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Al final los tres nos quedamos en la habitación con ellos sin matarnos. Lucius e Ivy estaban sobre la única cama que había en la habitación, uno de cada lado. Edric cuidaba de su hermano y yo de Ivy

-¿Por qué eligieron a mi hermano? –me miró -¿Cómo encontraste a Ivy?

Me quede en silencio un momento.

-Yo encontré a Ivy, hace 5 meses

-¿Llevan vigilando a mi hermano desde hace 5 meses?

-No –lo miré –Ivy supo encontrarlo de inmediato

-Entonces ¿Por qué tardaste demasiado en encontrarla a ella?

-Bueno...

Hace 5 meses

Cuando abrí los ojos lo primero que vi fueron los árboles, el bosque, escuché a las aves, sentí el viento en mi rostro. No parecía que estuviera en la dimensión más avanzada de esta línea, pero, cuando miré hacia abajo, un piso de algún material extraño hacia un camino, un camino lizo, duro y rasposo.

Miré a ambos lados de ese camino y tomé una decisión. Seguir caminando hacia adelante. No sé qué tan lejos de algún pueblo me encuentre, pero, no tengo otra opción que seguir caminando.

Después de un tiempo, llegué.

No era lo que esperaba, no era como la Jefa Luna había descrito a la ciudad de Tsogolo.

Las personas vestían diferente, había edificios muy altos, cosas que se movían en 4 llantas velozmente, todo estaba cubierto del mismo material duro, lizo y rasposo que lleco siguiendo todo este tiempo.

Hay mucho ruido, dibujos gigantes que cambian de imagen constantemente, personas sosteniendo un objeto contra su oreja y su mano mientras hablan solos, incluso lo miran fijamente mientras camina. Otros llevan los oídos cubiertos por cosas redondas de colores.

Esta es la dimensión número 1 de mi línea, la dimensión Zitatu.

Ahora, lo que tengo que hacer es encontrar a la persona correcta para llevarla conmigo.

Día 1 y lo que hice fue caminar por todos lados, mirándolo todo. Cada cosa, cada persona era nuevo, extraño y curioso para mí, era fascinante poder ver con mis propios ojos la todas las dimensiones de mi línea.

Otra cosa que tenía que hacer era conocer a las personas, saber cómo se comportan para saber cómo poderme acercar a ellos, después, tendría que encontrar una manera de atraerlo hasta el bosque para llevarlo conmigo.

No tenía dinero, así que, por días, tuve que regresar al bosque, en la mochila que llevaba conmigo llevaba dentro dos mantas para crearme una cama, ropa, un poco de comida y algunas otras cosas que pudieran ayudarme en mi viaje, así que por las noches dormía en el bosque, por días comí lo que llevaba conmigo hasta que se terminó y tuve que robar comida de las tiendas. Me bañaba las veces que llovió y almacenaba agua de recipientes que encontraba en la ciudad y traía conmigo. 

Después de una semana yendo todos los días a la ciudad, tratando de acostumbrarme a como las personas actuaban en este mundo comencé a seguir a algunos candidatos que pensé serían buena opción.

Casi todos mis candidatos eran hombres estudiantes, jóvenes y agiles, necesito a alguien que pueda correr en caso de necesitarlo.

Mientras esperaba afuera de un edificio al chico que era uno de mis candidatos, me senté en una banca para descansar un poco y comer las galletas que había robado de una tienda en la mañana.

Mientras esperaba un grupo de chicas, 4 chicas, caminaban una junto a la otra sonriendo y bromeando, pero de la nada un grupo de personas caminando raro, arrastrando los pies, con ropas rotas y manchadas de sangre caminaban apresuradas hacia ellas.

Parecían peligroso, no parecían ser normales, no había visto nada como eso desde que llegue aquí y ciertamente, su apariencia, sus caras, era como si estuvieran muertos, tenían sangre en la cara y parcia que la piel se les estaba cayendo.

Guardé mis galletas en mi bolsillo y me levanté de la banca, si esas cosas comenzaban a atacar, tendría que salir corriendo.

Uno de ellos, aceleró el paso y tomó del hombro a una de las chicas mientras gritaba horriblemente. La chica gritó y se dio la vuelta rápidamente golpeándolo con su puño en la cara mientras las otras solo gritaban.

-¡Aw!

El ser se llevó la mano a la cara mientras se doblaba un poco del dolor.

-¡Lo siento! –se disculpó la chica de inmediato

Al parecer, nadie a los alrededores se veían o se sentían amenazados por estos seres, así que tampoco me precipite en salir corriendo, al contrario, me quede mirando la situación.

-¡No era para que me golpearas! –se quejó el ser, parecía ser masculino 

-Lo siento, sabes que no me gusta que me sorprendan de esa manera

-No, no lo sabía, dios, me está sangrando la nariz

Levantó su cabeza mientras otras de las chicas le entregaban un papel que puso en su nariz.

-¿Qué hacen disfrazados de zombis? –preguntó la chica que le dio el golpe

-Estamos promocionando la casa del terror –contestó otro de los seres

-Pero es hasta el fin de semana –contestó otra chica

-Sí, pero, los del departamento de ingeniería industrial están haciendo otra casa del terror, no podemos dejar que nos ganen

No entendía la situación, ni porque ellas no corrían de esos seres tan horribles, pero, lo que sí entendía, era que esa chica que le dio un puñetazo, era un buen prospecto para el puesto de 1° hija.

Ignoré al chico que había estado esperando y la seguí a ella.

Desde ese momento comenzó todos.

Conforme la seguía y la escuchaba hablar con sus amigas, conforme la observaba me sentía más y más atraído por ella, era una persona fascinante. Incluso me atreví a entrar a su cada cuando ella no estaba y las cosas que encontré, los adornos, los libros, las imágenes que aquí llaman fotos de ella con las personas que forman parte de su vida, fueron atrayéndome cada vez más.

No cruce ni una sola palabra con ella, pero no lo necesite para terminar enamorándome de ella. 

Y eso fue lo que le conté a Edrci, le conté el modo en que me gusta escucharla reí, o escucharla cuando habla, el simple hecho de mirarla, es satisfactorio, encantador, atrapante y relajante para mí. Tenerla a mi lado.


Los hijos de la línea 26 (ParkJimin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora