Sentí cómo un pequeño cuerpo se movía entre mis brazos, lo que provocó que abriera mis ojos, los cuales se cerraron de inmediato al sentir la luz del sol.
Automáticamente un cosquilleo en mi estómago me abrumó al ver a Thomas dormido a mi lado, su cabello estaba húmedo a causa del sudor, su brazo rodeaba mi cintura y su rostro reposaba sobre mi hombro. Maldita sea, era tan hermoso, tan tierno, tan frágil, podía abrazarlo y llenarlo de besos todo el tiempo. Sin embargo, eso era imposible, no me veía con Thomas en un futuro, ni siquiera sabía si era gay como yo, o por lo menos bisexual. Quizás solo podamos estar juntos en mis sueños.
Entré en pánico en cuanto vi los ojos de Thomas abrirse, no sabía si hacerme el dormido o burlarme de él por cómo se había comportado ayer bajo los efectos del alcohol para ahorrarme la incomodidad que esta situación generaría.
Al final no pude hacer más que mirarlo asustado con mis ojos muy abiertos, no podía mirarme a mí mismo, pero juraba que parecía un completo imbécil.
Cuando al parecer su vista se aclaró por completo, abrió muy grandes sus ojos y se separó de mí tan rápido que se cayó de la cama. De inmediato me acerqué al filo de la misma y lo miré desde arriba sin dejar de reír.
—¡Dylan! ¡¿Qué?! ¡¿Qué pasó?! ¡Agh! —se tomó las sientes con ambas manos—. ¿Por qué me duele la cabeza?
—Primero que nada, buenos días —dije cruzándome de brazos y él me tiró una almohada en la cara—. Uno: no hicimos nada, te advierto de antemano y dos: bebiste demasiado ayer y por eso te duele la cabeza.
—¿En serio hice eso? Guau y ni siquiera lo recuerdo.
—Ven a la cama a descansar —dije palmeando el colchón—. Si quieres te traigo una pastilla para el dolor de cabeza, anda —extendí mi mano hacia él, quien la tomó indeciso y la usó de ayuda para levantarse del suelo.
Tommy se recostó en la cama y me miró con una ligera mueca en su rostro, instintivamente acaricié su frente con delicadeza como si fuese un bebé.
—Me duele el estómago, Dios me siento tan mal —comentó agarrando su cabeza.
—Debe ser por el alcohol, pero no te preocupes, te traeré una pastilla también para eso.
Lo único que hizo como respuesta fue asentir inocentemente con su cabeza, así que lo cubrí con las cobijas y me incorporé para caminar afuera y buscar una pastilla para Thomas. Caminé por los pasillos y vi a lo lejos a Marshall con su cara de inocente, no dudé en dedicarle una mirada de odio, la cual llegó a incomodarlo, porque noté que bajó la mirada temeroso. No pude evitar reír ante eso, Marshall era rudo y malvado únicamente cuando su hermano estaba a su lado, lo cual lo convertía en un completo patético.
***
Entré sigilosamente al cuarto con todo lo necesitarlo y lo primero que vieron mis ojos fue la viva imagen de Thomas acurrucado en la cama, quien levantó su mirada y sonrió levemente al mirarme bajo el marco de la puerta. Nuevamente esa sensación tan mágica abatió mi cuerpo, amaba su sonrisa, pero me encantaba cuando sonreía por mí.
Procurando no tardar demasiado, preparé todo para que Thomas se recuperara: un té de anís muy calientito junto a un pan de sal. Caminé hacia su cama y le entregué las pastillas y luego la taza con el té, musitó levemente un "gracias" y miró con temor la pastilla.
—¿Qué pasa? —pregunté sentándome a su lado y mirando atentamente sus ojos.
—Me aterra tragar pastillas, es todo —entonces se la llevó a la boca e hizo un ademán muy gracioso para tragarla, luego hizo lo mismo con la otra.
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We're millionaires (Dylmas) / Precuela de Dos Tontos Y Un Bebé
FanfictionEsta es la historia de cómo nuestros padres favoritos se conocieron. Todo lo que pasó antes de que la pequeña Claudia llegara a sus vidas. La vida escolar, la homofobia, el bullying y los problemas familiares son de las varias cosas que tendrán que...