La belleza de la imperfección

Esmeralda

"¡Sasuke! ¡Mínimo llévate algo de preocupación por cómo luces"

"Vamos, amor, mires por dónde mires, Sasuke siempre se ve bien. Es naturalmente guapo" le respondió Itachi tomando la pequeña tela que envuelve el bento de Sasuke.

Izumi dejó para sus pensamientos su comentario, pensaba que eso solo aplicaba para su amado, Itachi. Claramente él sí se veía bien sin esfuerzos y gran parte de ello complementaba su personalidad tan sencilla y amable.

"No voy a ningún lado en especial" respondió Sasuke y salió de la casa, con un ligero portafolio en mano, su comida para la tarde y de camisa con pantalones rectos negros.

Hacía algunas semanas que Sakura y Sasuke no se veían, al menos no para pasar el tiempo que desearían juntos. Sakura estaba entrando al último año en medicina, lo que significa que no pasa tiempo en el campus, sino en las prácticas en hospital y sólo va cuando algún documento es necesario. Mientras que Sasuke pasa la mitad del día en el aula de posgrado, arreglando sus papeles de titulación y acreditando sus últimas materias, a la par que se las arregla por llegar a su pasantía en una empresa de seguridad, siguiendo los pasos para ser consultor en el tema.

Evidentemente eso no difería de la situación de sus demás amistades, cada quien se acercaba a su propia meta y verse era cada día más difícil, además que las parejas tenían prioridad.
Sin embargo, cada que las estrechas rutinas les permitían coincidir en los tramos hacía sus actividades, Sasuke y Sakura caminaban juntos a la estación como en los viejos tiempos, algunas veces quedaban de verse en algún café de algún punto medio para desearse un buen inicio de jornada y, muchas veces, Sasuke después de un largo día entre la escuela y la empresa, pasaba por la calle del santuario para recoger a Sakura, para dejarla en su casa, algunas veces habían planeado que alguno de los dos se quedara a dormir en el lugar del otro, pero era prácticamente imposible, se harían el doble de tiempo yendo a sus deberes, o no les alcanzaría la vida para mínimo desayunar o empezar cómodamente su día. Entonces era más conflicto el estar juntos en un hogar no compartido.

•✿•
|POV Sasuke|

¿Por qué demonios se ríen tanto? Es molesto.
Asomé la mirada por sobre el sillón que me resguardaba, había escuchado que Itachi e Izumi se dirigían a la sala, estaba dispuesto a lanzarles una mirada de desaprobación.

"¿Pero qué... ?" Izumi palideció, e inmediatamente se le subió el color a la cara.

"Pervertidos" les solté con la ceja arqueada, tomando nuevamente mi lugar y abriendo los documentos que, tras firmarlos, confirmarían mi salida de la universidad.

"¿Qué haces aquí? Es la hora en que sales a la escuela" comenzó Itachi

"Les avisé que apartir de esta semana estaría en casa" respondí

"Ohhh, es cierto, por eso estás molesto de que tú no puedes llenar de besos a Sakura... A esta hora está en el hospital, ¿cierto?"

"... Mhm" asentí queriendo dejar de lado la plática. No estaba 'molesto', más bien, impaciente.

"¿Ya estás haciendo boca de puchero y frunciendo el ceño? Tonto hermano menor..."

"Ita, vamos, ha aguantado mucho de poder verla. Está bien que le dedique un par de sentimientos"

Cierto.
Ya va para un mes que no nos hemos visto como antes, casi para medio mes el hecho de que apenas retomamos las salidas espontáneas cerca de donde estamos.
Ahora,

"¿Cómo será cuando te adaptes a tu trabajo, pero ella tenga que empezar a buscar uno? Ya comienzan a ser sus procesos impares" parecía que Izumi me acababa de leer la mente.