Capítulo 11

474 12 0
                                    

Abrí la ventanilla de el auto para que me entrara aire porque no podía más de calor.
Tiago iba manejando sin decir nada así que ibamos en un cilencio medio incomodo.
Tiago:¿y por cuanto tiempo vinieron?
Mia:una semana, ¿por? ¿Querés que me valla?
El sonrió.
Tiago:al contrario, una semana me parece poco.
No se por que pero su comentario me hizo sonreír.
Cuando llegamos a la casa el estaciono y nos bajamos.
Cuando entramos me sorprendí de que la casa estuviera tan limpia.
Para ser que vivian cuatro hombres solos estaba bastante bien.
Deje mi cartera en el sillón y me senté.
Tiago:¿tenes hambre?
Lo mire y casi suelto una risa.
Mia:son las dos de la mañana.
Tiago:¿y? ¿Quien dijo que no se puede comer de madrugada?
Abrió la heladera y vi que sacó un taper de helado. Me encantaba el helado pero no me emocione mucho porque la mayoría de las veces en un taper de helado en vez de encontrar helado encontras guiso. Pero cuando lo abrió vi que si era helado y ahí si me emocioné.
Agarro dos cucharas y las puso adentro de el taper. Me dijo que lo siguiera y empezo a caminar por los pasillos.
En el pasillo habian tres cuartos a lo largo y en el final de el pasillp habia otra puerta que supuse que era el baño.
Abrio la puerta y entramos a lo que supuse que era su cuarto.
Otra vez me sorprendí porque su cuarto tambien estaba muy bien ordenado y limpio.
Me senté en su cama y el fue a buscar algo a su mesita de noche.
Volvió con un control en la mano, prendió la television y fue a youtube y puso una lista de reproducción de sus canciones.
Mia:¿quien te dijo que yo quiero escuchar tus canciones?
El me miró, por su cara creo que se lo creyó, aparte agarró el control y estuvo a punto de cambiar la cancion pero lo pare.
Mia:era broma bobo.
Es se rió. Abrió el helado y me dio una cuchara. Empezamos a comer helado mientras escuchábamos sus canciones y hablabamos de la vida.
De a ratos soltaba unas carcajadas porque el me contaba cosas graciosas que le habían pasado con los chicos.
De repente me dio curiosidad preguntarle por su familia y lo pensé un rato pero al final le pregunté.
Mia:¿y... Tu familia donde vive?
El me miro en seguida.
Tiago:mi hermana y mi madre viven en una casa en Monte Grande.
Asentí con la cabeza.
Tiago:¿sabes cual es mi mayor inspiracion en la música?
Lo mire a los ojos.
Mia:¿cual?
Tiago:ellas.
No supe que decir, me quede callada esperando que dijera algo más y por suerte lo hizo.
Tiago:cuando recien empeze... Era muy dificil, no era tan facil hacerse conocido y pegarse en el mundo de la musica era muy difícil, había dias que me frustraba un monton y me quería hechar para atras pero las veía a mi mana y a mi hermanita y era como un impulso para seguir, porque quería verlas mejor, ahora que estoy en un buen momento, que soy conocido, que estoy ganando bastante guita en lo unico que pienso es en terminarle la casa a mi mamá, que es el sueño que tuvo siempre, tener una casa propia.
Todo lo que me dijo me dejó en blanco.
No sabía que decirle, me parecía muy tierno lo que estaba diciendo, y me parecía a la vez tan raro que se abriera así con migo.
Mia:es muy lindo todo lo que decís Tiago.
El sonrió y me miro.
Pero no me miro los ojos. No no no.
Me miró los labios ¡los labios!
Se empezó a acercar a mi y en ese momento supe lo que iba a pasar.
El me plantó un beso en los labios, tuve la intención de alejarme pero no pude, era como si mi mente me dijera que me alejara pero mi cuerpo no se quería mover.
En un momento entre besos agarró el taper de helado y me lo saco para tirarlo al piso.
El me agarro de la cintura para acercarme más.
Yo estiré la mano hasta su cabeza y le acaricié el pelo. No se como hizo pero me tumbo en la cama y no se por que me salió una carcajada.

Ademas de miDonde viven las historias. Descúbrelo ahora