One arrow, one kill

Caos Administrativo

Volví a despertar y, diablos, otra pesadilla. Últimamente he tenido demasiadas pesadillas estos días, aunque, más que pesadillas son recuerdos, recuerdos de la guerra, de varias operaciones en las que he estado, las múltiples veces que vi morir a amigos, pero lo que más me inquieta es qué volvieron esos recuerdos. Creí que con el inicio de la guerra ya no volverían, pero son más fuertes cada día, el grito de mis amigos, de mi hermana, de esos malditos. Aún no sé cómo sigo manteniendo la compostura.
Me levanté de la cama y salí del cuarto hasta la calle. Ya había varias personas caminando por la calle, y algunas de ellas me reconocían como a un héroe, pero eso no significaba que dejarían de verme raro. Sacudí mi cabeza y comencé a caminar sin rumbo por la ciudad, con la esperanza de encontrar algo por las calles o por lo menos algo fuera de lo normal, aunque lo único anormal existente aquí soy yo. Emprendí la caminata y al cabo de unos minutos me encontraba viendo vitrinas de algunas tiendas. La mayoría de estas vendían pociones de vida o resistencia, armas de filo, y armaduras de diversos tamaños. Todas estas cosas eran iguales una a otras para mí ya que no sabía nada sobre espadas y magia, a lo mucho puedo identificar para que sirven diferentes tipos de filos en un cuchillo, pero la diferencia entre un sable y una katana, para mí, es el nombre. Un poco más en el centro había varios locales de comida. Algunos eran fácilmente puestos callejeros que vendían desde sopa para una persona hasta golosinas, que iban desde paletas y helados, incluso hot cakes, eso sí me sorprendió. Luego ya estaban los locales de comida corrida que vendían lo clásico; sopa, algo de carne, y un refresco, o cerveza en este caso. Y finalmente había un restaurante de alta cocina, el cual llamaba la atención desde varios metros de distancia. Edificio de tres pisos, un anuncio que era casi imposible no leer, y un tipo elegante y bien vestido recibiendo a la gente. Ese pack de presentación solo te avisaba que ahí te cobran un ojo por el vaso de agua, y yo no soy alguien que se pueda dar ese lujo. Pase de lado ese establecimiento y comencé a entrar por las calles hasta que de alguna manera llegue hasta un gran parque. Ese parque era un lugar hermoso, era verde con algunos árboles, un piso de piedra realmente lindo y detallado, en el centro había una fuente tan grande como un camión, varios niños corriendo por todos lados, vendedores de comida, algunos juegos destruidos, un tanque incendiado, varios restos de vidrios y balas tirados en el suelo, algunas personas muertas en el piso. Pero qué diablos, que diablos fue esa imagen, se sintió tan real. Froté mis ojos y otra vez veía el parque verde y con vida.
Decidí caminar un rato por el parque hasta llegar al centro, dónde estaba la gran fuente. Me senté en ella y como por arte de magia empecé a sentir una sensación de paz interior. Era algo tan tranquilo y al mismo tiempo tan perfecto que no parecía una casualidad. El sonido del agua moviéndose, la suave y fría brisa, los cálidos rayos de sol que tocaban mi cuerpo, pero que eran incapaces de molestar mis ojos porque un árbol daba su sombra en el punto exacto para evitarlo. Tan perfecto que parecía falso, pero al mismo tiempo tan real que era imposible decir que fuera mentira.
La tranquilidad que sentía en ese momento era tal que no soy capaz de describirla, ni siquiera soy capaz de decir cuánto tiempo llevaba en ese estado ya que el tiempo parecía detenido, aunque todo lo demás se moviera y fuera consiente de eso.
Seguía mirando a la nada y pensando en nada al mismo tiempo hasta que una voz me habló.
???: "¿Archer, alías hombre de verde?"
Yo: "¿Ehh?"
Regrese en sí y fijé mi vista a quien me hablaba. Eran dos guardias del reino, un hombre y una mujer, ambos sin el casco. Era el hombre quien me hablaba.
Guardia: "Sí, parece que si eres Archer"
Yo: "¿Paso algo?"
Guardia: "Es la capitana Raquel. Al parecer tiene un mensaje importante para usted"
Yo: "¿Enserio?"
Guardia: "En efecto. Será mejor movernos de una vez"
Yo me levanté y fui escoltado por ellos dos. Cruzamos algunas calles y después de unos minutos llegamos hasta el fuerte de la ciudad y se notaba una gran actividad por parte de los guardias y de otros ciudadanos, los cuales parecen trabajar en algo relacionado a transporte por la cantidad de caballos y carruajes que estaban moviendo, incluso había un dragón de escamas verdes que se preparaba para llevar un gran contenedor de madera. Eso será lo más cercano a un helicóptero que he visto en este mundo, o podría ser a un avión ya que tiene un vuelo vertical, pero al mismo tiempo es un animal de despegue vertical. Sería más correcto decir que es una clase de VTOL, aunque no me convence del todo.
Guardia 2: "Bonito ¿No lo cree?"
Yo: "¿Qué cosa?"
Guardia 2: "El dragón. Escuché que de dónde es usted no existen estos animales, así que es natural verlo sorprendido"
Yo: "Tienes razón, es la primera vez que veo un dragón"
Guardia 2: "También escuché que en su mundo existen pájaros de metal"
Yo: "Es verdad, pero más que animales son transportes"
Guardia 2: "Deben de ser cosas increíbles si pueden volar siendo totalmente de metal"
Yo: "Sí, todo un milagro de la ingeniería"
Llegamos hasta el fuerte y entramos al edificio. Varios guardias se movían en grupos y con ellos había varios esclavos y prisioneros. Caminábamos por los pasillos del fuerte atravesando a toda la gente que pasaba de un lugar a otro, y parecía que estaban realmente ocupados ya que algunos también estaban moviendo papeles con informes y algunas cajas con comida. El hombre abrió una puerta y en esta se encontraba Raquel hablando con varias personas, entre ellas parte de la guardia.
Aventurero 1: "No hemos tenido suerte en encontrarlo"
Raquel: "Hay personas, que dijeron que estaba ayer en el campamento, no pudo desaparecer así sin más"
Aventurero 1: "Lo sé, pero después del ataque nadie lo vio, ni siquiera sus seguidores"
Civil 1: "Capitana, ya tenemos los suministros almacenados"
Raquel: "En el patio hay un grupo de caballeros gestionando eso, ellos le dirán que hacer con la carga"
Guardia 3: "Ya está listo un convoy, capitana"
Raquel: "Bien, habla con el capitán de logística, está hablando con el comandante en el siguiente nivel"
Guardia 3: "Entendido" el chico salió corriendo a un lado nuestro.
Raquel: "¿Alguien ya encontró a Archer?"
Yo: "Presente" dije levantando la mano desde la puerta.
Raquel: "Qué bueno que llegas, tengo un mensaje importante desde arriba, pero necesito que esperes en lo que termino esto" dijo señalando un banco que estaba a lado de un librero"
Yo me centre en el banquito y tome un libro aleatorio. "Las crónicas de... algo" era lo único que entendí del título. Lo abrí y en un principio entendía algunas palabras, más no tenía una idea clara de la primera hoja. Decidí mejor centrarme en lo que estaba pasando mientras sostenía el libro como si lo leyera, y la situación en la guarnición era caótica. Buscaban desesperadamente a Quirce después del asalto de ayer, y al mismo tiempo quería regresar a los esclavos a sus respectivos hogares, con el problema de que algunos eran de diferentes reinos.
Paso alrededor de media hora hasta que todos los que estaban en la sala se retiraron, y en ese momento me habló Raquel y yo dejé el libro en su lugar. Caminé hasta el frente y me senté frente a ella.
Raquel: "Voy al grano. Me enviaron desde la capital para llevarte y escoltarte al palacio real, pero primero necesito toda la información posible"
Yo: "Claro. ¿Qué pasó?"
Raquel: "Se que participaste en el asalto de ayer contra un campamento esclavista de Quirce. Tengo ya un informe completo, y varios testigos dicen que Quirce estaba ahí en ese momento, pero nadie es capaz de decirme algo más"
Yo: "Déjeme adivinar ¿Quiere saber lo que yo sé?"
Raquel: "Sí. Exactamente quiero saber cómo encontraron el lugar y el posible paradero de Quirce"
Yo: "Para empezar, fue un chico que escapó el que me guío hasta el campamento. Lo protegimos y ahora debería estar en un hospital de campaña"
Raquel: "¿Y Quirce?"
Yo: "Ni siquiera sé quién es"
Raquel: "Dame un momento" *buscando un papel en su escritorio desordenado "Él es Quirce"
Mire la hoja de búsqueda y vi a Quirce. Cabello negro y con un rostro inocente, al igual que el líder del campamento. Sin duda son los mismos.
Raquel: "Y bien ¿Lo viste ayer?"
Yo: "Intercambie palabras con él"
Raquel: "Esto es serio, no hagas bromas"
Yo: "Siempre acompañado de tres guardaespaldas y porta dos cuchillos, uno en cada hombro, y habla de una forma tan tranquila que no parece alguien agresivo"
Raquel: "¿Enserio hablaste con él?"
Yo: "Lo conocí un día antes del asalto, y sabía que era quien dirigía el campamento, pero no sabía que fuera el líder del toda la operación"
Raquel: "¿¡Y por qué no lo atrapaste!?"
Yo: "¿¡Y yo qué iba a saber!? Además, si lo atacaba todos sus guardias me matarían"
Raquel: "Mataste ogros por montones aquella noche, y no podías contra él"
Yo: "Una cosa es defenderse por un solo lado, y otra es estar rodeado totalmente de enemigos. Y aunque solamente fuéramos nosotros dos, él tiene un gran poder. No pudimos evitar que escapara"
Raquel: "Espera, ¿Sabes a dónde escapó?"
Yo: "Se por donde se fue, pero necesito un mapa"
Raquel: "¡Márcalo!" dijo después de darle vuelta al mapa de su escritorio.
Yo empecé a buscar el lugar del campamento y lo señale con el dedo.
Yo: "Estábamos aquí y escapó en esta dirección"
Raquel: "¿Seguro?"
Yo: "Seguro"
Raquel: "¡Zari!"
En ese instante entró una soldado del reino.
Guardia: "Tenemos nueva información. Raquel: "Quirce no se está alejando de la muralla, según parece escapó en dirección a la muralla norte"
Guardia: "Entendido. Comunicaré la información al capitán de búsqueda"
La soldado salió de la sala y únicamente nos quedamos Raquel y yo en la sala.
Raquel: "Espero que no estés equivocado" dijo más calmada.
Yo: "Yo espero lo mismo"
Raquel: "Volviendo al punto principal. Archer, guerrero de verde, el rey Hal ha pedido tener una audiencia con usted en el Castillo real"
Yo: "¿El rey?"
Raquel: "Así es, por lo que el día de hoy nos moveremos a la capital del reino de Valmidia para prepararlo a usted y a sus acompañantes"
Yo: "¿No crees que es muy pronto?"
Raquel: "Mejor que sobre tiempo a que falte, y Mauro se encargará personalmente de traer a tus amigas"
Yo: "Quisiera ver cómo le va. ¿Y sobre los hermanos elfos que me acompañaban?"
Raquel: "Esos dos. Gracias por recordármelo. Tenemos un problema con la hermana mayor, y tal vez puedas ayudar"
Yo: "¿Qué paso?"
Raquel: "En un principio se pensaba enviarlos en el transporte a Liet, pero el chico seguía en observación y la hermana no pensaba dejarlo. Se entendía, por lo que permitimos que tomarán el siguiente transporte, sin embargo, una vez el chico salió de observación, la mujer se negó a irse y por el caos no logramos que subieran al segundo convoy. No hay suficientes transportes ni aventureros para crear un cuarto convoy, por lo que serán arrestados si no toman este tercer convoy"
Yo: "¿Y por qué se niega a irse?"
Raquel: "Dicen que no piensan abandonar a una hermana, pero solo son ellos dos"
Yo: "Se de que hablan"
Raquel: "Bueno, entonces ayúdame antes de que la situación empeore"
Ella camino hasta la puerta y ambos salimos de la sala. El caos aún reinaba en este sitio, y ahora había más gente que antes en el patio, al igual que carruajes y caballos, aunque ya no estaba el dragón.
Llegamos al lugar y ya había varios guardias rodeando a Erika, quien estaba sometida por dos guardias y por Einar, tratando de calmarla.
Einar: "Archer, gracias por llegar. Necesitamos tu ayuda"
Yo: "¿Qué es lo que está pasando?"
Einar: "Erika no quiere irse y se puso violenta"
Yo: "Entonces debo convencerla para que puedan irse"
Einar: "¡No! Debes convencer a los guardias para que nos quedemos"
Yo: "¿Qué?"
Raquel: "Eso no será posible" *firme* "Tu hermana es soldado de Liet, y no debo explicar la situación entre nuestras naciones, ¿o sí?"
Einar: "Pero..."
Einar se veía molesto e impotente, pues no podía hacer nada en esa situación.
Erika: "Hombre de prendas verdes, te lo imploro" dijo en el piso con su rostro en alto "Ayúdanos a encontrar a nuestra hermana. Es la única condición que pido para regresar a Liet"
Raquel: "La guardia se encargará de encontrar a tú hermana y regresarla, ahora deben irse si no quieren ser encarcelados"
Raquel dio la orden y los guardias comenzaron a someterla. Ella dio un fuerte grito de desesperación y Einar se acercó a ella. Yo no podía hacer nada al respecto, no tenía voz ni voto en este asunto, y tampoco podía ceder ante mis impulsos.
Erika: "¡ARCHER! ¡Yo, Erika, aceptó mi destino como tu esclava! Cumpliré tus deseos y caprichos sin queja alguna, seguiré tus órdenes sin negarme, y de ser necesario puedes usarme como escudo en tus batallas. Por favor, trátame como a tu esclava"
Ella se lanzó al piso y se arrodilló en frente de mí. Todo el lugar se había llenado de un silencio incómodo. Los soldados, los aventureros, los transportistas, y yo nos quedamos viendo la escena totalmente confundidos y desorientados.
Soldado 1: "¿Qué fue eso?"
Soldado 2: "¿Un juramento?"
Aventurero 1: "¿Juramento de esclavo?"
Transportista 1: "¿Existe eso?"
Soldado 3: *se encoge de hombros*
Raquel: "Escúchame. Ambas sabemos que el esclavismo no sirve de esa manera, así que déjate de trucos y..."
Erika: "¡Archer me compró por 75 monedas de plata, así que legalmente soy de su propiedad!"
Todo el mundo fijo su vista en mí, y yo instintivamente di un paso atrás. Raquel se dio la vuelta y me vio con unos ojos penetrantes y llenos de furia. Ella estaba más que enojada.
Raquel: "Archer, dime que eso es mentira"
Ella dio tres pasos y me apretó el hombro fuertemente, y su rostro estaba a unos 20 cm del mío.
Yo: "Podría decir que si para complacerte pero..."
Raquel: *me da un rodillazo en el estómago* "No digas bromas, ¿Compraste a esta elfa por 75 monedas a uno de los criminales más buscados?"
Yo: "Así fue como la libere" *levantándome*
Ella trató de darme un golpe en la cara, pero yo me deslicé hacia atrás y choqué con unas personas. El puño de ella se quedó estático en el aire, y varios de los presentes (especialmente guardias) empezaron a echar leña al fuego con el clásico "Ohhh"
Los sujetos detrás de mí me empujaron y quedé enfrente de Raquel, quien no tardó nada en tomarme de la playera.
Raquel: "Si sabes lo que es bueno para ti, dejaras a esta elfa y..."
Erika: "¡No! No dejes que nos lleven"
Raquel: "No está a discusión"
Erika: "Y yo no pienso retractarse"
Erika camino y me jalo de las manos de Raquel. Se puso entre los dos y luego se preparó para dar el primer golpe con una piedra que tenía entre las manos. Raquel, por su lado, se preparó para atacar, y estaba lista para desenfundar su espada en cualquier momento.
???: "¿Qué es todo este caos?"
Una voz fuerte y gruesa resonó por el patio, y de entre la multitud salió un hombre alto con la armadura de la guardia, y a diferencia de los soldados, este era un comandante.
Raquel: "Un pequeño problema con una esclava, nada grave"
Comandante: "Pues se volvió un problema grande" *mirándome* "¿Tú la compraste?"
Yo: "Si, señor"
Comandante: "Tu esclavo, tu problema. Fin de la discusión. Ahora, todos a sus labores"
Haciendo una señal de dispersión, el comandante logró desarmar al grupo de espectadores que observaban este espectáculo, aunque el resultado no le agrado a Raquel.
Raquel: "Pero señor, no podemos dejarla suelta"
comandante: "No está suelta, está bajo el control del héroe"
Raquel: "Pero..."
Comandante: "Si no tienes la suficiente confianza puedes ordenar que les realicen un comando"
Raquel: "Pero..."
Comandante: "Raquel, no tenemos lujo de tiempo. Un criminal se está escapando de nuestras manos, tenemos que mover gente a cuatro lugares diferentes, y los aventureros y transportistas no pueden esperar más. ¿Entiendes?"
Raquel: "Si señor"
Comandante: "Bien"
El hombre se fue con sus escoltas y ya sólo quedábamos Raquel, Erika, Einar y yo. Ella estaba molesta, pero al mismo tiempo se veía derrotada, su actitud explosiva había desaparecido y no era capaz de contradecir a su superior. El resultado fue una victoria para Erika, aunque no significaba que saliera ilesa.
Raquel: "Soldado, trae a un mago de las barracas, dile que necesitamos un comando de obediencia"
Soldado: "Entendido capitana"
El guardia se fue a toda prisa y Raquel se dio la vuelta para verme directo a los ojos.
Raquel: "Ahora ya estas feliz, ¿verdad?"
Erika: "No voy a aceptar el comando"
Raquel: "Solo permanecerán con Archer con el comando, en caso contrario serán arrestados. No está a discusión"
Erika: "Tsk"
Yo: "Creo que mi definición de comando no es la misma que la suya. Podrían explicarme"
Ambas me miraron con un poco de enojo y yo decidí dar un paso atrás, era obvio que no querían contestar. Esperamos unos minutos y el guardia había regresado con otro soldado que tenía un báculo de madera en lugar de espada.
Mago: "¿A quién le pondremos el comando?"
Raquel: "A la elfo"
Mago: "¿Y quién será controlador?"
Raquel: "El hombre de verde"
Mago: *me mira extrañado* "Ok, no soy quién para criticar. Por aquí tengo el amuleto que..."
Raquel: "Será por sello mágico"
Mago: "¿Enserio? Tengo la obligación de decirle que..."
Raquel: "Esta todo controlado, no habrá problema"
Mago: "Ok, pero no me responsabilizó de las acciones futuras"
Yo: "¿Qué es lo que puede pasar?"
Mago: "Tu toma de este frasco y en un momento te atiendo"
El soldado me entregó la botella de cristal con liquido azul y luego fue con Erika. Mire la botella y sin pensarlo me tome todo el líquido de un trago pensando que sabría a medicina, pero tenía cierto sabor a uva.
Por su parte, el mago había preparado un amuleto y estaba conjurando unas palabras. Al mismo tiempo, el amuleto emitía un brillo rosa-morado que ganaba intensidad, y algo en el pecho de Erika también brilla del mismo tono. Era una clase de tatuaje en forma de alas con trazos ligeramente curvos y ángulos cerrados, como una firma. El amuleto dejó de brillar y también el tatuaje de Erika, quien parecía agotada y fue salvada por Einar antes de caer.
Mago: "¿Botella terminada?"
Yo: "Sí"
Mago: "Estupendo. Sentirás una carga de energía en la sangre y luego te sentirás débil por unos minutos"
Sin más palabras, el tipo tomó mi mano izquierda y le coloco el frío talismán encima de ella. Procedió a pronunciar palabras místicas y el amuleto comenzó a brillar de color rosa-morado. En ese momento sentí la descarga eléctrica que había mencionado provenir del amuleto, y con ella una descarga de energía en mi cuerpo. Solo fueron cinco segundos, pero fue suficiente tiempo para debilitar e y hacerme tambalear. El mago retiro el amuleto y vi un tatuaje similar al de Erika en mi mano.
Mago: "Trabajo terminado, les deseo bonito día"
El soldado se fue por el mismo camino por él había llegado y a los segundos desapareció entre la gente.
Yo me quedé viendo la marca morada en mi mano y de pura curiosidad comencé a agitarla esperando que pasara cualquier cosa.
Mauro: "Buenos días a todos. Llegamos"
Kamelia: "¡Archer!"
Kami corrió hacia mí y me abrazo. Yo procedí a acariciar sus orejas de gatos y eso le gustó a ella.
Raquel: "Ya que estamos todos, prepárense para partir, el carruaje saldrá cuando de la orden"
Dio media vuelta y se alejó de nosotros. Nos quedamos un rato congelados viéndola, y luego regresamos a los saludos. Ella volverá para decirnos que todo está listo, ¿verdad?