RyeoWook inicio la ceremonia viendo de frente a KyuHyun, este llevaba puestas ropas blancas y su rostro como siempre no mostraba expresión alguna. Algunas velas alumbraban la habitación y algunos guardias de confianza de Wook cuidaban las puertas para que nadie que no debía estar ahí se acercara.
-Recuestate en la cama...ahora...y quitate la parte de arriba de la ropa-Wook señaló el futón con sus largas uñas, KyuHyun miró las mantas.
-Creí que solo me convertiría...no que también me usaría como consuelo...-bromeó obedeciendo y recostándose, RyeoWook rió burlándose.
-Sigo siendo tu Emperatriz así que cierra la boca, dos cosas. La primera...vas a morir y no sé cuanto tiempo estarás muerto antes de convertirte, así que es mejor que sea recostado. La segunda...no quiero ensuciar la ropa y es incómodo el cuello...telas como esas le cuestan mucho al palacio..-sacó sus colmillos y les pasó la lengua saboreando la sangre que iba a probar, olía tan bien y dulce. Se hincó a un lado del futón y tomó fuerte a Kyu por el pecho y la cabeza para evitar que se moviera.
Llamó a un par de damas para que se acercaran con agua y pañuelos para limpiar la herida después y así evitar enloquecer con su sangre.
Cuando lo tuvo bien sujeto al suelo, se acercó, aspiró un poco para encontrar el lugar exacto y lo mordió, KyuHyun se resistió y se removió debido al fuerte dolor que le producía, pero le era imposible apartarse, Wook en verdad era más fuerte de lo que había imaginado. Un ardor horrible pasó por sus venas justo después de que se apartara el menor, sintió que el aire le faltaba y se retorció tratando de frenar el ardor sin éxito.
-Calma...-Wook limpió su boca con un pañuelo y suspiró aliviado al ver a las damas hacer su trabajo. Ver a Kyu retorcerse así lo hizo reír un poco-no cabe duda que los humanos son tan débiles...ah...bueno, despues de todo tambien fui asi...-suspiro hondo y se hinco a un lado de KyuHyun, tomando su pulso-vas a estar bien...esto va a ser bastante rapido asi que no te preocupes, no vas a morir por mucho tiempo, tienes un cuerpo fuerte, tu sangre era deliciosa.
-Esto...espero...que no te aproveches de esto maldita bruja...-era tan doloroso que poco le importaba que esa persona fuera Una Emperatriz, el aliento lo abandonaba de a poco y su vista se nublaba, Wook no dijo nada, recordaba esa sensación que te daba el estar muriendo. Como perdías las fuerzas en las piernas, en los brazos y respirar se hacía mucho más difícil, la vista borrosa y esa pantalla negra justo antes de perder la consciencia. No sabía con exactitud si eso era morir pero era lo último que recordaba así que imaginaba que KyuHyun estaba pasando por lo mismo.
De pronto esa arrogancia que había adquirido fue revocada y una lástima enorme lo invadió, se obligó a sí mismo a tomar la mano del mayor y darle un apretón mientras daba ese último paso, KyuHyun era un humano y los humanos sienten miedo, así que no dudo ni un poco en apretarle la mano para sentirse seguro. Cuando Wook sintió que el agarre se hizo débil y que poco a poco lo soltó, se apartó y le hizo una seña a algunos de los eunucos para que se lo llevaran a una de las habitaciones y lo mantuvieran a salvo mientras despertaba.
-Cuando despierte va a estar confundido y va a tener demasiada hambre...asegúrense de que tengan lo suficiente para dárselo si no quieren que se los coman...-y de pronto volvió a ser aquel chico frio, se dio la vuelta y caminó directo a su habitación sin decir una palabra más.
Miró el horizonte mientras el sol salía, miró sus manos y después miró su reflejo en el lago bajo su balcón, recordaba que mucho antes se miraba tierno, alguien vulnerable pero también era dulce y fácil de engañar. Sin embargo su rostro ahora se había vuelto más maduro, quizás hasta a veces tenía una expresión de rudeza sin quererlo. Quería recordar a toda costa algo que lo hiciera cambiar de opinión pero no hallaba nada en su corazón ni en su memoria.
Quizás su odio por YeSung iba más allá y se preguntaba si en verdad todas aquellas cosas que le había dicho eran verdad, que ellos tuvieran una familia, que alguna vez ellos hubieran sido felices, la idea le parecía tan vaga. Apretó el barandal con mucha fuerza al solo no poder acordarse, fue tan brusco que la madera de partió y solo se apartó soltando un suspiro. Entonces llamó a un par de criados para que se encargaran de buscarle reparación, se acomodó la ropa y comenzó a caminar con sus damas a la sala del trono, tenían bastantes cosas que hacer y es que su coartada no solo se trataba de robar el poder del Imperio. Sino que con eso también llevaba una gran responsabilidad, sobre sus hombros ahora cargaba el peso de cuidar de una nacional entera, era bastante duro pero al menos así, sus oportunidades de mejorar un poco las cosas y de sanar también sus heridas eras altas.
Al llegar ahí los ministros y la corte ya lo esperaban, les hizo una reverencia y se sentó para escuchar lo que tenían para decirle.
-El general ha desaparecido y no lo localizamos por ningún lado...lo han buscado y tenemos que haya sido secuestrado por los enemigos...
-Calma...envié al General a hacer un viaje importante...volverá en un par de días, quizás tres, así que deben mantenerme al tanto de todo lo que pasa y tener al ejército alerta en su ausencia...
Sabía que quizás podía tardar un poco más pero confiaba en su poder de persuasión, además con su magia era fácil hacerlos creer lo que fuera. KyuHyun era una pieza clave para su plan, debía encargarse de que estuviera a salvo y bien.
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•La Concubina del Vampiro Y Las Flores De Sangre•✿YeWook✿ ⁝⁞⁝⁞TERMINADA⁝⁞⁝⁝
Hayran KurguJoseon año 1438, El Príncipe Heredero Kim Ryeowook que fue ocultado por su familia desde el día en que nació, repentinamente se vio tragado por una estúpida profecía de otro mundo de la que ni siquiera tenía conocimiento. En un abrir y cerrar de ojo...