Innocent

Diez

La chica estaba ahí. Enviarla de regreso no era una opción que considerar dadas las circunstancias, de manera que Whis se vio obligado a presentarla formalmente a Goku, Bulma y compañía.

-Ella es Malta y es una invitada ilustre del señor Bills- les dijo el ángel -Ella proviene de un planeta muy lejano y prácticamente vacío, así que todo lo que ve es nuevo para ella. Sean amables por favor- agregó e inclinó la cabeza respetuosamente.

Malta no entendió porque el señor Whis dijo todo eso, pero imitó su gesto final porque pensó que era necesario. De reojo vio al señor Bills, él no hizo reverencia y aquello la dejó pensando un poco. Desde la perspectiva de Malta, era el señor Whis quien estaba a cargo. Era él quién daba las órdenes.

La primera en acercarse fue Bulma, quién le dió la bienvenida a la fiesta. A ella la siguieron Milk y las demás mujeres que se mostraron muy afables con ella. Malta las oía y miraba con interés. Era la primera vez que estaba ante otras criaturas femeninas por lo que no podía dejar de apreciar su similitud con ellas. Las voces claras, los cuerpos sinuosos, el suave olor que desprendian. Tan familares y diferentes a la vez, le resultaban a Malta. Un poco tímida se dejó conducir por ellas un rato.

La muchacha no lo advirtió, pero muchos de los hombres presentes en esa fiesta pusieron su atención en ella. Vegeta, Piccolo, Goku e incluso los más jóvenes, Trunks y Goten, experimentaron una fuerte incomodidad con la presencia de Malta. No era la sensación que solían tener ante otro individuo poderoso, se parecía más a lo que sentiría un perro ante un lobo. Una sensación de peligro inminente que los obligó a estar a alerta, sin embargo, ninguno intentó indagar inmediatamente. Pasaron varios minutos antes de que Goku se acercara a la mesa en que se ubicaron Whis y su señor para preguntar, al que era su maestro, si también la había estado entrenando.

-Se nota lo fuerte que es- añadió el Saiyajin sin quitar los ojos de la muchacha, que hablaba con Milk y Videl, en una mesa más allá.

-Sí, también me ocupo de su entrenamiento- contestó el ángel- Y no te equivocas al hacer esa afirmación. Malta es capaz de pelear a la par con el dios de la destrucción a tu lado.

-¿Qué? ¿Es eso cierto, señor Bills? Me...

-¡Más te vale que no la molestes!- le gritó Bills después de tragar la carne que se echo a la boca- Esa chica es alguien muy importante. No imaginas la cantidad de problemas en lo que te puedes meter si llegas a ocasionarle un problema.

-Pero si sólo quería...

-¡Te digo que no la molestes!-lo interrumpió Bills y continúo con sus advertencias a Goku.

-¿Quién es exactamente esa chica?- preguntó Vegeta tras acercarse discretamente a Whis, después de estar observando a Malta un rato.

-¿A caso no escuchaste?- exclamó Bills- Es una invitada mía. Ya dejen de molestar- añadió mientras medio estrangulaba a Goku con los brazos.

-Así es. Basta con que sepan que es una persona muy importante para nosotros- añadió Whis.

-¿Es alguna clase de pariente tuya?- le preguntó Bulma que había regresado hacia el dios y el ángel en busca de información- Se parece un poco a tí...¿No será una hija o algo así?- preguntó con un tono pícaro.

-Pero que ocurrencias tiene. Desde luego que no es mi hija. Aunque en cierta forma podría decir que es un pariente lejano- contestó Whis-Debido a desfavorable circunstancias, Malta estuvo viviendo en un sitio muy solitario. Esta experiencia puede ser un poco abrumadora para ella, le pido que sea paciente señora Bulma.

-Eso explica ese carácter tan inocente. Me recuerda un poco a Goku, cuando lo conocí- comentó la mujer con cierta inquietud.

-¿Lo dices en serio?- le consultó el mencionado y ambos empezaron a charlar respecto a esos tiempos.