𝐁𝐔𝐋𝐋𝐄𝐓 - 𝐉𝐉𝐊 © (Completa)

29

Su vista tardó unos segundos en enfocar a la persona que se inclinaba 

frente a él. Se sentía muy pesado y asqueado cómo para continuar en la posición en la que se encontraba, necesitaba acostarse o vomitar de inmediato.

Sus ojos se volvieron a cerrar por el malestar.

Sangtae ignoró como la pálida piel y casi traslucida de Jungkook se tornaba en algunos tonos enfermizos y sostuvo con más fuerza su agarre para impedir que su rostro girara hacia otro lado.

— Tenía la pequeña esperanza que fuera un poco más entretenido. — dijo con una sonrisa marcada en un hoyuelo en su mejilla izquierda. — Es decepcionante.

Remojo sus labios y negó sin quitarle su mirada analítica de encima. Debía encontrar algo en él, necesitaba hacerlo.

— Al principio se enfurecio cuando mencionamos a Bullet. — acordó uno de ellos mientras servía un poco de alcohol barato en un vaso de cristal. — Lo hubiera visto jefe. Fue como gritarle al dueño de un perro frente al perro.

Entonces, en algo coincide con ella. Eran una bomba de tiempo.

— Imagina los rumores que se crearían si las imágenes de ellos dos juntos en la cabaña cayeran en manos equivocadas. — hablo en un tono bajo como si hablara solo. Sangtae dejó salir una leve risa. — Quién lo diría... Quién diría que Carter se involucraría con un tipo como él. Siempre tan seria y correcta. Totalmente irónico.

Parecía que conforme el tiempo avanzaba las piezas se movían a su favor. Finalmente el sol brillaba sobre él dejando atrás el frío invierno.

Los dedos de Jungkook sorprendieron a Sangtae al enroscarse en su muñeca con fuerza. Sus miradas finalmente conectaron, los ojos de Sangtae eran afilados y profundos, similares a los de Carter, mientras que los de Jungkook a pesar de que se caracterizaban por ser grandes y brillantes, en esta ocasión destacaron por sus párpados cansados y firmeza al sostenerle la mirada al mayor.

Deseaba ponerse de pie y molerlo a golpes.

— Creo que debería presentarme. — el rastro de burla en sus palabras no desaparecen. — Soy Eun Sangtae, aunque creo que ya me conoces.

Elevo un poco su mentón con aires de grandeza e importancia. Su nombre era muy conocido en Corea, lo sabía.

— No y me importa una mierda quien seas. — escupió sus palabras.

— Entonces eso compartes con esa pequeña bruja. — Afirmó su suposición y chasqueó su lengua mientras negaba con su cabeza, pero eso no desaparecía su mueca burlesca. — Si te interesará el motivo por el que estás aquí. De eso estoy seguro.

— No me interesa lo más mínimo. — respondió.

La prepotencia de las palabras de Jungkook empezaban a ser molestas de oír para los oídos irritables de Sangtae. Su mano volvió a sostener el rostro de Jungkook, pero ahora con más fuerza que la vez anterior.

— No sé para qué trato de ser cordial con un bastardo como tú. — masculló. — Sin embargo, necesito que abras la jodida boca y sueltes todo lo que quiero oir.

Jungkook solo parpadeo de manera lenta, como si lo retara a seguir hablando.

— La primera vez que vi tu rostro creí que solo fue casualidad, pero verte en la anunciación del compromiso de Carter. Mm... Verte en aquel lugar alertó un poco mis sentidos. — soltó el rostro de Jungkook con la fuerza suficiente como para que el pelinegro volviera a golpear la parte de atrás de su cabeza con la pared.

Jungkook no quería prestar atención a lo que decía, pero ¿Dónde lo vio antes del compromiso? Su gesticulación debía ser controlada para no delatar la oleada de emociones agobiantes que había dentro de él.