25 de agosto, 2019
20 minutos en la habitación, 3 videos de YouTube, 7 intentos... Y Kazutora seguía sin poder amarrar el nudo de su corbata. Por lo general, en cuanto a ponerse una corbata se refería, era Chifuyu quien le ayudaba. Sin embargo, en esta ocasión no podía siquiera considerar pedirle auxilio, porque ya saben lo que dicen...
Es de mala suerte ver al novio antes de la boda.
—Ven, déjame ayudarte —dijo Baji, levantándose del borde de la cama y cruzando la recámara hasta situarse junto a su mejor amigo. Recibió la tela amarilla y, con movimientos ágiles, comenzó a atar el nudo de la misma.
—No sabía que podías atar corbatas.
—Estaba obligado a usar una todos los días como parte del uniforme de mi secundaria —explicó—. Supongo que es cierto eso de que las cosas bien aprendidas nunca se olvidan.
Asintiendo con la cabeza, concordando con las palabras del espíritu, Hanemiya tomó de vuelta la prenda, pasándola por encima de su cabeza para luego elevar el nudo que mantendría la pieza en su lugar. Dio media vuelta hasta quedar de frente al espejo de cuerpo completo, apreciando como le lucía el traje gris claro compuesto de tres piezas, y detalles color oro, que Mitsuya había confeccionado con especial cariño para la ocasión.
Era un traje muy bonito, en verdad. Había sido hecho a la medida, al igual que el de Chifuyu, el cual aún no había tenido la oportunidad de ver. Lo único que sabía acerca del atuendo de su prometido era el color: Azul marino.
Recordaba algo sobre su pareja contándole sobre cómo una vez Mitsuya le mostró una tela azul, destinada a ser el material para un traje de boda que le habían encargado, y desde ese momento se enamoró de la idea de casarse portando ese mismo color.
Y hoy, ese sueño se le cumpliría.
—No puedo creer que te vayas a casar —suspiró Baji, con una pequeña sonrisa pintada en los labios. Entre sus manos revoloteaba un sobre de papel, el cual sostenía firmemente desde el momento en que pusieron un pie fuera de su hogar—. Y menos que voy a ser tu padrino de boda.
—Lo sé... —replicó Kazutora, dejando que se le escapara una risita nerviosa—. Por cierto, en la recepción intenté que pusieran el portarretrato sobre tu silla de una manera distinta, pero no me hicieron caso, así que tendrás que sentarte sobre tu propia foto...
—Tora, me da igual donde o como tenga que sentarme. Lo único que importa es que, a pesar de todo, pude estar presente en tu boda... Y en la de Chifuyu, que nunca pensé que fuera a ser la misma...
Kazutora sonrió enternecido. Cada vez que por su cabeza se asomaba nuevamente el recuerdo de que se iba a casar con Chifuyu, sentía mariposas revolotear no solo en su estómago, pero también en su pecho y en todas sus extremidades. Y su estado de euforia incrementaba de forma grata ante el hecho de tener a todos sus amigos allí junto a él, en un momento tan importante de su vida.
En especial, le hacía ilusión tener a Baji a su lado.
Keisuke Baji, quien había sido su primer y único amigo verdadero durante su infancia; quien le presentó a las demás personas que terminarían formando parte crucial de su vida y acabaría considerando como su familia; quien compartió su mismo pecado y prometió seguirlo sin importar el qué; quien sacrificó su propia vida por la suya...
Siempre estaría agradecido con él, y esperaba poder seguir cerca suyo por miles de años más, como amigos, mejores amigos, familia...
—Oye, Kazutora... —llamó Keisuke, arrancando al ojiámbar de su ensimismamiento. Kazutora fijó su mirada en el espectro, quien le entregó el sobre que tenía en mano. Confundido, lo recibió, observando como Baji tomaba un profundo respiro antes de continuar hablando: —Es mi regalo de bodas, para ti... No lo abras hasta que yo te diga ¿Ok?
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Ghost of You || KazuFuyu
FanficKazutora Hanemiya vive una vida relativamente normal. Trabaja en una tienda de mascotas, vive en un bonito apartamento, y tiene la dicha de ver a Chifuyu Matsuno, el hombre del cual está enamorado, a cada momento del día. Tiene la vida con la cual s...