Capítulo 8

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Los primeros encuentros son extraños, pensó SeHun una vez de volver a su hogar

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Los primeros encuentros son extraños, pensó SeHun una vez de volver a su hogar. Son tan extraños que no es capaz de hallar alguna buena explicación.

Jamás en la vida había mantenido una profunda conversación con alguien ajeno a su manada y no sabe que tan malo podría ser eso. Es raro, bizarro pero le deja un dulce sabor en la boca.

─ SeHun-ah, te estuve en toda la mañana, ¿Dónde te habías metido?.─ YiXing es quien lo recibe en la entrada de la comunidad, se nota la preocupación en todo su rostro.

─ No exageres, YiXing.─ Resopla restándole importancia.─ Solo di una vuelta al bosque, ¿Tiene eso algo de malo?

─ No, pero conoces las reglas y es terrible que hagas eso...

─ Ya estoy aquí, estoy bien, ¿Cuál es el problema?.─ Casi grita, en verdad le irrita cuando su primo toma esa postura.

─ La reunión, SeHun.

Y entonces el mundo se oscureció de repente. El recuerdo de su madre impacta por completo en su cerebro, en verdad había olvidado ese pequeño detalle.

─ En la mañana nos teníamos que reunir con el Sr. Kim.

─ Mierda...─ Murmura bajo sintiendo un golpe mental en la boca del estómago.─ Perdón, YiXing-ah, lo olvidé por completo...

─ Tu madre está furiosa, y a mi me tenías muy preocupado, ya sabes, me da pavor que te vuelvan atrapar esos lobos... No son dóciles y, temo que te lastimen o maten.

─ No lo hará... bueno, ellos, dudo que lo hagan.─ Se autocorrige a la vez que sus palabras se hicieron torpes, y YiXing se muestra curioso por esas expresiones.─ Además ando por nuestra zona, no cruzo el lago.

Parte verdad, parte mentira. No se imagina el escándalo que puede causar si confiesa que convive con uno de esos lobos, para ser más preciso, aquel que mostró un rostro y carácter hostil. A SeHun solo bastó unas cuantas horas para determinar que ChanYeol es en absoluto hostil, incluso lo puede señalar como un sujeto agradable, tal vez hasta cálido, igual que su aroma.

Pero duda, duda que su primo quiera escuchar esa patética historia y también duda que la entienda. Quizás si ambos no estuviera en la misma posición como especie, las cosas serían sencillas y podrían dejarse llevar sin miedos por los dulces aromas.

Sería un sueño, algo perfecto. Pero la realidad es que nadie va entender, ni siquiera él mismo sobre lo que está ocurriendo.

─ Pero, ¿Qué es lo que haces allá afuera? Te fui a ver en la madrugada y no estabas en tu habitación y ahora, de nuevo desapareces, ¿Qué haces en todo ese tiempo, SeHun-ah?

─ Nada, solo estoy en el bosque.─ De nuevo suelta una verdad incompleta, esperando saciar la curiosidad de su primo.

─ ¿Y estás seguro? ¿Hay algo que quisieras decirme? No lo sé, cualquier cosa...

Alphas »ChanHun« (En Edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora