—¿De qué hablas? ¿ Por qué no irás? —preguntó el rubio muy preocupado.
Dylan suplicóa su jefe con la mirada, unos segundos de permiso por lo que este asintió con la cabeza con ternura. El chico tomó la mano de Thomas y lo llevó fuera, lejos del ruido urbano. Una vez solos, Dylan miró hacia el piso y comenzó a jugar con sus dedos muy nervioso sin saber qué responder.
—¿Qué pasa, Dylan? Habla, me estás asustando.
—Yo... no pude conseguir el dinero suficiente.
—¿Qué?
—Thomas, soy pobre —levantó la mirada y sus ojos conectaron—. Intenté trabajar para ganar dinero y poder viajar contigo, pero dos semanas no fueron bastas, lo siento.
Thomas permaneció unos cuantos segundos callado, era cierto, él le había invitado, mas nunca pensó en su situación y en cómo conseguiría el dinero el pobre muchacho, todo por pensar que, por el hecho de estar rodeado de gente rica, todo el mundo sería igual, sin embargo, no todo era color de rosa como la vida de Thomas. Al notar que Dylan soltó un sollozo y cubrió su rostro para que no lo viera llorar, supo que debía decir algo.
—Ya sé que de seguro arruiné tus planes, lo siento, mi maldita pobreza nunca permite que me divierta, lo lamento tanto.
—Ey —Thomas tomó sus muñecas y retiró lentamente las manos del rostro del muchacho, dejando al descubierto su rostro empapado en lágrimas—. Admiro mucho la responsabilidad que adquiriste frente a esto, fue mi culpa invitarte sin recordar tu situación, es que me caíste tan bien que ni siquiera lo recordé.
—Lo sé, Thomas, pero debí decírtelo antes, ahora tendrás que buscarte otro compañero.
—Yo no quiero otro compañero —le sonrió levemente—. Yo quiero ir contigo.
—Pero, ¿cómo?
—Yo... te pagaré el viaje.
Los ojos de Dylan se abrieron de par en par, ¿había escuchado bien? ¿Thomas sería capaz de tomar tal responsabilidad solo por él? Debía ser alguien tan especial para el rubio que llegaba a ese extremo. Por un segundo el castaño se sintió querido y valioso.
—¿Me-me pagarás? —preguntó sumamente avergonzado.
—Claro que sí, Dylan. En serio quiero que vayas, además, tómatelo como un agradecimiento por haberme salvado la vida días antes.
Los ojos del castaño se iluminaron y una enorme sonrisa se dibujó en su rostro, soltó un pequeño grito y corrió hacia el rubio para abrazarlo, Thomas levantó los brazos levemente, se sentía algo incómodo ya que nunca había recibido tal muestra de cariño de un hombre, menos de un amigo.
—¡Ay gracias, gracias, gracias, Thomas! ¡No sé cómo agradecerte!
—No es nada, tú tranquilo, solo quiero que la pasemos bien, ¿ok?
—¡Claro que sí! —ahora lo abrazó más fuerte.
—Ya, Dylan. Me vas a... romper los huesos.
—Ups, perdón —se retiró de ahí con timidez—. Entonces, ¿qué debo llevar?
—Cosas sencillas: ropa de playa, es decir ligera, protector solar obvio, traje de baño, chanclas y bueno tus artículos de limpieza y algo adicional que desees llevar, ¿tienes todo?
—Ammm... ¿mi ropa interior con agujeros cuenta como traje de baño?
Thomas soltó una risita.
—Diablos, supongo que alguien necesita ropa nueva.
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We're millionaires (Dylmas) / Precuela de Dos Tontos Y Un Bebé
FanfictionEsta es la historia de cómo nuestros padres favoritos se conocieron. Todo lo que pasó antes de que la pequeña Claudia llegara a sus vidas. La vida escolar, la homofobia, el bullying y los problemas familiares son de las varias cosas que tendrán que...