S H O R T Y I

9

"La semilla del Mal"

Stolas miró frustrada en dirección a la rama del árbol frente a ella y gimoteo.

_Pumpkin Seed, porfavor, reconcideralo_ Imploro _ Debo llevarte al veterinario o esa herida se infectara ¿O es que tu quieres que se infecte?.

Los ojos juguetones la miraban con burla desde lo alto, no pensaba oír más súplicas. De forma hilarante recibió un monosílabo como respuesta.

_¡Mewww!_ Y procedió a lamer su patita.

_¡¡¡AHORA SI, HIJO DE PERRA!!! ¡¡YA COLMASTE MI PUTA PACIENCIA!!_ Chilló y sin dudarlo nuevamente intentó trepar el árbol.

Aunque gracias a sus zapatos de escuela nunca llegaba muy lejos. No pasaron ni treinta segundos cuando Stolas fue a parar de culo al suelo.

Otra vez.

_¡¡¡PUMPINK SEED!!! ¡¡BAJATE DE AHÍ O LLAMARÉ A LA POLICIA, MENDIGO GATO BUENO PARA NADA!!.

Pumpkin seed, o Semilla de Calabacín,  era el hijo de Mr. Pumpkin,  o el señor Calabacín; Stolas tenía la ridícula teoría que como El Señor Calabacín era naranja y gordo como una gran calabaza y el pequeño Pumpkin Seed era chiquito y de color nud como una semilla, era una señal más que suficiente para que se tratara de un padre y un hijo.

La chica siguió lanzando improperios e insultos al aire sin notar que desde la escalera de la escuela primaria dos niños la miraban curiosos.

El hermano mayor se sentó junto al rubio menor de anteojos y sin quitarle los ojos de encima a la niña le ofreció una malteada al varón.

_¿Todavía sigue intentando bajar ese gato, Rindo? Ya van tres días..._ Mencionó el mayor.

El menor asintió.

_Si... Y parece que serán cuatro..._ Musito.

Stolas iba desde hace tres días a ese mismo árbol a llevar comida, agua y a intentar que el minino baje.
El primer día a los hermanos le pareció gracioso ver a la pequeña mocosa intentando trepar el árbol una y otra vez, cayendo al suelo con fuerza.

Al segundo día la gracia fue perdiendo la fuerza; la curiosidad les ganó terreno cuando vieron como la chica permaneció durante horas debajo de la lluvia solo para que el pequeño gato comiera.

Era... Interesante.

Ese día en cambio, el tercero, estaba despejado y con un sol muy brillante.  La chica está vez no traía comida pero parecía más que determinada  a bajar al gato.

Otra vez hizo el intento de bajarlo y falló.

_¿Sabes? ¡La ayudaré _ Declaró el mayor_ Me canse de ver a esa niña inútil...

El chico de anteojos miró boquiabierto a su hermano ponerse de pié y caminar en dirección a la niña, sin perder tiempo se puso de pié y corriendo imitó su acción.

_¿Eh? ¿Por qué quieres hacer eso, hermano? Es una chica, de seguro tiene piojos..._ Se quejo una vez estuvo al lado de su hermano _ Además ¿No viste su cara? Es una Gaijin...

El mayor se encogió de hombros.

_Da lo mismo, tampoco es como si fuera un animal..._ Al acercarse cada vez más el chico musito_ ¿Ves? Incluso tiene uniforme de escuela.

El menor se mostró frustrado.

_Hay perros que usan pequeñas corbatas graciosas Ran... Y eso no es un perro...

Stolas suspiró y se llevó las manos a la cadera.

_Maldito gato hijo de-¡AHHH!_ Gritó al sentir un par de brazos tomándola de las rodillas y alzándola_ ¡¿QUE HACES?!_.