Escribo tu nombre en mi mano, escribo tu nombre en mis labios,
Escribo tu nombre esta noche.
Ante la prestancia de las manos que me sostienen, el tiempo pasa sus manecillas por sobre los arboles que se divisan como aves perdiendo su plumaje, una risa que da palmadas en mis hombros y abrazos que nacen de tus ojos, una voz que va regando música y mis manos te cosechan hasta convertirte en flor, tus manos me trazan el camino, tus palmas son un hogar, son el esfuerzo, la valentía, son la paz que me trasmiten en cada caricia.
Que sempiternos sean nuestros cuerpos, nos guarde la primavera entre sus besos, y en cada hueso se nos escriba un somos, y al invierno lleguemos a ser, hasta entonces que la Luna nos sonría apoyando su cabeza en el hombro del Sol, y ya en el ocaso, se abran nuestros brazos y se nos de paso a arroparnos, hasta entonces esperare acompañada del alba que burlándose de las cortinas deja entre verse a través de tus pupilas empapando nuestros cuerpos en un beso tibio, dándole vida a la vida, dándome vida, mi vida.
Hasta entonces seguiré escribiendo tu nombre.
