan de cerca. Su belleza era singular y con ese aire frío y de superioridad le ponía casi a la par de Hyunjin. Me miró de reojo y yo agaché la cabeza.
- Si le ves dile que quiero hablar con él - dicho eso subió a la cafetería.
Tenía pensado cocinar antes de que llegara Gustav. Él siempre preparaba todo y quería demostrarle que también podía apañarmelas. Al cerrar la puerta me encontré con Felix. Me asusté porque no me lo esperaba.
- Tu hermano...
- Lo sé... le he escuchado - apoyó su cabeza en mi hombro tomandome totalmente por sorpresa - creo que me va a matar...
- ¡Pero qué dices Felix! ¿Cómo va a querer matarte? - aporveché para abrazarle.
- porque soy su hermano...
En ese momento volvieron a tocar a la puerta. Esta vez era Han, quien ni corto ni perezoso se abalanzó hacía Felix tirándolo al suelo y golpeándolo vez tras vez... quise separarles, pero había formado una especie de barrera y me era imposible agarrarles.
No pasó mucho tiempo cuando Hyunjin, Lee Know y Seungmin se presentaron en la puerta. Para ellos si fue mucho más fácil separarles obviamente.
- ¿Quién te crees que eres para presentarte en mi casa desgraciado?
- El hermano de tu marido...
- Eso es... ¡Mi marido y TU hermano! - rugió Han
- Basta... - interrumpió Lee Know - estoy seguro de que mi hermano sabe bien lo que hay - miró a Felix y luego a Hyunjin
- si... lo sé - respondió Felix sin levantar la vista. No se había defendido y tenía todo el rostro magullado. Ahí me enteré de algo que me descolocó... "Felix y su hermano..."
Lee Know se fue con Han, mientras que Hyunjin y Seungmin se quedaron...
Yo saqué el botiquín y por inercia le empecé a curar los rasguños.
- cuando hablaba con Lee Know... Han se enteró - comenzó a decir Hyunjin - Lo siento.
- no pasa nada... tarde o temprano tenía que enterarse - me miró a los ojos - de que estoy enamorado de mi hermano.
Aquellas palabras me golpearon el corazón como si me hubiesen pegado una paliza. Me dolía... pero por una vez, Felix estaba siendo sincero y me conmovió verlo de ese modo tan vulnerable. Sus manos temblaban y yo se las agarré para tranquilizarlo.
Seungmin miró a Hyunjin y ambos se levantaron
- Bien, te lo dejamos a tu cuidado Chris... - dijo Hyunjin - este servidor se va a dar clases
- y yo iré a la biblioteca a ver si puedo conseguir algún libro interesante
Me quedé a solas con Felix quien seguía mirando a la nada. Me daba pena.
Lo abracé y él se dejó mimar... Lloró y yo lloré con él. Simplemente era incapaz de dejarle solo en esos momentos.
Aprendí que por muy demonios que eran y lo duros que querían aparentar, en el fondo, todos estaban rotos. "Siempre hay un motivo por el que uno acaba siendo lo que es".
Le hice sentarse conmigo en el sofa y poco después se quedó dormido. Así... acostado, su rostro parecía más angelical que nunca. No sabía si se podía rezar por un demonio, pero en esos momentos, recé por él, porque las heridas de su corazón se curasen y nunca más fuera infeliz. Cariñosamente posé mis labios en los suyos, deseando que él sintiera el amor que había en mi... por él.