poniendo fin a la historia. Christian Grey & Anastasia Grey |Parte II

8. No hay lugar a dudas...

Christian

Estoy frente Ana que sigue igual, parece dormida, la sangre hierve en mis venas, me acerco para adsorber su aroma y sin darme cuenta comienzo a hablarle o más bien a gritarle, - despiértate y dime que ya no me amas, que me has sido infiel y que encima de todo te estaban chantajeando con sacar todo a la luz, y envolver a toda la familia en toda esta porquería, por eso estabas tan nerviosa, me dijiste que me contarías todo, bueno estoy esperando, despiértate de una vez y cuéntame tu versión de todo –golpeo la mesa que está a un lado de la cama y me salpico la camisa un líquido que se encontraba en un recipiente, - maldita sea, soy un asco,- voy al baño a tratar de limpiarme,

Anastasia

Escucho los gritos de Cristian, cree que no lo amo, como puede creer eso, no me conoce, como puede dudar de lo que hemos vivido juntos; quiero despertar y aclararlo todo, consolarlo, se nota que ha tomado. Pero no puedo, mi cuerpo no me responde y siento que mi cabeza pesa un montón parece un globo de agua, intento abrir mis ojos con toda mi fuerza, pero no puedo, mi energía se desvaneciera y me dejara en un vacío inmenso.

Christian

cuando estoy en el baño escucho que entra alguien creo que es una enfermera, me he quitado la camisa para limpiarme un poco.

-hola doctor - con un tono de asombro.

- eh como esta, Ana es mi paciente, me entere que estaba aquí y quería saber cómo estaba - una voz de hombre, Ana no la atiende a ningún médico hombre antes del accidente, pero me quedo atento escuchando.

- su cuadro ha mejorado, me llego un informe de su monitor que había tenido una alteración en su presión cerebral, pensé que había despertado, con la visita de su esposo que lo vi entrar hace unos minutos, pero me sorprende que no está porque no lo vi salir, pues nada – la voz de la mujer se va alejando mientras dice- es triste es muy joven, bueno doctor Reuben lo dejo, - es ese maldito, la sangre me sube a la cabeza me estoy poniendo la camisa para salir cuando escucho, que le está hablando a Ana y me paralizo.

- Hola Amor, me da mucha tristeza verte así, quiero que despiertes y podamos defender lo nuestro, aunque incluso así te vez tan sexi, eres mi diosa afrodita, deseos que te despiertes y seguir siendo tu amo, que junto toquemos el cielo en cada escena y veamos las estrellas

-lo dice en voz baja y aterciopelada, la rabia se transforma en un inmenso dolor siento que mi corazón ha explotado, cuando reacciono y quiero salir a matar a ese tipo, porque me lo ha robado todo, cuando salgo con toda mi furia no hay nadie en la habitación, y me quedo en shock, me lo imagine todo, no puede ser, salgo de la habitación y me encuentro a la enfermera.

-Hola

-hola, señor, pensé que estaba en la habitación con su esposa.

-sí, con mi esposa estaba un médico, ¿Quién era?, ¿Dónde está?

-si el Dr Reuben él ginecólogo, me dijo que era el medico de su esposa- la miro de alguna forma que sabe que estoy en desacuerdo, más mi rabia...

-ese tipo no es el medico de mi esposa, ¿Dónde está? quiero hablar con el

-disculpé señor Grey, eso me dijo el cuándo lo encontré en la habitación de su esposa... pero creo que ya se fue porque él no estaba en turno. – me dice y se va, con lo que creo que es miedo, yo estoy hecho una furia. – veo a la distancia que mi madre se acerca a mí.

-hola, hijo, como estas, como esta Ana hay alguna mejoría- me abraza y parece que la oscuridad se apodera de mi como hace años, y mi corazón se acelera y siento la urgencia de alejarme de ella- que pasa Christian, ¿has tomado?, Christian Ana es fuerte ella va a salir pronto de esto, tienes que estar calmado- siento el vibrar mi celular, lo saco y miro su pantalla, es Teddy, mi mama mira la pantalla- tienes que mantener la calma por ellos, por tus hijos, - la miro y contestó.