El Campo De Prisioneros

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... ¿Acaso él es mi salvador?
Una luz empezó a iluminar el cuarto y me permitió verlo. Ropas verdes, sucias, destrozadas y remendadas, siendo muestra de sus batallas. Tenía un rostro claro, igual de herido como sus ropas, además de tener ojos negros como la oscura noche, y un cabello largo y blanco como la luna. Él no era un hombre cualquiera, él tiene ese aura de héroe que pocos logran siquiera tocar.
"Parece que estas consciente. ¿Puedes escucharme?"
"(Si)" afirme con la cabeza.
"Traemos algo de pollo. No es mucho y ya está frío, pero servirá para que comas algo"
Él camino hasta mi y dejo algo de comida en la mesita de noche. No podía olerlo ni verlo bien, pero confiaba en qué fuera comestible.
"¿Quieres agua?"
Yo había afirmado con la cabeza nuevamente. Él se acercó a mí y con una cantimplora que portaba empezó a darme de beber. Yo sentía como la fría y dulce agua tocaba mis labios y llegaba hasta mi seca garganta. Esto era una clase de paraíso, por primera vez en mucho tiempo había vuelto a beber agua limpia.
"¿Mejor?"
"Sí"
"Feliz de oírlo. Te recomiendo que comas y luego vuelvas a dormir..."
"No puedo"
"¿Qué?"
"No... No puedo descansar más. Debo ayudarlos"
"¿A quienes?"
"A los esclavos, debo de ayudarles"
"Mira, en este momento no estas en condiciones de poder ayudar. Come, descansa, y mañana a primera hora me explicas todo"
"Pero ellos deben de..."
"Escucha. En este momento nadie tiene energía, estamos cansados, y si hacemos algo apresuradamente todo saldrá mal"
Eso realmente me desánimo, pero él tenía razón, si regresó me van a capturar, y si eso llegase a pasar, la oportunidad de que todos seamos libres se esfumaria, aunque no quiero que sigan sufriendo otro día más.
"Cuéntame, ¿qué es exactamente lo que pasa?"
"Verá, somos un grupo de esclavos que hemos sido capturados y vendidos a nuestros esclavistas. Estos sujetos buscan vendernos al mejor postor para cumplir sus caprichos, ya sea el tener a un sirviente personal, un objeto sexual, un combatiente obediente, o un trabajador suicida, pero nosotros no estamos dispuestos a eso e intentamos pelear, pero todos esos intentos han terminado en fracaso y con represalias, todos menos este gracias a usted"
"Entonces es una trata de blancas"
"No se. Lo que ellos hacen es buscar a gente que no tenga hogar o que sea fácil de manipular, así como usar a su fuerza de combate para capturar a buenos guerreros, o simplemente comprarlos en subastas o a cualquier sujeto, y no importa la raza del esclavo, ya sean humanos, demonios, elfos, orcos, siempre que puedan cumplir con sus caprichos son candidatos perfectos a esclavos"
"Tal vez podamos pedir ayuda del imperio"
"Imposible"
"¿Imposible?"
"No sabe nada, ¿verdad?"
"¿Qué se supone debo saber?"
"De cierta forma el comercio de esclavos es legal en este reino, por lo que ellos son libres de moverse por las capitales del reino para comprar y vender"
"Diablos"
"Solo tenemos seis días antes de que la caravana deje esta ciudad y se mueva a otra"
"OK, mañana empezamos a crear un plan para sacar a todos de ahí"
"Entendido señor"
"Puedes llamarme Archer"
Archer. Así que es este el nombre de nuestro salvador.

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El edificio aún estaba ardiendo, incluso ardía más que el mismo infierno, pero el calor del fuego no era suficiente contra el frío de la noche. Aún así, el escuchar los gritos de esos hombres pidiendo ayuda mientras se quemaban vivos era lo único que me ponía feliz, era la prueba de que hice un buen trabajo.
El sol empezó a golpear mi rostro y yo me desperté. Era de día y podía escuchar a la gente caminar por las calles, así como el canto de algunas aves y el sonido de golpes en la puerta de la habitación.
"¿Archer, ya estás despierto?"
Era Kami quién tocaba.
"Si estás despierto di algo, y si te duele la cabeza como a Sarah sigue descansando"
¿Cómo que dolerme la cabeza?
Abrí la puerta y vi a Kami sacudiendo su oreja felizmente como su fuera un perro.
"Buenos días Kami"
"Ah, hola Archer"
"Que bien que estés bien. ¿Qué fue lo que le pasó a Sarah?"
"Ella despertó con dolor de cabeza y pensé que tal vez a ti te pasó lo mismo"
"Debe de ser por el alcohol, pero si ella apenas y logró beber un tarro, ¿cómo es que le hizo tanto efecto?"
"¿Qué hacemos?"
"Hay que dejarle una nota diciendo que salimos y la dejamos descansar"
"OK"
Ella salió y regresó a su cuarto con Sarah.
"Tu amiguita es muy agradable"
"Vaya, ya has despertado" le respondí al chico.
"Sí, no podemos perder más el tiempo"
Él se levantó de la cama y trató de no caerse con él mareo que tuvo. Camino hasta la puerta y de nuevo casi volvió a caerse, así que le ayude a mantener el equilibrio. Él aún estaba débil y adolorido por los golpes, pero insistió en que podía caminar por él mismo.
Kamelia había terminado con Sarah y cerró la puerta, por lo que ya era hora de irse. Pasamos primero por una panadería cercana y compramos un pan para cada uno y desayunar algo, luego iríamos a hablar con esos esclavistas.
El chico, cuyo nombre aún no se, nos guiaba hasta la caravana de esclavos por el mismo camino que habíamos tomado ayer para cazar lobos, solo que tomo una desviación en el cruce de tierra hacia una dirección sin camino. La caminata era larga, y la cantidad de lobos que había era muy pequeña a comparación de ayer, e incluso algunos lobos se alejaban ya que estaban solos, y los demás, o nos atacaban o simplemente no mostraban interés.
"¿Cuánto falta?" preguntó Kamelia.
"Varios minutos, no es un lugar tan cercano"
"Arrgg. Estoy cansada, y el sol esta muy fuerte. ¿Archer, podemos descansar?"
Mire al chico y él estaba muy concentrado en el viaje, aunque también estaba débil como para caminar bien.
"¿Chico, aún puedes continuar?"
"No descansaré hasta que llegamos"
"Entonces así será. Descansamos cunado lleguemos, ¿está bien, Kami?"
"OK"
Ese chico de verdad tenía determinación como para arriesgar su libertad para salvar a sus amigos, diría que incluso es más valiente que otros soldados.
"Por cierto, no me has dicho tu nombre"
"Einar"
"Einar. ¿Cómo fue que terminaste siendo un esclavo?"
"Fue hace unos años, nuestra hermana mayor había salido del Liet como parte de un escuadrón de reconocimiento. Se suponía que sería una misión de 15 años, pero pasaron 26 años y sólo regresaron 2 de los 23 soldados. Al parecer las cosas se habían complicado cuando el rey Hal de Valmidia había implementado la nueva ley de odio elfico"
"¿Una ley de odio contra los elfos? Eso es racista"
"No sabemos cuál es su verdadero nombre, pero en Liet la conocemos así"
"¿Hablas de la ley de control elfica?" respondió Kami "Esa ley dice que ningún elfo o ser parecido puede caminar por el territorio de Valmidia si no cumple algunas condiciones, como formar perte del gremio de aventureros, de la armada del reino, o haber jurado lealtad total al rey, o ser un esclavo. Se que hay más condiciones, pero era muy pequeña cuando escuché de ella por primera vez"
"En efecto, por esa ley es que nosotros no podemos estar en Valmidia. El asunto es que mi otra hermana pensó que Arwen podría seguir en Valmidia como miembro de un grupo, o que tal vez se caso con alguien y eso le permitió seguir viviendo ahí, por lo que ella, como miembro de la guardia de Liet, se alistó para una misión de búsqueda y rescate de los otros 21 soldados, y yo decidí acompañarla, después de todo queríamos que Arwen regresará a casa"
"Y fue ahí donde los capturaron"
"Sí. Nos separamos en cuatro grupos de siete para cubrir más terreno, pero nuestro grupo tuvo la mala suerte de toparse con un comando y su ejército. Aún me acuerdo del comandante, un humano de ojos negros con una mirada penetrante, y el único rasgo distintivo que tenía era una pequeña trenza en su cabello. Él y sus soldados nos derrotaron en cuestión de segundos, asesinando a dos de los nuestros. Fuimos capturados y entregados a uno de los nobles del reino para jurar total lealtad al rey, pero nos negamos y terminamos siendo vendidos a diferentes personas. Por suerte me quedé con mi hermana, pero... pero..."
Él estaba apretando su puño con fuerza, y su respiración era más profunda.
"Descuida, ya dijiste suficiente"
"..."
Todo el lugar se quedó en silencio, tanto que se podía escuchar la suave brisa del viento. No me agradaba este silencio, siempre pasan tragedias después de éste.
Nos tomó un par de minutos, pero por fin habíamos llegado hasta la caravana, y por suerte se habían establecido cerca de una colina, y esa sería la ventaja de altura que utilizaríamos. Subimos por esta y por fin Kami logró descansar un poco, al igual que Einar. Yo me quite el traje militar por el calor, y tomé la mira del rifle para ver la zona y resultó ser más grande de lo esperado.
"Quédense aquí, yo iré a dar un vistazo más de cerca"
"Voy contigo"
"No. Solo iré a ver un poco más y regreso, ustedes procuren no ser vistos"
Volví a equipar la mira en el rifle y baje por la colina hasta el campamento de esclavos. Habían varias aperturas disponibles en el muro de madera improvisado que rodeaba el lugar, pero sería mucho mejor entrar por la puerta principal y que ellos me dieran un tour.
"¡Hey! ¿Qué haces aquí? Largo"
"Me dijeron que aquí podía encontrar algo de interés"
"¿Qué interés buscas?"
"Depende. ¿Qué pueden ofrecer?"
"Sigame, le mostraré el producto"
El hombre se acercó a mí y luego me guió hasta la entrada, pero había algo familiar en él, en especial su ropa, era como si ya la hubiera visto antes, aunque no sabía si era en este mundo o en el mío.
"En un momento llega el jefe. No se mueva de aquí"
El hombre se fue dejándome con dos de sus compañeros. Estos tenían espadas más grandes que las normales, posiblemente tenían el mismo grosor de un proyectil anti-tanque, y una longitud similar a la de mi rifle, además de parecer soldados blindados de seguridad privada. Realmente parecen peligrosos.
"Buenos días caballero ¿En qué le puedo ayudar?"
Un hombre había llegado acompañado de tres guardaespaldas parecidos a los de la entrada, solo que cada uno llevaba un arma diferente: una espada, una ballesta, y un mazo. El hombre, por su parte, llevaba dos cuchillos, uno en cada hombro como algunos comandos o mercenarios, aunque no tenía la pinta de ser alguien violento.
"Hola, me dijeron que aquí podría encontrar a un buen sirviente"
"En efecto. ¿Busca alguno en particular?"
"No, pero me gustaría ver el lugar si no es mucha molestia"
"Pará nada, incluso podría llevarse dos. Sigame"
Los tres sujetos me rodearon y luego comenzaron a seguir al jefe, y yo tuve que hacer lo mismo.
Lo primero que vimos fue unos establos con lo que serían 50 caballos de fuerza, siendo atendidos por los guardias y algunos esclavos.
"Como puede ver nuestros esclavos son obedientes y capaces de realizar diversos trabajos, como cuidar de los animales"
"Eso veo, aunque yo no tengo animales"
"También son buenos para carga, aunque parece que tampoco carga mucho, ja"
Volteo a verme de reojo, pero luego concentró la mirada en mí y comenzó a analizarme de pies a cabeza como si fuese un robot.
"Ahora que lo observó mejor, usted se parece a la descripción del nuevo héroe"
"¿El nuevo héroe?"
"En efecto. El hombre de verde"
"No me concidero un héroe, solo un soldado"
"Mi capataz dice que usted ayudó a uno de mis esclavos a escapar"
"Seguro es por lo de ayer"
"Sí, y dime cuál es tu defensa"
"El tipo quería llevarse a mis compañeras como si fueran de él, así que traté de dialogar, pero el atacó y yo regrese el ataque, por lo que fue un golpe justificado"
"Y seguramente no vio a un elfo con él, ¿verdad?"
"De hecho no he visto elfos desde que llegué a este reino, pero hasta ahorita no me lo había cuestionado"
"Al parecer no sabe nada"
"¿Y usted sabe algo?"
"Existe una ley que prohíbe a los elfos caminar por el reino sin cumplir ciertos requisitos, como lealtad total al reino, o estar dentro de un grupo como aventureros, ayudantes, criados o esclavos"
"¿Sabe por qué?"
"Capricho del rey, aunque puede ver con la guerra de Liet"
"¿Guerra de Liet?"
"Una guerra humano elfica que dicen empezó algunos años, aunque no existen registros de alguna batalla, o eso se dice" el hombre volvió su mirada al frente del camino y se acomodo su cabello "Volviendo al tema de la compra, yo creo que usted debe de estar interesado en algo que sepa pelear"
"Posiblemente"
"Entonces le tengo a los candidatos adecuados"
Cambiamos de dirección y empezamos a cruzar el lugar, y por todos lados veía a esclavos de diferentes razas, incluso de las criaturas verdes que había matado en la ciudad durante la invasión, creo que se llaman orcos si mal no recuerdo. El chiste era que todos estaban encadenados y realizando trabajos forzados sin importar si eran niños o adultos, y a algunos los azotaba con látigos. Yo ardía de rabia, pero aún con mi pistola sería derrotado en cuestión de minutos.
"Bien, aquí tenemos a nuestros guerreros. Si hay alguno que le interese solo acérquese y yo le doy una descripción"
Miraba el lugar y buscaba alguna apertura poco vigilada, y casi inmediatamente la encontré, el muro tenía varias partes desgastadas y fracturadas, además de que le faltaba personal de vigilancia. No sería difícil abrir un hueco en esa zona, y si aquí están los guerreros entonces sería trabajo más fácil. Me acerque para ver mejor el lugar y podría decir que ni siquiera debía de romper algo, las tablas rotas me daban el espacio suficiente para entrar sin problema, aunque ahora había visto otra cosa. Al principio habían tres esclavos cerca, entre ellos una chica elfa, pero ahora que la veo más de cerca sentía que la conocía de antes. Camine en dirección a ella, y cuando estaba a unos pasos enfrente, ella subió la mirada y me observó con sus ojos llenos de odio.
"¿Nos conocemos?"
"..." ella solo continuó mirándome con odio.
"No creo que se conozcan" dijo el señor "Usted solo lleva aquí un par de meses mientras ella ha estado aquí por algunos años" luego me dio una palmada en el hombro "¿Qué le parece si le doy una oferta? 75 monedas de plata solo por ser su primer compra y por su reputación de héroe"
Yo no sabia si debía de aceptar la oferta, algo dentro de mí me decía que no, no porque fuera una trampa si no porque iba en contra de mi código moral, aunque esto podría ayudarme después, al fin y al cabo necesitaríamos más personal si queríamos acabar con el campamento.
"¿Entonces, acepta? Si no le agrada ella puede llevarse a alguien más"
"No, yo ahorita le pago"
Al final termine aceptando.
Tome mi mochila y comencé a buscar mi bolsa de dinero y algunas monedas sueltas para pagar, y logré encontrar las monedas necesaria en su divisa correspondiente. Ellos se encargaron en ese mismo momento de asegurar que les hubiera dado la cantidad exacta, ni una moneda de más ni una moneda de menos. Terminando de examinar el dinero procedieron a romper las cadenas y a amarrar sus manos con una cuerda.
"Esto se hace por seguridad. Cuando llegue a su destino podrá cortar la cuerda con un cuchillo"
"Bueno, pues gracias"
"Mis compañeros los escoltaran a la salida, no olvide hablar bien de nosotros, y es bienvenido cuando quiera"
El hombre se fue y los tres sujetos que le acompañaban nos llevaron hasta la entrada, y una vez que salimos, ellos volvieron a entrar y se fueron. La chica por su parte trataba de escapar, y de no ser por la cuerda, posiblemente lo hubiera logrado, aunque se veía igual de demacrada que Einar.
"Por favor detente, vas a lastimarte"
"No servire a alguien como usted"
"No necesito tu lealtad, solo tu ayuda, y luego serás libre"
"No caeré en una trampa como esa"
"Solo necesito tu ayuda para salvar a los esclavos y luego serás libre"
"¿Y por qué salvaría usted a esclavos como nosotros"
"Porque se lo prometí a uno de ustedes"
"¿Alguien logró escapar?"
"Así es, otro elfo al igual que tú"
"¡Llévame con él!"
"A eso vamos"
Corte la cuerda con mi cuchillo y caminamos hasta la colina. Subimos y Kamelia se acercó corriendo al vernos.
"Archer, parece que Einar se acaloro y está desmayado, le..."
"¡¿Einar?!"
La chica se sobresalto al escuchar ese nombre y subió corriendo lo poco que faltaba de la colina. Kami y yo la seguimos y vimos como se puso de rodilla a lado de él y le quito mi uniforme (el cual Kami le puso en la cabeza para evitar que le siguiera pegando el sol) y le dio un fuerte abrazo.
"Einar, de verdad lo lograste hermanito, lograste escapar?"
"¿Erika? ¿Qué haces aquí?"
"¿Qué importa? Lo importante es que estas a salvo"
"Volvamos a la ciudad, ustedes dos necesitan descansar" le di mi uniforme a Erika y cargue a Einar sobre mis hombros, luego las chicas me siguieron, aunque creo que no eran las únicas.

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