Donde Hanagaki Takemichi es un omega defectuoso que ama a otra omega llamada Tachibana Hinata. Y por salvarle la vida a ella, termina en las garras de la peor organización criminal de Japón: la Tokyo Manji, cuyo líder es Mikey.
O donde Sano Manjiro...
¡Hola! Sorpresa! Les dije que podía ser que esta semana les trajera un capítulo y aquí está (la semana siguiente no se lo esperen, sorry) gracias por su apoyo y paciencia! Aquí dejo dos fanarts bonitos que me hicieron! Muchísimas gracias, siempre me inspiran :')
Primero, la bipolaridad del omega interior de Takemichi en su máxima expresión jajaja:
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Y luego la escena de Sanzu en el capítulo anterior que nos rompió el corazón a todas/os :'(
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Ahora sí, sin más que que decir ¡a leer!
...
Cuando Takemichi sintió que su omega se durmió de repente en su inconsciente, inevitablemente bajó sus barreras mentales debido a la conmoción. Fue ese momento de debilidad el que su omega interior aprovechó para salir rápidamente a flote y tomar el control del cuerpo de Takemichi. Draken simplemente notó que el pelinegro quedó cabizbajo durante unos cuantos segundos y, luego de un minuto de silencio aproximadamente, levantó nuevamente su cabeza pero ésta vez su mirada había cambiado; era mucho más afilada y el color de sus ojos era de un azul oscuro que recordaba a las profundidades del océano.
—¿A dónde diablos se fue ese bastardo? y lo más importante, ¿por qué se fue?—preguntó con la voz un tanto más ronca que la de Takemichi. Draken tembló al ver los ojos afilados del menor, porque si las miradas mataran él ya estaría muerto.
—Se fue a pensar, al parecer su destino será Manila ya que allí hay un lugar muy importante para él... o mejor dicho era un lugar importante para Shinichiro, su difunto hermano mayor. —explicó Draken lentamente, dándole nueva información a Takemichi que antes no conocía: el nombre del hermano mayor de Mikey y la confirmación de que estaba muerto.
Esa información era algo que le interesaba a Takemichi, pero no a su omega interior. El lobo solamente estaba molesto por haber sido "abandonado" por su alfa y no le importaba una mierda la razón por la cual lo hizo, sólo deseaba desahogarse y golpear al idiota de Mikey por haberse ido así, sin avisar. Draken olió unas intensas feromonas salir del cuerpo del pelinegro, las cuales denotaban lo molesto que se encontraba en esos momentos y no pudo evitar marearse al olerlas. Un dominante es un dominante después de todo, independientemente de si es un alfa o un omega. En ese instante Draken recordó que estaba en presencia de un omega dominante.
