Capitulo 40. Es mi culpa

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-¿Que haces aquí Skrael?- dije enojada

-A mi también me da gusto verte de nuevo hermana- exclamó con una sonrisa de medio lado.

-Me encantaría poder decir lo mismo, pero no me nace- le dije molesta y le lancé un rayo para distraerlo. Levanté a Krel con mi magia e iba a crear un portal para salir de allí pero Skrael reacciono rápido y me impidió crearlo congelando la mitad de mi cuerpo, y con esa distracción por accidente tire a Krel al suelo

-Suelta me témpano de hielo- dijo molesta y forzando mi cuerpo para escapar, lo cual era inútil.

-Me alegra ver qué con el tiempo haz fortalecido tu carácter- dijo suavemente.

-No creo que vegas para hablar de mi carácter, ¿qué quieres?- dije enojada, mientras seguía forzado el hielo hasta que logre derretirlo y caí al piso.

-Me conoces bien mi linda flor de invierno- exclamó calmado mientras creaba una flecha de hielo y jugaba con ella -Pero primero necesito que te calmes- y me lanzó la flecha por instinto solo me cubrí la cara con mis brazos asustada esperando el golpe pero nunca llegó y cuando abrí los ojos la flecha se había derretido delante de mi y pude escuchar a Skrael riéndose

-De verdad olvidaste que no podemos hacernos daño mutuamente, flor de invierno, somos hermanos que compartimos la misma magia, tenemos un lazo-

-Entonces porque ibas hacerlo- dije mientras me levantaba del suelo

-Sabes como soy, solo te di un pequeño susto para que te calmaras y me dejaras hablar, pero antes- y apunto su báculo hacia Krel e hizo que desapareciera.

-¿Que le hiciste?- le grite molesta

-Lo mandé de nuevo a su casa, el hechizo está por acabarse y yo necesito hablar contigo a solas-

-Como se que no estás mintiendo- lo desafíe

-Sabes que cumplo mi palabra y espero que, aún tú sepas hacerlo y no se te allá pegado la mala constumbre que tienen los mortales, quiero pensar que aún recuerdas todo lo que te enseñamos en su tiempo-

Suspiré ya molesta, no quería seguir hablando con el sobre ese asunto para mi ya era un capítulo cerrado de mi vida así que hable para que dijera lo que tuviera que decir y se marchará

-Bien confiaré en ti. Ya no hay nadie, ya estoy calmada ahora sí dime ¿Que haces aquí Skrael?-

-Vengo a traerte una oferta, regresa a la Orden y no saldrás lastimada ayúdanos a recuperar el equilibrio hermana tal y como pensábamos hacerlo desde un principio- me explico

Escuchar eso me sorprendió mucho y cuando le iba a responder algo en mi mente hizo click, ya que un pequeño detalle no me cuadraba en sus palabras.

-¿Donde está Bellrock?- pregunté curiosa, se supone que, es el más alterado por nuestra huida, si ellos me querían devuelta porque no estaba aquí.

-El está ocupado- respondió Skrael sin más, pero yo conocía esa forma de evadir las preguntas que el siempre usaba cuando ocultaba detalles importantes y no iba a caer tan fácil.

-El no sabe que estás aquí ¿verdad?- sonreí triunfante al ver que su mirada cambio.

-Digamos que hay cosas que el no tiene porqué enterarse - me respondió serio

-Veo que hay cosas que apesar de los años nunca cambian- dije intrigada, el, Nari y yo nunca fuimos de los que hacíamos mucho caso a Bellrock, en especial Nari y yo siempre nos gustaba jugar en el bosque salvaje y eso provocaba siempre la ira de ambos, aunque a escondidas de nuestro hermano mayor Skrael se llegó a escapar también un par de veces con nosotras, cuando ambas lograbamos convencerlo -¿Y Nari?- le pregunté también -ella te envío o tampoco sabe que estás aquí-

Nos volveremos a encontrar Parte I "La Búsqueda" (Relatos De Arcadia)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora