MIAMI, FLORIDA
PENTHOUSE DE ANGIE:
—Toma un poco de agua—dijo Brisa ofreciéndole un vaso con agua a Angie mientras se sentaba a su lado en el sofá que había girado a un lugar específico para que Angie no viera nada de los mensajes que habían dejado en algunas paredes y las ventanas.
Brisa besó la mejilla de Angie dulcemente y sintió la mirada de Martina sobre ella, pero no le importó. Angie la necesitaba y Brisa lo único que pensaba hacer era cuidarla a pesar de que Martina pasara hablando de eso toda la vida.
—¿Ya te encuentras más tranquila? —preguntó Lourdes al ver que finalmente el último de los analistas de sangre salía dejando el penthouse en silencio.
—Si—dijo Angie tomando un poco de agua y sintiendo a Brisa cerca de ella. Angie se giró para verla con sus ojos llenos de ternura y tomó su mano entrelazándola con la de ella mientras Brisa se pegaba todo lo que podía para que se tranquilizara—. Todo lo tranquila que puedo estar, pero sin duda mucho más tranquila que cuando llegué. Ayuda no poder ver las cosas y que Brisa arreglara un poco lo que está aquí enfrente para que no viera todo lo destruido ni los mensajes—Brisa se sonrojó un poco y bajó la mirada apenada al sentir todos los ojos sobre ella—. Aunque a mi alrededor todo esté roto.1
—Tienes una novia que se preocupa porque estés bien—dijo la policía rubia haciendo que tanto Angie como Brisa bajaran la mirada sonrojadas y Martina pusiera los ojos en blanco.
—Es lo único que importa—dijo Brisa y Angie se giró para verla, pero los ojos de Brisa la hicieron sonreír por primera vez desde que había entrado a su apartamento—. No escuché tu nombre—le dijo a la policía cuando la vio.
—Soy la detective María José—le extendió la mano a Brisa y la estrechó y luego a Angie que hizo lo mismo.
—Un placer—dijo Brisa educadamente y luego Lourdes se aclaró la garganta.
—Sé que no es el momento, pero necesito hacer unas preguntas—Angie y Brisa la observaron—. Yo sé que posiblemente te sientas con mucho estrés, pero es necesario saber que está pasando. ¿Tienes alguna idea de quién pudo hacer esto?
Angie dirigió su mirada a Brisa que asintió tomándole la mano y vio de reojo a Martina que analizaba la escena sentada frente a ellas.
—Diles—le dijo Brisa y Angie suspiró viendo a Lourdes fijamente.
—Todo empezó hace unos días cuando estaba en mi consultorio y llegó un paciente nuevo. Su nombre es Franco Noriega y me empezó a narrar su vida. Yo estaba muy enferma y no presté atención a muchos signos inequívocos de que estaba inventando una historia, y allí fue donde empezó todo.
La historia continuó mientras Brisa escuchaba algunos detalles que no había escuchado antes y sus ojos se juntaban un momento con los de Martina que la veía fijamente en sus ojos estaban escritas miles de preguntas. Brisa sabía que todas esas preguntas se derivaban del beso. ¿Qué la había poseído para besar a Angie frente a todo el mundo? Brisa no lo sabía, pero le había parecido lo correcto y lo necesario para demostrarle que estaba allí, que la apoyaba, y que la quería.
Angie era una sumamente especial para ella, con quien que compartía aspectos de ella misma que no había compartido con nadie más. Angie tenía algo especial que provocaba que Brisa se sintiera tranquila con ella. La admiración, el respeto, el cariño, y la ternura que Brisa le tenía a Angie era algo inquebrantable y eso la había llevado a besarla frente a todos. Lo hizo porque lo sentía de esa forma, lo hizo porque muy dentro de ella no había podido resistirse.
Esa noche su relación con Angie había cambiado. Brisa no lo podía negar porque se estaría mintiendo a sí misma. Habían pasado a algo más que simples besos inocentes. Era lógico. Los besos cada día se habían ido convirtiendo en algo más profundo. Las dos eran mujeres jóvenes con deseos y era lógico que en algún momento ese deseo saliera a la luz y esa noche lo había hecho. Mirando el perfil de Angie mientras hablaba con Lourdes narrando toda la historia de su vida sin entrar en muchos detalles Brisa se dio cuenta que si las circunstancias hubieran sido distintas posiblemente en este momento ella y Angie estarían haciendo el amor.
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The Sweetest Love ADAPTACIÓN (brangie) CANCELADA
Fiksi PenggemarNinguna de las dos buscaba el amor, pero el amor las encontró a ellas. Brisa Domínguez necesitaba ayuda urgente, su hija Emily, de diez años había recibido un ultimátum: debía mejorar su conducta o sería expulsada del colegio al que asistía por mal...