Rey Celestial - Kakucho Hitto

Photograph

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El sonido de un click acompañado de un flash sacó de sus pensamientos a Kakucho.

Andabas como niña con un juguete nuevo, literalmente, tu madre te acababa de mandar por correo una cámara instantánea del extranjero acompañada de una nota con la descripción.

"Para que captures los momentos más importantes y feliz de tu juventud"

Sabías bien que esa no era la letra de tu madre, además eso no sería algo que ella diría, pues desde que comenzó a tener problemas con tu padre pareciera que construyó un muro de hilo a su alrededor.

Se había vuelto una persona fría y centrada en su trabajo, lo más seguro es que lo haya escrito su asistente o alguien más, pero eso no te quito el hecho de poder disfrutarla.

Habías estado tomando fotos de todo lo que te encontrabas, le habías tomado fotos a Ran a Rindou y a Kakucho cuando estaban distraídos, incluso hasta habías logrado capturar el momento exacto en que Shion se dio cuenta de que le estabas tomando una foto, teniendo como resultado una fotografía muy graciosa de él gritando mientras intentaba quitarte la cámara.

—¿Qué haces?—preguntó Kakucho, estaba sentando en una banca en el parque y tú te encontrabas sentada a los pies de esta en el césped que la rodeaba.

—Te tomé una foto—dijiste mientras esperabas a que se revelara la foto—¿Estás bien? Últimamente, te noto algo distraído.

—No es nada, solo estaba pensando algunas cosas que me dijo South— mencionó— ¿realmente te gusta mucho tomar fotos, no?

—Algo, creo que ayudan a formar recuerdos, inmortalizar momentos, ¿sabes?—mencionaste mientras veías el montón de fotos que tenías en tus manos, pasando una a una como
si se trataran de cartas—. Mira, esta es mi favorita—dijiste enseñándole una foto que Ran les había tomado a ti y a Kakucho juntos

No era la mejor foto, pero te gustaba porque Kakucho estaba a tu lado, todo era mejor cuando él estaba junto a ti.

—Oh, salimos bien—comentó tomando la foto.

—Estás muy distraído, ven siéntate aquí, a veces sentir el frío del suelo ayuda a pensar mejor—dijiste palmeando el césped a tu lado.

—Ya no importa—dijo sentándose a tu lado—. Últimamente te notas más relajada—comentó viéndote

—Bueno, ya no tengo a South encima mío. Lo que haga con la información que le di no es mi problema—dijiste.

—Quiere reclutar a Draken—comentó Kakucho y hasta cierto punto siento el alivio de sacar algo de los muchos secretos que guardaba.

—Uy, eso será difícil—dijiste.

—Las cosas se pondrán más difíciles a partir de ahora.

—Lo sé, deberíamos huir—dijiste recargando tu cabeza en su hombro.

—¿Qué?—preguntó Kakucho.

Era cierto que no disfrutaba mucho esta nueva vida, no disfrutaba estar al lado de South, pero tampoco se había planteado escapar.

—Huir, irnos lejos, solos tú y yo—dijiste recargando el dorso de tu mano en su pierna, a lo que él tomó tu mano y la entrelazó con la suya.

—No podemos hacer eso.

—¿Por qué no?, en casa nadie me extrañaría, viviríamos juntos, seríamos como una familia.

Estabas soñando despierta.