TOY [BTS] +18

08

28/08

La pelirroja había logrado salir de los problemas hace un año, podía hacerlo con facilidad gracias a los contactos que tenía en varios lugares pero ahora, simplemente ya no puede reparar los errores que hizo sin ser intencionales.

Un golpe cae en la mejilla de la pelirroja, que está atadada de manos y pies mientras está sentada en una silla de madera, un par de hombres llena el pequeño lugar y otro, más grande pero delgado se posa enfrente de ella.

—Preciosa, no hagamos esto más difícil ¿sí? —Sun mantiene la mirada baja, no quiere verlo— Se educada y mírame cuando te hablo —toma de su cabello y lo jala hacía atrás, haciendo que lo mire. Su labio está partidor y su ojo está morado por los golpes que recibió anteriormente— No me gusta que estés en esta situación, querida Sunnie, pero no me dejas opción, quiero lo que me pertenece.

—Ya te dije que yo no tengo lo que buscas —recibe otro golpe, ahora en su abdomen y grita de dolor.

—Mentirosa —se aparta un poco de ella y se dirige a sus hombres— Denle una paliza y déjenla en la calle de su casa, lejos de aquí —y antes de marcharse se dirige a ella sin voltearse a verla— Tu tiempo se acaba, Lim, y en menos d elo que crees estarás arruinada, tu hermana y su bebé estarán en peligro al igual que ellos —la pelirroja lo mira con furia mientras aprieta sus puños.

Sin más se va, dejando a los tres en aquella habitación con poca luz, y de a poco los hombres se acercan a la chica para seguir con más golpes, dejando débil e inconsciente a la chica.

[...]

Con los chicos

—¿Seguros que está en casa? parece no haber nadie —el menor del grupo le pregunta a sus mayores, mirándolos uno por uno.

—Algunas luces están prendidas, así que supongo —habla el rubio Jung, quien no deja de tocar cada ciertos segundos el timbre.

Hoseok, Jungkook, Jin, Namjoon y Yoongi habían llegado a casa de las hermanas Lim hace unos segundos para decirle algo importante, pero al parecer nadie abre la puerta.

—Creo que no hay nadie —comenta el rubio después de unos minutos.

—No me digas, genio —suelta con burla Min— Estamos aquí por más de 10 minutos tocando la puerta, creo que es obvio.

—Perdón, Min, no soy adivino como para saber si están o no —pelea el rubio con el pelirosa, armando una pequeña batalla entre ambos.

—Dejen de discutir y comportense como adultos, que ya son —exige Namjoon, el dolor de cabeza hace que esté irritado— Le dejaré la invitación debajo de la puerta.

Hace lo que dice y sin más se pone recto de nuevo.

—Bien, vámonos.

Al volver a subir al carro, ya todos con el cinturón puesto y el carro encendido, Jin da indicios de arrancar camino, pero una camioneta negra se para a mitad de la calle, a unos metros de ellos, e impide que empiece a conducir. Antes de articular palabra alguna, de la camioneta negra es arrojado una cosa inmóvil e impacta al suelo con dureza, el automóvil arranca y se va del lugar rápidamente, dejando en shock a todos.

—¿V-vieron lo que yo? —el rubio tartamudea por la impresión, todos ven la cosa que fue tirada a la mitad de la calle.

—Santo cielo ¿acaso es un cuerpo? —Namjoon desabrocha el cinturón y baja del carro, al igual que todo y a paso lento se acercan a la cosa.