—Majestad, no considero que usted siga aquí después de todo. —Una leve risita hizo despegar mi imaginación de la realidad.
—Te diré una cosa Capitán Jeon, te sugiero que dejes de interrogarme, no creas que no me he dado cuenta sobre tus grandes platicas con el visir Kang Daniel, evitame la pena tener que ser viudo.
—Lo mismo le digo, Alteza. —Observé como sus dotadas manos tomaron la copa de cristal bebiendo de ella al acercarlo a su boca. —¿Por qué?, ¿seré una de tus miseria Jeon?
Comenzó el debate, nuestras miradas eran intensas entre sí, este quería jugar sucio durante el desayuno, no sería tan fácil como pensé.
Las sirvientas entregaban el postre en charola de oro, mientras que otras acomodaban a la perfección cada utensilio. Mi sublime agradecimiento en voz presente, una leve sonrisa en mostraba mi rostro.
—Creo que sí, no hemos consumado Princeso Kim, es estresante, ¿Disponible? Tengo mucha esencia que liberar.
Me levanté de golpe de la mesa caminado hacia él, me había enfurecido dichas insinuaciones delate de mis leales sirvientes, este ambiente se volvió muy crédulo en mi contra, debía de controlar mis emociones por completo, en cada detalle o gesto que hacía.
El viento sopló en mis mejillas acariciándolas en calma.
—Me diviertes mi amor...
Nunca pensé en decirlo en el momento, sorprendido por lo dicho entre dientes, proseguí. — Oh, quien pensaría de que esta belleza no es eterna, ternura. Después de todo eres un Alfa muy confiado, que no piensa en los problemas ocultos que se puedan liberar cuando menos se lo espere. Eres una miseria Jeon, por mi. No estarías vivo, ya me canse, me despido de ti.
Tocando sus mejillas con mis manos acariciaba su mandibula hasta quedar sin nada en que acariciar, suspiré en alegría entre mi hipocresía me hice hasta creer un poco de mi insolencia.
—Te voy a complacer, tienes muchas cosas que pagar, nada es gratis en esta vida, cuando oculte el sol, hay estaré. Amado mío.
—¿A dónde va Alteza?, pensé que se quedaría a disfrutar del postre.
—Ya no quiero, tengo pendientes que realizar durante el día, no hay mañana, hasta la atardecer
Me retiré del comedor con una sonrisa fingida, posteriormente en el trayecto cambio mi expresión a una tan vengativa, dicha locura sería el hasme hablar del pueblo, quién lo iba a pensar. Al llegar al Sala del Congreso Real o había nadie, excepto con una mano derecha mía.
—Necesito que todo este listo para hoy, debes de preparar a tus hombres, no quiero fallas por ningun motivo. ¿Tienes todo listo para está noche?
—Sí Alteza, todo esta en orden, ningún guardia cuidará sus aposentos. Mande la orden exacta y todo acabará rápido.
—No dejes vivo al Capitán Jeon Jungkook, pase lo que pase nadie debe saber sobre esto. Falleció de una gran enfermedad terminal. Inventa algo increíble, que sepan que fue por obra de su destino y no condenado. —Expandí mi mano derecha, sostenía una bolsa de monedas de plata, lo suficiente para los involucrados.
—Esto no se saldrá de sus manos, yo me encargaré de que no suceda alguna infamia ante su contra, me despido alteza
Inclinó su cuerpo en agradecimiento antes de partir de la Sala, en mi inquietud me dirigí en busca de mi biblioteca real con la intención de soltar mi imaginación andar, tenía una sonrisa despampanante. Mi camino iba a ser legendario, como ninguno, manchado de sangre pero a la larga determinante e intimidante en un orden juridico y legitimo ante las leyes del pueblo, basados en un conocimiento expediente con que derrocar un buen estruendo.
—¡Isabell!
Llamé a la más indicada persona para estos casos, tengo que saber si necesito cambio de planes o que rollo podía pasar para evitarlo, esto es estresante si lo pienso de esa manera, tanto que no vi como había llegado tan rápido a mi enfrente
—Lo sé, es incredulo llamarte cada vez que te necesito pero; necesito una ropa adecuada o un traje para funerales, no quiero verme una prostituta feliz por ver morir a un Capitán recién casado conmigo, quiero "El princeso Kim Taehyung perdió a más gran amor de su vida, aún hombre importante para la realeza, que en paz descanse el Capitán Jeon Jungkook, que se mejoré o yo que se Alteza". ¿Entonces?
—Yo me encargo —Exclamó con una leve reverencia antes de salir de la Sala, dejó el lugar en un silencio profundamente con ecos.
(Por Otro Lado)
Capitán Jeon Jungkook
Ni siquiera se desde cuando me volví muy perverso e insolente en el desayuno junto al Princeso Kim, pensar que solo tuvo el valor de soportar a un degenerado me hace sentir que fue acoso, estoy en un grave lío contra mis instintos de justicia, pedir perdón y volver a empezar sin tantas mierdas de Alfas sin educación, con poca autoestima en realidad. Mantengo mi régimen al tanto, pero mi situación irremediable sobre esta mañana es sumamente frustrante ante mi cabeza, aclaro que nunca he sido así, hablé con la punta de mi pene al creer que era un omega cualquiera, siento correr peligro, lo presiento. Estoy aquí por mi pecado, mi propio pecado que hizo que un princeso independiente terminará a mi dominio, no deseo eso, debo de ser la mejor versión que él espera, quién diría que casarse con un Princeso sería cosa fácil, en cualquier momento debo ser yo quien le de un trato justo para satisfacerlo. Su mirada es tan diferente a cualquiera, siento que debo de conocerlo, debe de conocerme así podrían cambiar las cosas, solo debo llegar a confrontar mis errores, probarle que no soy como la mugrienta sociedad llena de ideas hirientes, denigrantes y de cuentos tontos sin valor menospreciando su ser verdadero, su esencia.
—¡Capitán Jeon!, perdone que lo interrumpa de sus pensamientos, el gran visir Kang Daniel lo ha venido a visitar.
—No es posible, como...¿el Princeso Kim sabe sobre ésto?
—No, viene por ordenes del Gran Rey, me pidió decirle que lo está esperando en secreto en la Capilla Azul cerca del Río Han, El princeso Kim no debe saber nada, entienda, por su propio bien, jamás se convierta en el enemigo del Princeso Kim, el trae el infierno, es una perra manipuladora...
Escuché un leve sonido, podría creer que no fue el mismísimo viento, incluso creo que ella misma logro involucrarme en el fuego, por que ahora mismo siento el verdadero terror al ver que alguien más estuvo detrás de esas malditas puertas huecas.
—Mierda...estoy jodido...
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La Manuscrita Del Santuario Real
FanfictionTodo comienza en el año 1509, cuando el Reynado de Osman estaba en un completo caos, decisiones injustas que abrazan la codicia en que se destacaba la subordinación imperial. Ese mismo año, nacería un Princeso, el primer heredero oficial del Rey y s...