Capítulo 3

569 85 5
                                    

Apenas sus pies descalzos soportan el dolor y las texturas del bosque, las ramas y rocas, incluso la tierra húmeda y resbaladiza

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Apenas sus pies descalzos soportan el dolor y las texturas del bosque, las ramas y rocas, incluso la tierra húmeda y resbaladiza. Lo único que quiere es huir lo más lejos posible, salvar su vida y su existencia en este mundo, por eso, aunque esté demasiado agitado, no piensa en detenerse.

─ ¡Es mejor que te rindas, SeHun! ¡No hay escapatoria!

Escucha un grito detrás de él y su ansiedad aumenta mucho más, casi dando gritos de desesperación.

Todo sucedió rápido, relativamente, tan rápido que apenas le dió tiempo de reaccionar y de correr en las profundidades del bosque. No sabe hacia donde va mucho menos en dónde está, como se mencionó, lo más importante es su supervivencia. Mientras iba quitando las ramas de los árboles de su visión, de repente fue embestido con un solo golpe, teniendo un peso inmenso sobre de él.

─ Si crees que te saldrás con la tuya, eres un completo estúpido.─ Gruñe la voz grave y amenazante, colocando un par de manos en el cuello del joven alfa.

─ No lo haré.─ SeHun se resiste, incluso intenta liberarse del agarre.─ Ni aunque muera.

─ Muerto o vivo lo harás, y yo me encargaré que así sea.─ Presiona más sus manos en el cuello de SeHun, pero este último con una fuerte patada se libera.─ No voy a permitir que arruines esto.

─ Entonces...─ SeHun se levanta de inmediato trayendo en el acto su forma licántropa, tan blanca como luna pero igual de dominante que la noche.─ Inténtalo.

Su oponente no se quedó atrás e imitó el mismo movimiento. De ese modo, SeHun vuelve a emprender su escapada lo más rápido posible, sin ni siquiera se atreve a mirar hacia atrás, al menos en su forma licántropa le permite ser más rápido y eficiente en la escapada.

Aún hay gritos pero sus fuerzas e ideales siguen ahí, necios e intactos. Tiene el ama y el corazón rebelde, nadie puede ir en contra de eso, ni siquiera después de su propia muerte.

El denso bosque lentamente se fue abriendo camino, no sabe en dónde está pero sigue corriendo con el peligro pisando sus talones. Entonces, el ruido de una corriente se hace presente, claramente es un río y los límites del territorio permitido.

─ ¡No importa cuando corras, SeHun! ¡De algún modo volverás a casa!

Están en los límites pero tampoco quiere dar ese placer de verse vencido y derrotado. De ese modo, no se detuvo, si no todo lo contrario, aumentó mucho más la velocidad y tomando el impulso necesario para atravesar el río sin problema.

Lo hizo, en verdad pudo hacerlo. Aunque claramente sintió como golpeó contra algo o contra alguien, pero de nuevo, está demasiado ocupado en huir que le resto importancia de inmediato.

El bosque se siente muy diferente y ajeno, se siente lejos de casa, se siente como un ave perdida buscando el camino que le haga volver, pero por otra parte, está aliviado mientras sus patas tocan la ajena tierra húmeda, no hay ataduras ni dolor, no hay nada que le pueda lastimar en ese momento. Finalmente pudo tomar un largo respiro y en regresar en su forma humana, los gritos de su hermano mayor desaparecieron por completo.

Si, es un gran alivio, en medio de un bosque que desconoce, sobre todo por un extraño aroma entre lo dulce y amargo, pero aún así no le tomó importancia, está demasiado asustado.

No sabe cuánto tiempo ha pasado, tan solo se tomó un segundo para contemplar su entorno, hay ruidos naturales junto con un extraño sonido blanco. Intenta mantenerse en alerta, pero su agotamiento le estaba ganando ventaja, apenas puede respirar y sus pulmones están sufriendo la consecuencia del todo el esfuerzo exigido y forzado, casi sintiendo un cercano desmayo.

─ ¡Ahí está! ¡Él intruso!

─ ¡No dejen que se escape!

De inmediato fue rodeado por grandes licántropos, la mayoría de pelaje oscuro y es claro, está justo en territorio de otra manada. Intentó volver a su forma licántropa, intentó hacerse el fuerte y luchar una vez más, pero de nuevo, su cansancio era demasiado alto que toda acción fue en vano, pues ese grupo de alfas lo atraparon con tanta facilidad. Siendo sujetado por una red, no intentó luchar por liberarse, pues solo lograría un combate dónde claramente sería el perdedor, pues uno joven alfa contra cuatro alfas, es muy obvia la desventaja.

En menos de lo que esperado, ya se encontraba en el centro de esa desconocida manada, aunque debía admitir que es muy bonito y demasiado humanizado por las estructuras e incluso el mismo entorno. SeHun se mantiene en silencio, aún está atrapado por esa pesada red, también está recibiendo demasiadas miradas de ajenos y curiosos, sin dejar atrás ese extraño aroma que se hacia cada vez más fuerte y molesto.

Quizás podía morir ahí mismo, pero en ese punto, le gustaría morir ahí que en un misérable lugar llamado "hogar". Si, todo es mejor que eso.

─ ¿Dónde lo encontraron?

El silencio se rompe con la voz de un anciano, quizás sea el líder de la manada, pensó SeHun.

─ Atravesó el río y tumbó a ChanYeol.─ Responde un tipo pelinegro con suml respeto, tanto que mantiene su postura recta.─ Y, fue él mismo ChanYeol que avisó al resto de la brigada.

─ Ya veo.─ Prosigue el anciano y se acercó a SeHun sin ninguna lentitud.─ Veamos... ¿Cuál es tu manada?

Cuestiona y SeHun no puede responder, tan solo hace un movimiento con su cabeza.

─ JunMyeon, quítale la red.─ Ordena y el anterior pelinegro no duda en obedecer la orden, dejando más nervioso a SeHun.

Por instinto o tal vez porque lo vió una vez, supo lo que iban a ser para averiguar de qué manada viene, por eso comenzó alertarse, gruñir y arrastrarse hacia atrás.

─ Dinos, cómo te llamas y de que manada vienes.─ De nuevo el anciano pregunta y SeHun no puede responder.─ Bien, si quieres mantener tu silencio... Muchachos, hágalo.

Con rapidez fue sujeto, sobretodo del brazo derecho, obligando a girarlo un poco para mostrar la famosa marca. En el caso de SeHun, la marca verde.

─ No vienes de lejos.─ Suspira el anciano mirando el antebrazo de SeHun y la marca verdosa.─ Los tuyos son de la manada de Luna blanca, ¿O, me equivoco?

SeHun resopla, no hay palabras que decir.

─ Descuida, nosotros nos encargaremos de llevarte de regreso a tu hogar, lobo blanco.

De forma venenosa y filosa resaltó el anciano y sin duda, hizo temblar un poco a SeHun, puesto que tenía la idea de no volver a su hogar, ni en un millón de años.

─ No es necesario que lo hagan, solo déjeme libre, no voy a causar ningún problema.─ Con la.voz temblorosa, al fin SeHun pudo hablar mientras que el anciano carcajeo con ironía, hasta podía decir que muy burlonamente.

─ ¿Un alfa como tú? ¿De tu especie? No estoy tan loco como para hacerlo.─ Continúa riendo.─ Mañana a primera hora serás devuelto a tu manada, no queremos ningún problema con ellos, no ahora.

Aunque SeHun suplicó un par de veces, su petición fue negada a la vez que fue llevado a una pequeña choza muy vieja y descuidada a pasar la noche. La puerta fue cerrada bajo candado, no hay forma de escapar.

No quiere volver con los suyos y debe encontrar una manera de conseguirlo, una forma de ser un lobo libre.

Alphas »ChanHun« (En Edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora