COLD (Adaptación)

18: Sonrisa

Jungwon se quedó pasmado en su lugar, mientras su hyung esperaba pacientemente una respuesta que no llegaba.

Su sonrisa tembló.

Demonios, la había jodido, sería rechazado, no debió dejarse llevar por sus impulsos.

Mientras el mayor se atormentaba con aquellas ideas, Jungwon no podía pensar en otra cosa que no fueran las películas románticas que había visto para matar el tiempo.

¿Qué se hacía en esa situación?

Vamos, piensa, piensa.

¿Iba primero la respuesta o el beso?

Su cerebro no estaba funcionando correctamente en ese momento, por lo que solo hizo caso a lo primero que su cabeza pudo formular correctamente.

La distancia que los separaba era tan poca que Won solo necesitó inclinarse ligeramente para que sus labios se encontraran.

Fue solo una presión, ya que no sabía que era lo que debía hacer exactamente.

Sus ojos estaban cerrados con fuerza y sus manos estaban apoyadas en los hombros de Heeseung, quien se tensó al instante de sentir los labios del contrario tocando los suyos.

Jungwon entró en alerta y se separó con gran rapidez.

¿Lo había hecho mal?

Ahora que su cerebro había agotado los pensamientos estúpidos notó algo.

Tenía mucho más sentido decir su respuesta antes de simplemente lanzarse sobre él.

Sus manos se dirigieron a su rostro, tratando de ocultar el color.

—Eso... eso fue un sí, Seungie— recién en ese momento Heeseung se pudo recuperar, la felicidad extendiéndose por cada rincón de su cuerpo.

Apartó de pronto las manos del menor que le impedían la vista completa de su rostro y lo acercó nuevamente.

Ambas bocas se encontraron en un beso torpe por la falta de experiencia de ambos, pero muy dulce y sin segundas intenciones.

La falta de aire los obligó a separarse y lo que vio Heeseung lo dejó simplemente sin palabras.

—Wonie... tú... tú... estas sonriendo— la felicidad del mayor llegó a un punto superior, no solo había recibido su tan ansiada respuesta positiva a su propuesta, sino que, por primera vez estaba viendo la sonrisa de su pequeño.

Jungwon algo incrédulo tomó su celular de uno de sus bolsillos para mirarse en el reflejo de la pantalla.

Allí estaba, algo leve, pero seguía estando presente en su rostro, una de sus manos se dirigió a ella, se sentía extraño.

Heeseung lo observaba embelesado, había imaginado ese momento, pero nada se le comparaba, era simplemente perfecta, sutil y deba ver un poco sus blancos dientes.

Estuvieron de esa manera hasta que su expresión facial volvió a ser la misma de siempre, Jungwon dejó salir un suspiro e inmediatamente fue capturado por los brazos de su novio.

—Sé que tu sonrisa por ahora ya se fue, pero gracias a esto tengo más esperanzas en que puedas expresarte libremente— pegó su frente a la contraria y frotó sus narices en un beso esquimal.

El día no podía mejorar.