La vida de Jeon Jungkook parecía estar marchando con normalidad, asistía a la preparatoria, tenía un hogar, familia, amigos. Una vida cómoda.
Pero todo cambia un 23 de marzo. Aquel día hubo un gran accidente en las instalaciones norteamericanas del...
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Esta noche definitivamente a sido la peor de mi vida. Jamás llegué a imaginar que vería a mi madre morir frente a mis ojos, siempre pensé que podría cuidar de ella cuando fuera mayor. creí que íbamos a conocer muchos países y lugares juntos. yo jamas imagine que una horrible criatura me quitaría a una de las personas que más amo en el mundo.
Aun no podía asimilarlo. Quería despertar de esta horrible pesadilla. Quería mi vida de vuelta, necesito ver a mi mamá bien, deseo escuchar su voz dándome los buenos días. Yo la necesito más de lo que creí.
La luz comenzó a colarse por una pequeña ventana avisando que ya había amanecido. Giré mi rostro a un lado y observé la cama donde se encontraba el cuerpo sin vida de mi mamá. Este estaba cubierto por una sábana la cual se había manchado de sangre.
Mordi mi lengua con fuerza y volví a ver al techo. No soporto estar aquí más tiempo, necesito irme. Me levanté de la cama con rapidez y camine hasta el baño, mi padre y mi hermano me miraron unos segundos y luego se levantaron también.
Ninguno de los tres pudo dormir, estuvimos en silencio toda la noche observando a Mamá. Llorando y rogando para que esto acabará, pidiendo que ella regresará. Por desgracia eso no sirvió de nada.
Al estar dentro del baño subí mi pierna al inodoro y comencé a revisar mi vendaje. Mi hermano lo cambió hace media hora, al parecer no fue tan grave la herida.
Baje mi pierna despacio y me mire en el espejo. Estaba hecho un completo desastre, grandes ojeras adornaban mi rostro, tenía un moretón en la mejilla ya que al caerme ayer me golpeé. También tenía un par de manchas de sangre y aún estaban húmedas mis mejillas por tanto llorar.
Solte un suspiro entrecortado y comencé a lavar mi rostro. Mi madre siempre me decía que debemos estar bien presentados. Sin importa qué no vayamos a salir, siempre debemos vernos bien, no para complacer a otra persona si no para consentirnos a nosotros mismos.
Cepille mis dientes con parsimonia y al acabar me quite toda la ropa y entre a la ducha. La buena noticia es que aún hay gas y puedo disfrutar de una ducha caliente.
Pasados 5 minutos salí y seque mi cuerpo con cuidado. Me puse la bata y camine fuera del baño. Busque en mi maleta ropa que me permitiera moverme con facilidad y luego regrese para poder vestirme. Al terminar abrí la puerta y mire a mi padre.
Él no había dicho nada desde que mi mami se fue, parece que está en shock aún. Lo entiendo, nisiquiera yo puedo creer que estemos pasando por toda esta mierda.
Respire profundamente y mire a las niñas. Ellas estaban acurrucadas en una de las camas. No entendían que estaba pasando, ninguna sabia que le había pasado a nuestra madre. Como desearía poder regresar el tiempo y haberla detenido, debi subir yo.
Limpié con rapidez un par de lagrimas que amenazaban con salir de mis ojos, respiré lo más profundo que pude y mordi mi labio inferior con algo de fuerza.
