•La Concubina del Vampiro Y Las Flores De Sangre•✿YeWook✿ ⁝⁞⁝⁞TERMINADA⁝⁞⁝⁝

乂 열하나 -- 11 乂

Reanudamos la historia después de tantos meses perdida 🤭, y volvimos con nada más y nada menos que un capítulo medio perturbador 🔥 disfrutenlo~...

Volvieron al palacio, Wook tomó un descanso y después fue a encontrarse con su hija y SungMin.

—Escuché que hayaron al hijo de Su Majestad...—Min bebía algo de té, Wook abrazaba a su hija con demasiada emoción.

—Así es...no se ha despegado de él, supongo que ha encontrado a su heredero varón...estoy tan feliz de haber regresado Min, ahí ocurrieron cosas desagradables —recostó a la pequeña cuando comenzó a quedarse dormida—estoy en cinta Min...—susurró con cierta vergüenza.

—¿Cómo?...YeSuk...

—¡No!...es de YeSung...es muy pronto y los médicos dicen que no me esperan momentos muy buenos.

—Wookie...yo voy a ayudarte...—Min tomó su mano con una sonrisa.

La puerta se abrió, entró YeSung y después un par de damas, una sostenía al pequeño dormido, de un momento a otro aquellos enormes y tiernos ojos se abrieron, miró fijamente a Wook y le estiró los brazos.

—A partir de ahora cuidarás de él y lo educarás para convertirse en el próximo Rey de esta tierra—YeSung volvía a tener la misma frialdad de siempre.

—Como usted ordene...—Wook recibió al bebé sin protestar, lo acurrucó justo al lado de su hija.

—Debes notificarme de cualquier sensación extraña ya que tu embarazo es peligroso, de igual manera debes tener cuidado. Min, tu tendrás una dama en todo momento, así ella nos dirá cuando vallas a dar a luz y podamos ayudarte.

—Muchas gracias...—Min hizo una pequeña reverencia.

—Wook...quiero verte esta noche en mi habitación...—sin decir nada más salió de ahí.

Wook sabía para que lo había llamado así que cuando oscureció fue con las damas para que le colocaran las ropas correspondientes.

—Su Majestad...La Reina está aquí...

Las puertas se abrieron después del anuncio y Wook entró en la habitación.

—Buenas noches...—YeSung se acercó a él, hasta poder abrazarlo por la espalda, pasó ambas manos en su vientre y lo acarició un poco— supongo que YeSuk no te trató bien...

Wook bajó la mirada con algo de vergüenza.

—Sé cuales eran sus intenciones no es necesario que me lo digas...—comenzó a repartir algunos besos en su cuello y mejillas—haré que olvides todo ese asunto—lo repegó más a su cuerpo para que pudiera sentir la erección que poco a poco crecía bajo su ropa.

—Su Majestad...—Wook se estremeció un poco bajo su tacto, comenzaba a sentirse excitado también.

—Llamame YeSung aquí...—caminó hasta quedar frente suyo, lo tomó por las mejillas y comenzó un beso que lentamente los fue sumiendo en una necesidad extrema por sentir placer.

Lo condujo lentamente hasta las mantas, lo recostó y abrió su ropa para poder observar su cuerpo desnudo y tembloroso.

—Sigues siendo igual de hermoso que cuando llegaste a mi, el embarazo no te cambio en nada.

—Intenté cuidarme lo mejor posible para continuar siendo de su agrado.

—Tu siempre serás de mi agrado, lamento lo que dije aquella ocasión con MinKyung...—le retiró lo que le sobraba de ropa y lo mismo hizo consigo mismo.

YeSung se inclinó sobre su cuerpo para seguir repartiendo besos, hasta que lo tomó por los muslos, levantó sus piernas y en un rápido movimiento lo penetró, Wook curveó la espalda y soltó un fuerte gemido, había tocado justo en el punto específico que se debía tocar.

El ritmo aumentó poco a poco, los gemidos que el menor soltaba resonaban en toda la habitación y sinceramente le importaba poco que los demás escucharan.

Justo cuando estaba a punto de terminar, YeSung paró todo movimiento súbitamente y le sonrió

—¿Qué sucede?—apenas y podía pronunciar palabra de tan agitado que estaba.

—Nunca haz estado con una mujer ¿cierto?...—YeSung se levantó y acomodó un poco su ropa.

—N...no...¿a donde quieres llegar con eso?—susurró  recuperando el aliento.

—¡Que la más joven de las damas entre!...¡Cualquiera que esté ahí!

Wook de inmediato cubrió su cuerpo, estaba tan confundido. Las puertas se abrieron de par en par dejando entrar a una joven dama de al menos 19 años.

—Ven acá Wook...—le tendió la mano pero el menor negó suavemente —que vengas te digo...—no alzó la voz, pero usó aquel tono autoritario que lo hacía estremecer de miedo. Se levantó aún cubriéndose y lo miró.

—Su Majestad...—la dama mantenía la mirada baja.

—Quitale la ropa Wook...—de nuevo usó aquel tono, pero esta vez el castaño negó precipitadamente.

—Su Majestad, no creo que eso sea correcto...—podía darse cuenta del miedo que la chica tenía.

—¿Vas a desobedecer una orden de tu Rey?—YeSung se acercó peligrosamente a él, Wook no contestó, entonces el mayor tomó a la joven y le arrancó la ropa. Después la recargó en uno de los muebles cercanos—hazla tuya ahora...

—Pero su Majestad...—la escena le parecía de lo más bizarra, sus ojos rápidamente se cristalizaron y negó.

—¡Hazlo!—gritó con furia, llevándolo justo detrás de ella.

—No puedo hacerlo Su Majestad, no es apropiado...—escuchaba el llanto de la joven, era como si las cosas que YeSung le hacía se repitieran con él como victimario.

—¡Es una orden Real!—gritó nuevamente, de algún lugar sacó una fina cinta de cuero, y lo golpeó justo en la espalda desnuda—no tengas piedad...

Wook no tuvo otra opción más que tomar a la chica por las caderas, acercó su rostro al de ella y suspiró profundamente.

—Perdoname...—susurró entrando en ella de una sola y nada fácil estocada, el llanto de la joven dama se hizo más notorio y por su parte el menor era incapaz de moverse, solo sollozaba bajo.

—¿Tengo que hacerlo todo yo?...—el mayor lo tomó por las caderas para penetrarlo de la misma forma que antes, tomó también sus caderas de la chica y lo embistió, creando un impulso que hizo que Wook también embistiera a la joven dama.

Wook sentía un nudo en la garganta que le quemaba poco a poco, pero lo que lo hacia sentirse realmente miserable era el hecho de existir en ese preciso momento.

Después de un rato YeSung aumentó lastimosamente las embestidas, haciendo que terminara rápidamente y por fin los soltara a ambos. Se dejó caer en el suelo, sin poder creer lo que acababa de pasar.

—¡Lárgate!—YeSung le entregó su ropa a la mujer y poco después ésta se fue.

Wook le dedicó una mirada llena de odio, se levantó y él mismo tomó toda su ropa para ponérsela.

—No puedes negar que te gustó lo que pasó...—YeSung lo tomó por la cintura —mira...—le señaló algunas gotas de sangre en el suelo—deberías estar agradecido, tomaste su primera vez...

—Eres despreciable...eres...—se soltó a llorar—eres un maldito enfermo —salió corriendo lo más rápido que pudo. En el fondo esas palabras también iban para si mismo, aunque sabía que no era su culpa.

✿✿