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Llego el momento..

llego el momento donde la diversión comenzara para el azabache y el sufrimiento eterno para la pelirosada

que puede ser peor que un sapo muerto? No es taaan difícil lo que tienen que hacer. Simplemente abrir el interior del sapo, sacar todos sus organismos, verificar cual es cual y mirarlo en el microscopio, realmente facil!

el salon de clases fue bombardeado por susurros y murmullos de los propios estudiantes, para ser mas directos de las quejas de las parejas y la actividad que tenían que hacer. Al parecer, la única pareja pacifica del lugar eran los queridos novios secretos, que en si, solo se mantenia un silencio incomodo entre ellos dos.

Damian tomo entre sus manos un bisturi al cual se lo entendió a su compañera para que diera el honor del primer paso. Esta frunció el ceño e inflo sus dos mejillas, causándole ternura y gracia al azabache. Ella la tomo entre sus dedos temblorosos y con una lentitud los dirigió al pobre anfibio que se encontraba mas que muerto.

Después de algunas dudas, coloco el bisturi en la zona que tenia que cortar. Al cual era el centro del estómago del animal. Damian al no tener alguna acción interesante de la chica, la jalo levemente hacia el, desde la cintura de la joven hasta tenerla arrinconada contra el pecho del azabache.

-si no quieres mirar mejor cierra los ojos, yo me encargare.- con una leve pero dulce voz, le susurro al oido izquierdo a la pelirosa. Esta aun con los nervios de punta hizo lo dicho, cerro lo mas fuerte que pudo, esperando que la clase se acabe en menos de un parpadeo.

Damian con su mano derecha, toma el brazo con el que tenia el bisturi la joven, tomando el control de el, entrelazo entre sus dedos las frias manos de ella e inmediatamente introdujo el filoso bisturi en el estómago de la víctima.

Damian aprovechando que la mayoría de estudiantes tenían su atención en otra parte, se acerco aun mas a la joven hasta tenerla lo suficientemente cerca. Con su mano izquierda la dirigió a uno de los muslos de la pelirosada, al cual se mantenía cubiertos por la falda del uniforme.

-Oye..- la joven no era capaz de producir palabra alguna sin tartamudear, el azabache realmente apreciaria cada minuto de aquella clase. Con una sonrisa maliciosa sigue con el procedimiento que tenia en diferentes manos, en su derecha con el sapo, abriendo con delicadeza el interior de el sapo, dejando al descubierto todo su interior. Y con su izquierda, levantando levemente la falda hasta sentir la piel suave y erizada de la joven.

-Tengo que aprovechar este regalito- sigilosamente le hace una mirada asertiva a la profesora. Al cual rápidamente entendía el proposito de esta, sin pensarlo dos veces se nego rotundamente, causando que el mal humor del chico suba un poco, pero después de escuchar un quejido en forma de suspiro de su pelirosa volvio a su estado de buen humor

-Tsudere..- susurro entre dientes la pelirosa, quien tenia el rostro al igual que un tomate! Totalmente rojo.

-cuantas veces te tengo que repetir que no lo soy...- susurro de manera ronca al oido de la joven, provocando que esta solo se estremeciera.

algunos estudiantes notaron aquella escena. Pero todos se encontraban en la zona de atras del salon, asi que no eran capaces de apreciar tan bien la escena.

todos los presentes sabían perfectamente que no podrían interponerse en el camino del Lord Desmond, menos dos personas, sin contar claramente la que se encontraba junto a el.

Los dos lacayos sorprendidos y furiosos sin alguna razón, se acercaron rápidamente a Damian, quien se encontraba ocupado jugando con el delicado cuello de la joven, dejando uno que otro beso húmedo en su lugar, aparte sin olvidar el pequeño detalle que el ya estaba llegando al punto de seguir subiendo la falda de la chica. Aquello no se podía ver desde atras asi que era un punto mas a la profesora, siendo que, ella Fue la que tomo la decisión de colocar todos los demas grupos atras excepto el del azabache, asi logrando que no se vea exactamente lo que haga.

Damian mayormente no se comportaba de esta forma cuando tenia a su chica tan cerca, pero. Que se puede hacer? Algunas veces las hormonas cambian rotundamente en menos de un segundo.

-Lord Damian!

rápidamente Ewen hablo, Damian en cuestion de segundos reacciono y dejo de hacer sus actividades 'recreativas'.

-que hace con esta mocosa? Le va a pegar los piojos!

Emile de forma burlona, toma el control de la discusión recien comenzada. Damian suspiro tratando de calmarse.

-Dejen de llamarla asi, parecen niños pequeños con esos insultos de 6 años.

con una voz ronca y perezosa Contesto de mala gana, se recosto al espaldar de su puesto, su novia por fin logro tomar la compostura y reaccionar con la situacion.

Miro directamente la bandeja que se encontraba enfrente de ella, encontrándose paralizada por el sapo ya abierto por la mitad. miro a duras penas a Damian, al cual después de un rato se dio cuenta y sonrió en forma de burla.

-quieres que te siga ayudando con eso?- Damian se acomodo acercándose nuevamente a la chica, que simplemente asintio temblorosa. Antes de que vuelva a la posición de antes, Damian le dedico una mirada fulminante a sus dos lacayos, quienes rápidamente desaparecieron de aquella escena volviendo a sus puestos como simples cobardes.

-Ja!- becky al ver a su compañero regresar, como si se tratara de un perro con la cola entre las patas. Empezo a reir burlonamente, este solo se dedico a mirar a Damian, quien no encontraba mas felicidad en aquel momento. -Te quedaras ahi viendo como estupido o me ayudaras con esto? Porque te lo dire de una vez que no tocare a ese sapo!