Atrapada entre dos mundos

32. Atrapada entre dos mundos

Antes de leer...

Holaa bueno aqui esta el ultimo capitulo(...) escuchen la cancion que esta en multimedia mientras leen para darle mas feeling al capitulo (es de TFIOS/BLME my love) eso es todo, nos vemos al final del cap.

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Ya era de noche, a esa profundidad, el día y la noche no se distinguía tan bien, solo lo sabias porque en el día el agua estaba un poco más caliente que en la noche, en ese momento era de noche, madrugada para ser más específica. Tenía frio y me quedaban pocas horas de aire en mis pulmones. Aun no podía conciliar el sueño y daba vueltas en la piedra que me estaba sirviendo como cama. Dentro de pocas horas amanecería, vería a mi familia y me llevarían a un lugar muy lejano para no volver. 

Me quedé dormida por un momento hasta que un ruido me despertó. Me erguí y nade hasta la puerta de mi celda, intenté mirar hacia la puerta de entrada del calabozo pero fue en vano, no podía. Escuché otro ruido. Pensé en Xavier, él me había visitado hace unas cuantas horas, tal vez volvía o podrían ser Poseidón y sus soldados dispuestos a llevarme. 

No fueron ninguno de ellos. 

Pude divisar una cola azul entrando y nadando hacia donde yo estaba, no supe quién era hasta que estuvo frente a mí.o- por el Rey - dije tapándome la boca con la mano y abriendo los ojos muy grandes. Simplemente no lo podía creer.

No podía creer a la persona que estaba en frente de mí en ese mismo momento

- por Dios, Ben... - susurré casi al borde de las lágrimas, estas querían bajar por el enorme abismo por enésima vez en este tiempo, pero no las podía dejar, sin embargo no era como en la tierra, que se notaba cuando lloraba, aquí no, aquí todo era agua y podías llorar en silencio y no lo notarían. Así que lo hice, me permití llorar en silencio mientras Ben intentaba abrir la puerta de mi celda. 

Él levantó la cabeza y se me quedó mirando un rato.

- ¿estas llorando? - me preguntó frunciendo un poco el ceño. Negué con la cabeza sin poder decir ni una palabra - ¿cómo que no? Estas llorando - afirmó el chico de los ojos azules y yo asentí - Brisa, no quiero que llores, estarás bien - metió una llave en la cerradura y esta cedió, abrió la puerta y yo salí - estaremos bien

Al momento en que salí no pude aguantar y me abalancé sobre él en un abrazo. Me quedé con la cara fundida entre el hueco que hacia su cuello y su hombro un buen rato hasta que escuché voces provenientes de la entrada. Me separé de Ben con velocidad y lo tomé de la mano.

- ¿cómo entraste? - le pregunté de repente mientras nadábamos hacia la única salida.

- fue muy fácil, no había nadie vigilando - me contestó este encogiéndose de hombros y en ese momento entendí todo.

- maldita sea, Ben, fue una trampa - espeté con las lagrimad otra vez picándome los ojos - ¡mierda! Es una maldita trampa