Que Padre tan Madre. (Katsudeku-omegaverse)

Capítulo 5. Un viaje al pasado.

Era de mañana las clases en la universidad eran pesadas, estaba cruzando el segundo año de universidad, solo quedaban dos más para poder obtener mi título.

Era realmente cansado, las cosas se ponían cada vez más pesadas, quería dormir eso era seguro, se notaba en las grandes bolsas que habían abajo de mis ojos, ojeras negras, no había dormido bien los últimos días tras estar en temporada de exámenes.

Caminaba por el campo del campus de la escuela mientras veía mi calificación final en el examen, un perfecto +A.

—Genial, ahora podré descansar tranquilo.-abrazó la hoja.

¡¡¡CUIDADOOOO!!!.

Fue lo último que escuché tras recibir un fuerte golpe en la cabeza, caminar cerca de donde estaban los jugadores no fue buena idea.

Abrí los ojos tiempo después, no se cuanto tiempo había pasado, solo sabía que un alfa rubio estaba acostado al lado mío.

—¿Estoy en la enfermería de la escuela?.- Hable en voz baja, miraba de lado a lado.

El chico también se despertó y me miró fijamente.

—Hasta que al fin despertaste.

—¿Quien eres? Y ¿porqué estoy en la enfermería?.

—Estabas caminado por el campo, accidentalmente una pelota de béisbol que yo lancé te golpeó la cabeza, y caíste inconsciente, te traje la enfermería quería asegurarme de que estuvieras bien y me quede.- se levantó de la silla y me extendió su mano.- Soy Katsuki Bakugo, y ahora que se que estás bien me largo de aquí, nos vemos después Deku.

Katsuki se dio la vuelta y yo le quede atónito ¿me acaba de decir que soy un perdedor?

—¿Cómo me dijiste?.- pregunte más no me escuchó, de había retirado de la enfermería después.

La enfermera Chiyo me explicó que estuve al rededor de cuatro horas inconsciente, tal vez porque traía demasiado cansancio acumulado, me dijo que tuviera más cuidado por donde caminaba y después me dejó ir a casa con una venda en la cabeza.

Que vergüenza, todos me miraban raro.

Izuku se fue directo a casa esa tarde, solo quería cenar y acostarse a descansar.

(...)

Los días transcurrieron tranquilos, hasta que flores de diferentes tipos comenzaron a aparecer en el casillero de Izuku.

—¿Otra linda flor?, que suerte la tuya Izuku-kun.- comentó una castaña amiga de peliverde.

—Así parece Ochaco-chan.- Respondió Izuku mientras miraba el tulipán con admiración y a la vez extrañes.

—Debes de tener muy interesado a ese alfa-beta.- comentó Ochaco mientras ella cerraba su casillero.

—La verdad creo que se trata de una mala broma.- contestó Izuku mientras guardaba la flor de nueva cuenta y cerraba su casillero para mirar a Ochaco.—¿nos vamos?.

Ambos omegas se dirigieron a clases mientras que un alfa rubio se asomaba a ver qué tan lejos iban los omegas.

—Bakubro, creo que ya fue suficiente, ve y dile que eres tú quien gusta de él o va a terminar pensando que eres un acosador y se va a alejar sin darte una oportunidad.

—¿tú crees?.

—Si.

Kirishima y Katsuki salieron de su escondite, no sin antes dejarle una pista al pecoso de quien era su admirador secreto.

(...)

Izuku llegó a recoger sus libros, después de que terminara el primer receso, lo primero que noto es como un papelito caía de entre sus cosas, lo recogió y leyó.

Tus ojos son muy lindos, dame una oportunidad, te prometo que esta vez no te pegaré con la pelota, si quieres con la otra, pero con la que te desmayaste ya no. (K.B).

—¿¡Es enserio que le escribiste esa ridiculez!?.- Kirishima veía juzgador a su amigo, no podía creer que hablara enserio.

—Fui muy específico, él sabrá que soy yo.

—Ya ni la jodes Bakubro.

(...)

—¿Izuku?, ¿porqué tienes la cara roja?.-Ochaco se acercó preocupada a su amigo, quien parecía estar en shock.

Izuku al ver las intensiones de su amiga al leer la nota, la rompió rápidamente mientras comenzaba a reír nervioso.

—No es nada Ochaco-chan, adelántate yo iré en un rato al aula.

Izuku se recorrió todo el campus, perdió sus últimas clases, y aún así no logró encontrar a su objetivo, rendido fue a buscar unos libros a la biblioteca, para estudiar lo que no pudo ver en sus clases de hoy.

Estaba tranquilamente leyendo, cuando sintió un suave toque en su espalda.

—¿qué pasa deku?.- se sonrojo al escuchar de quien se trataba, solo una vez lo había escuchado pero su corazón comenzó a palpitar fuertemente.—Ya tienes una respuesta.

—¿qué eres?, ¿idiota?, eres un vulgar.

—No puedo evitarlo, me gustaste demasiado.- dijo el rubio al ver la pequeña molestia pero gran sonrojo del peliverde. Iba a jugar un poco.

—¿Qué cosas dices?, solo nos hemos visto una vez además de que me dejaste inconsciente.- Dijo Izuku tratando de no cruzar mirada con el rubio, era la primera vez que alguien le decía tales cosas y eso lo ponía un poco nervioso, y no sabía como actuar.

Pero para ser sincero a él le parecía atractivo el rubio despertaba curiosidad, le atraía de cierta manera, quizás era obra del destino que las cosas pasaran de esa forma.

—Todas las flores que te envié fueron para disculparme, me sentí muy mal al dejarte inconsistente y no sabía como disculparme.- Kirishima lo había entrenado bien, Gracias Kir sin tu ayuda sería un desastre.

Izuku no sabía que responder, solo asintió.

—Si, comprendo, no estoy molesto, pero acepto tus disculpas.- Dijo Izuku con sinceridad, regalándole una tierna risa Katsuki, sin saberlo ya había puesto nervioso al alfa rubio.

—Y-yo ammm, ¿tendremos una cita?.- soltó,

—Claro, ¿porqué no?.

Suspiro aliviado dentro de su interior el rubio, estaba feliz.

La primera cita fue un éxito, por lo que muchas más citas ocurrieron después de eso, era lindo y mágico para ambos, fue lento pero su amor fue creciendo cada vez más. Pronto nadie dudaría que Katsuki e Izuku se aman.

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Un cap corto, pero yo creo que necesario, espero fuera de su agrado, pronto nos veremos más seguido en esta historia porque ganó al ser la nueva prioridad uwu.

Nos vemos pronto, no te olvides de comentar y votar que te ha parecido el cap.