S H O R T Y I

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"Encuentros inesperados"

Stolas estaba parada en la puerta de la residencia Sano con una descarada expresión de cansancio, a su lado Haru parecía igual de somnoliento y ¿Que esperaba? Mikey los había invitado a desayunar un sábado a las ocho en punto solo para conocer a sus amigos nuevos.

Haruchiyo bostezo y simplemente enterró el rostro en el cuello de su amiga dejando que las finas hebras negras de su cabello acariciaran su piel; siempre olía rico, lo hacía sentir como envuelto por una manta limpia y calidad en un cruel invierno.

_¿Y si volvemos a tu casa a dormir ?_ Cuestionó mientras acariciaba la mandíbula de la pelinegra con la nariz _ ¿Sientes curiosidad? Deberíamos excusarnos e ir a comer ostias en la cama...

Stolas se sentía muy tentada a hacerlo, después de todo la noche anterior habían entrado a hacer travesuras en la iglesia como por ejemplo; Taparon la cañería tirando varias bolsitas de Orbis en el retrete, Haruchiyo meo en el agua bendita, colocaron una bolsa llena de animalitos muertos como ratas, sapos, un mapache, la cabeza de un gato y la cola, oreja y pata de un perro en el tanque de agua potable. pusieron la cruz del púlpito de cabeza, pintaron manchas de sangre, cruces invertidas y pentagramas en los santos, reemplazaron un cuadro de Jesús por la foto de Mel Gibson en Corazon Valiente y se robaron un tuper de ostias sin consagrar.

Eran psicópatas.

La puerta se abrió y el rostro de Baji se contorciono a uno furioso al ver como el albino rompía el espacio personal de Stolas.

_¿En serio? ¿Media hora tarde? Vaya, no tenía muchas expectativas con ustedes dos y aún así logran decepcionarme...

Stolas sonrió de lado y le dio un empujón para luego entrar.

_Muevete Edward_ Se burlo _ ¿En donde está Mikey? Estamos hambrientos...

Haruchiyo la siguió de cerca y al pasar por el lado de Baji le saco la lengua de forma infantil. El pelinegro detestaba que la fémina tuviera tanta debilidad con el albino, prácticamente lo malcriaba como a un niño .

Stolas corrió en dirección al patio y una vez logró divisar cabello rubio, prácticamente se tiró encima y lo abrazó.

_¡Mikey! ¡Este bastardo me está regaña-... Estas un poco... ¿Alto?_ Stolas frunció el ceño y cuando se volteó y pudo vele la cara Chilló espantada y prácticamente salto lejos de el individuo_ ¡¿QUIEN MIERDA ERES TU?!.

Draken se sintió más que sorprendido cuando, mientras esperaba a sus amigos que estaban preparando el desayuno, unos brazos delgados rodearon su cuello firmemente y un riquísimo olor a suavizante golpeó su nariz.

Unos ojos grandes y azules lo miraron horrorizados cuando se volteó curioso en diréccion al intruso. El también se sorprendió, la psicópata Gaijin que había ocasionado ese accidente estaba ahora frente a él junto al individuo albino de sexo promiscuo.

_¡¿ TU QUE HACES AQUÍ, MALDITA LOCA?!_ Gritó el varón.

Baji abrió la boca con sorpresa.

_¡Infiernos! ¡Este tipo te conoce, Stolas-Chan! _ Se quejo Haruchiyo.

El tatuado estaba muy cabreado con la fémina; Era una persona muy peligrosa para ser tan pequeña. Con fuerza tomó su brazo mientras con la otra mano tomó su cabello hecho un bollo y lo jaló.

_¡¿NO DEBERÍA MATARTE, HIJA DE PERRA?! ¡¡DEBERÍA HACERLO!!_ Gruñó furioso al recordar como la policía casi los arresto por encontrarlos con la mochila.

Stolas gimió de dolor y fácilmente lo reconoció.

Era el tipo de la plaza.

_¡¿Por qué quieres golpearme a mi?! ¡MEJOR GOLPEA A HARUCHIYO, EL LE DIO AL CAMIÓN DE COMBUSTIBLE! _ El varón gruñó.