31. Espejismo

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Christian

Eran las 6 de la mañana cuando el medico vino a revisar a Black, en compañía de Taylor, le coloca una bolsa de sangre y de liquido amarillo, mas otra bolsa de suero donde le pone más medicamentos, Black abrió los ojos unos minutos, pero estaba muy débil y se volvió a quedar dormido.

-Señor Grey, el paciente está respondiendo bastante bien, creo que no necesitara mas trasfusión, dormirá unas horas más, que no se esfuerce, debe alimentarse de apoco, le dejare una dieta ligera. Yo me iré a atender a mis otros pacientes y regresare en la tarde para revisarlos.

-Dr me recomienda que contrate una enfermera para que lo cuide. -

-No es necesario Christian, yo lo puedo cuidar, si me escusas de no ir a trabajar a la empresa. - dice Dina entrando a la habitación.

-si la señorita la lo puede cuidar, creo que no será necesario la enfermera, solo debe seguir las indicaciones que le dé y si pasa cualquier cosa me debe llamar de inmediato.

-perfecto entonces tu lo cuidad, no te preocupes por tu puesto en la empresa, Taylor encárgate por favor del pago del Dr. De todo lo que se necesita, en 15 salimos a casa – Taylor asiente a mi orden.

Cuando llego a casa son pasadas las 7:30 de la mañana, al entrar por la puerta un delicioso olor a café me envuelve, es justo lo que necesitaba para despabilarse un poco, con la mala noche siento mucha pesadez. me dirijo a la cocina, donde encuentro a Gail, preparando el desayuno.

-buenos días, Gail, por favor me das una taza de ese delicioso café.

-buenos días, Señor, una taza saliendo en este momento, - la sirve y me la entrega- como está el señor Black

-el medico dijo que mucho mejor, gracias por preguntar- ella me sonríe- Gail, Ana aun no despierta?

-creo que no señor, anoche nos tomamos una taza de té, mientras me contaba lo que paso con el señor Black y creo que se durmió bastante tarde.

-Sirve el desayuno para dos en una bandeja, que le se lo llevare a la cama- le sonrió pícaro.

Cuando subo a mi habitación con la bandeja de desayuno para dos y una flor que corte del jardín, al entrar me encuentro con una escena impactante, veo a mi esposa durmiendo abrazada en mi cama con otro hombre, mi corazón se paraliza, Ana esta de espaldas a mí, aunque están tapados puedo notar que él tipo tiene su cara enterrada en su pecho, que tiene una pierna es encina de la cadera de mi mujer y al final de la sabana puedo per los tres pies, ella lo abraza y tiene el cabello alborotado. Esto no tiene ninguna explicación coherente posible, más que me esta siendo infiel en mi propia casa y en mi cama, seguro pensó que me quedaría todo el día con Black, cuando reacciono pongo la bandeja en el tocador y les quito la sabana de un tirón para ver quien es el desgraciado.

-aj, Christian – dice Ana asombrada, adormilada.

-Papa, que pasa porque nos despiertas de esta forma.

Yo quedo en shock como no me di cuenta que es Teddy, mi hijo durmiendo con su madre, por Dios creo que aun me he quedado con la mentira de la infidelidad grabada en mi cabeza. – perdón no sabias que estabas aquí... le traía el desayuno a tu madre y quería darle una sorpresa- es lo único que se me ocurre decir, espero ser convincente. aunque no quiera aceptarlo mi hijo ha crecido.

-Saben que, yo todavía tengo mucho sueño, es muy temprano y como estoy de vacaciones me voy a dormir a mi cama- dice mi hijo levantándose –papa como está el abuelo Black

-mucho mejor hijo gracias– lo abrazo, él se sorprende, pero me responde con un beso y se va.

-Christian ahora me vas a explicar esa forma de despertarnos, porque yo no me creí el cuento de la sorpresa- no se que mas decir es que me aferro a mi mentira.

poniendo fin a la historia. Christian Grey & Anastasia Grey |Parte IIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora