Perdido en tu Fragancia -Especial Navideño-

-Punto de quiebre- 23/11/22

...
-Diciembre 31-

Goku- -¿Cómo fue qué llegamos a esta situación? - Se cuestionó viendo a Vegeta encima de él.- ¿Todo empezó hace 18 años?
Recuerdo aquel momento difícil de mi infancia, tenía cinco años cuando mi hermano mayor desapareció, mis padres y abuelo fallecieron repentinamente y por las consecuencias de ello terminé viviendo en la calle, como un indigente más. Muchas veces le pedía ayuda a la gente, pero siempre me ignoraban o me miraban asqueados. Pedía comida en los puestos callejeros pero siempre me echaban como si fuese una plaga. Un par de veces pedí posada, pero nunca me la dieron y siempre acabé durmiendo cerca de un bote de basura, con una pequeña cobija que encontré en ese mismo lugar.
Pasé en esa vida al rededor de tres meses, conociendo lo aterradoras que eran las calles de Inglaterra cuando no se tenía ni un centavo, hasta que una mañana un señor, tocando mi sucia frente me despertó.
Era el señor Vegetta, para ese entonces él fue socio de mi padre, y supongo, sabía lo que pasó pero lo ignoraba por mí. Me tomó de la mano, y me llevó hasta su auto que lo esperaba frente a nosotros. Me dio comida y agua, y por último preguntó porqué me encontraba en esa situación. Algo a lo que respondí con mi inocencia, sentenciando que todos me habían abandonado. A final de cuentas me dijo: "No pasa nada, yo te cuidaré ahora".

Después de eso me llevó a su casa, hizo que me diera un baño, me dio ropa y una habitación, y ahí fue cuando conocí a su hijo, Vegeta. Se veía un poco molesto, intenté hablarle para conocernos, pero sólo se volteó y se fue.

Pasamos algunas semanas en Inglaterra, y después viajamos a Japón, en donde vivo ahora.

Recuerdo que el señor Vegetta viajaba mucho y todas las veces Vegeta quedaba a cargo de la casa. Siempre le ordenaba al mayordomo que yo comiera en la sala, no le gustaba que comieramos juntos.
En esas ocasiones, muchas veces me negó la cena, pero a media noche cuando yo moría del hambre, Minoru, nuestro mayordomo, se aparecía con un plato de comida y me decía: "El joven amo le manda esto". Comúnmente era la cena y seis varillas de dangos... Mi postre favorito.

Pasaron los años, hasta que ambos teníamos quince.
Recuerdo que pasó en abril, el día de mi cumpleaños cuando Vegeta empezó a comportarse raro de un momento a otro.

...

Minoru- Vaya, se adelantó un año. -Comentó con un poco de sorpresa. Tomó al joven amo de los hombros y lo sostuvo- Joven Goku, ¿no siente nada extraño? -Preguntó mientras empezaba a caminar junto al menor-

Goku- No... Pero, ¿qué pasa?

Minoru- El joven Vegeta es un omega con su primer celo. Usted todavía no se ha hecho el examen de raza por lo que debo estar pendiente. Puede que usted sea un alfa como su padre y las feromonas del joven despierten su instinto, le vuelvo a preguntar, ¿siente algo extraño?

Goku- No.

Minoru- Entonces acompañeme, le enseñaré cómo se atiende este problema.

Subieron a la habitación del peli-flama, Minoru lo recostó en el centro de la cama y con su pañuelo le limpió el sudor de la frente.

Minoru- ¿Podría traerme un plato de fresas y un paño húmedo?

Goku- Sí, ahora lo traigo.

Pasó a al cocina de la segunda planta y en una pequeña taza echó todas las fresas que habían en el refrigerador.

De la repisa del baño tomó una toalla negra y la empapó con agua fría para después volver a la habitación.