乂 스물 하나 -- 21 乂

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Rompiendo su propia promesa, Wook volvió a acercarse a aquella pequeña, era increible como se miraba, su cabello brillaba con tanta intensidad que hasta podía resultar majestuoso, su piel tan blanca y esos ojos. Todo dentro suyo se debilitaba estando cerca y hasta comenzaba a sentirse celoso de SungMin y de las nanas que la cuidaban a diario...quería sentir como era sostenerla en brazos pero siempre al tratar de tocarla esas corrientes dolorosas lo recorrían y sólo se iba.

-Eres tan afortunado...-susurró hacía SungMin aunque sabía que no podría escucharlo-al menos tu...puedes cuidar de tus hijos...-jadeó con un par de lágrimas amenazando con escapar, sin embargo las detuvo con sus mangas y se dio la vuelta sentándose repentinamente entre los matorrales, miró sus manos tratando de imaginar de alguna manera como habría sido tener a su hijo, después de no poder contener más el llanto sólo lo dejó salir y abrazó su vientre plano como queriendo protegerlo, KyuHyun pudo verlo a lo lejos pero evito acercarse, todo este tiempo lo había visto ser demasiado fuerte y enfrentar las cosas con mucho carácter, y ahora mismo pensaba que dejarlo sacar todo eso era lo que necesitaba. Entonces, así como las hojas vuelven a los árboles después de haberlas perdido por completo, su menor quizás recuperaría las esperanzas y olvidaría de a poco esa gran ira.

Wook lloró como nunca lo había hecho, golpeó el suelo y golpeó árboles también, causó una enorme destrucción en el bosque como resultado de sus fuertes sentimientos y después de eso los aldeanos comenzaron a atribuirlo a una especie de espíritu o a uno de los vampiros de las montañas que habían escapado. Comenzaron varias búsquedas y la investigación de Wook tuvo que parar, sin embargo volvió sólo a casa pues KyuHyun permanecería ahí, le fue escrita una carta con órdenes de La Emperatriz para que se le permitiera el hospedaje en el palacio por tiempo indefinido debido a su "Protección" de enemigos que deseaban su cabeza. No quería recurrir a eso pues era demasiado arriesgado pero al final fue su única opción, de esa manera, lo mantendría al tanto aún estando lejos y también tendría una mejor oportunidad para cortejar a La Reina.

Ambos ejércitos comenzaron a ser preparados entonces, KyuHyun entró al palacio sin problema alguno y de esa misma manera fingía dar paseos por los alrededores para tratar de encontrarse con SungMin. En una de esas veces, pudo verlo pasear con sus damas, así que hizo lo posible por toparselo de frente fingiendo que estaba distraído, Min admiraba el paisaje así que cuando chocó repentinamente todos los colores se le subieron al rostro y bajó la cabeza, solía olvidar a veces que ya no era un simple sirviente del palacio, así que su primera reacción fue inclinarse para pedir disculpas.

-L...Lo...siento mucho...no vi por donde iba...

-Su Alteza no...quién debería disculparse soy yo...fui demasiado imprudente...por favor...perdone a este simple sirviente...-KyuHyun se inclinó algo confundido, las damas ayudaron a que Min recobrara la compostura y se levantara-Mis más grandes disculpas...por favor...se lo ruego...fue un accidente...

-Le...levantate...-tragó saliva buscando sonar un poco más autoritaro si tener tanto éxito en el proceso-dejame verte...

KyuHyun obedeció y se levantó viéndolo directamente a los ojos, el menor se quedó totalmente quieto y tragó saliva, su corazón dio un enorme vuelco en cuanto sus miradas se encontraron, su respiración por inercia se agitó tambien-¿Quien...¿Quien eres tu?...

-Me disculpo nuevamente Alteza...es mi primer día en el palacio y ya he creado problemas..-hizo una reverencia para presentarse-Mi nombre es Cho KyuHyun...soy el General del ejercito que Su Majestad La Emperatriz comanda...fui enviado a su palacio por protección...las guerras son crueles ahora...

-¿General?...-susurró algo sorprendido-entonces La Emperatriz fue quien te envió aqui?...-estaba demasiado nervioso ante él y ya no sabía que responder así que carraspeo la garganta-bien...yo...espero que su estadía en este lugar sea placentera...tendrá todo lo que necesite y sobre la protección no se preocupe, como ya debe saberlo todos aquí son vampiros entrenados...tiene la suficiente seguridad.

-Lo agradezco Alteza...su bondad es muy grande.

-Debo dejarte...tengo algunos asuntos reales que atender, quizás...-desvió la mirada apenado-puedas visitarme después para...discutir sobre las batallas...si hay guerra significa que cada reino debe estar preparado...-despues de decirlo salió de ahí tan rápido como pudo, aún se sentía nervioso y sus piernas temblaban tras cada paso, ¿Que había sido eso?

KyuHyun fue directo a su habitación y comenzó a escribir una carta para RyeoWook, en ella redactaba sus progresos con Min y también uno que otro hecho irrelevante del palacio, como las noticias de los primeros pasos de una de las princesas y las primeras palabras de otra, aunque todo eso era simplemente para que su emoción al contar sobre su cita no se viera tan vana.

Después de unos cuantos encuentros "Casuales" en el lapso de un par de meses, el momento tan esperado llegó, SungMin llamo a KyuHyun a sus aposentos para hablar, preparó una comida bastante completa y lo hizo personalmente, como queriendo impresionar. Aunque no tenía porque hacerlo se sentía obligado por un extraño sentimiento que no entendía. Encontrarse con ese General era todo lo que esperaba al salir a pasear a diario e intercambiar unas cuantas palabras hacía que su corazón se acelerara tanto que sentía como le faltaba el aire por eso. Y también en esos momentos extrañaba demasiado a RyeoWook pues al menos con el podría hablar sobre sus sentimientos.

De entre todos sus trajes, escogió el más bonito que tenía y pidió que lo arreglaran con la joyas mas elegantes que había en el palacio. Sabía que YeSung no lo amaba en lo absoluto, y no iba a vivir su vida atrapado en esa soledad, por KyuHyun sentía tanto sin siquiera estar a su lado y ese día tomaría el primer paso de confesarse ante él, le hablaría de sus sentimientos y si no resultaba satisfactoriamente simplemente se resignaría.

Cuando avisaron de su llegada, Min se apresuró a sentarse en su lugar despues de ver que todo estaba perfecto para recibirlo, las puertas se abrieron, dejando ver de frente esa delgada pero atractiva figura y esos ojos, incluso soltó un suspiro sin darse cuenta. Después de todo aún era un jovencito soñador.

-Alteza...es un honor haber recibido su invitación...-se sentó frente suyo echando un vistazo rápido a la mesita donde se hallaba toda la comida perfectamente servida-si me permite decirlo...su ropa es...tan...colorida...-no sabía bien como hablar con él sin llegar a decir algo demasiado irrespetuoso o indebido.

-Ah...colorido...-Min sonrió levemente decepcionado, antes sólo usaba vestidos con colores un poco oscuros, pero justo hoy se había puesto uno rosado con algunos toques de otros colores pasteles, planeaba no verse tan demacrado o triste.

-Oh no...no lo malinterprete Alteza...quiero decir...que usted...se ve hermosa, ¿Puedo decir eso?...-lo miró con nerviosismo, la sonrisa en el rostro de Min regresó y asintió.

-Agradezco sus cumplidos...es una...reunión importante...-tomó la tetera que albergaba el vino de arroz y le sirvió un poco a KyuHyun, sirviéndose un poco a el mismo después.

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•La Concubina del Vampiro Y Las Flores De Sangre•✿YeWook✿ ⁝⁞⁝⁞TERMINADA⁝⁞⁝⁝Donde viven las historias. Descúbrelo ahora